México D.F. Martes 2 de diciembre de 2003
EU insiste en que abatió a más de 50 guerrilleros iraquíes, pero nadie ha visto los cadáveres
Mueren 8 civiles en combates con las fuerzas de ocupación en Irak
Corea del Sur enviará más soldados al país invadido; España desplegó otros 200 efectivos
AFP, DPA Y REUTERS
Samarra, 1Ɔ. de diciembre. Al menos ocho civiles murieron y 60 resultaron heridos el domingo en la ciudad de Samarra tras los enfrentamientos entre las fuerzas invasoras y la resistencia iraquí reportados por el mando militar estadunidense, el cual insistió en haber abatido a 54 guerrilleros, aunque no se informó de cadáveres en el lugar.
Hubo confusión sobre la cifra de muertos e incluso algunas autoridades y funcionarios de salud iraquíes desconfiaron de las cifras proporcionadas por los militares estadunidenses. Médicos del hospital de Samarra, 120 kilómetros al norte de Bagdad, dijeron que tenían conocimiento de seis muertos en el tiroteo, que duró casi toda la tarde. La policía reportó que la cifra de muertos era de ocho, incluido un peregrino iraní.
El anestesista Bassen Ibrahim informó que el domingo recibieron "los cuerpos de ocho civiles, entre los cuales hay una mujer y un niño, y más de 60 personas fueron hospitalizadas por heridas de bala o de esquirlas de obuses disparados por el ejército estadunidense".
La policía iraquí indicó que ocho personas murieron, entre ellas un peregrino iraní, y ocho fueron heridas cuando su autobús fue blanco de disparos, a 30 metros del hospital. De acuerdo con el coronel Mohamad, 20 personas resultaron heridas cuando rezaban. Este lunes se pudo ver el impacto de un cohete en uno de los muros de la mezquita Al Shafii, a 50 metros del hospital.
El portavoz del ejército estadunidense, Mark Kimmitt, en conferencia de prensa en Bagdad, insistió en que 54 "combatientes" murieron en Samarra, "un estimado de 22 enemigos resultaron heridos, y uno permanece cautivo".
Samarra se encuentra en el llamado triángulo sunita, entre Bagdad, Tikrit y Ramadi, donde con frecuencia ocurren ataques contra las fuerzas invasoras encabezadas por Estados Unidos.
Un soldado estadunidense internado en un hospital militar murió este lunes a causa de heridas de bala recibidas cerca de la localidad de Habbaniya, al oeste de Bagdad. Según un vocero militar, "tres iraquíes fueron capturados y son interrogados en relación con el ataque".
Con este deceso, el número de soldados estadunidenses muertos en Irak asciende a 193 desde que el presidente George W. Bush declaró el fin de los principales combates el pasado 1Ɔ. de mayo.
Este fin de semana una serie de emboscadas a lo largo de Irak también cobraron la vida de siete agentes de inteligencia españoles, dos contratistas surcoreanos, dos diplomáticos japoneses y su conductor iraquí, un contratista colombiano y dos soldados de Estados Unidos.
La gran mayoría de los iraquíes (79 por ciento) no confía en las fuerzas invasoras, reveló un sondeo efectuado por primera vez en más de 3 mil hogares de Irak, mismo que fue presentado este lunes. La encuesta, realizada por sociólogos de las universidades de Bagdad y Dohuk, en colaboración con la británica de Oxford, concluyó que 78 por ciento de los iraquíes tampoco confía en los partidos políticos.
Por otro lado, el primer ministro japonés, Junichiro Koizumi, defendió este lunes la continuación de los preparativos para enviar soldados a Irak pese al asesinato de dos diplomáticos de su país, y al rechazo de la mayoría de la población japonesa.
El primer ministro japonés acusó a los autores de este atentado de querer "impedir la reconstrucción de Irak y provocar el caos. No podemos dar marcha atrás o será el mundo entero el que sufra las consecuencias". Interrogado sobre el impacto de la muerte de los dos diplomáticos en el envío de soldados a Irak, el vocero del gobierno, Yasuo Fukuda, afirmó que Tokio "tomará una decisión definitiva después de haber examinado minuciosamente la situación".
El presidente de Corea del Sur, Roh Moo Hyun, condenó también la muerte de dos de sus ciudadanos en Irak, en un hecho que calificó de "intolerable e inhumano", debido a que fue contra civiles.
No obstante, el asesor de seguridad nacional sudcoreano, Ra Yong Il, aseguró que Seúl mantiene sus planes de enviar un contingente de 3 mil soldados adicionales a la nación árabe. Corea del Sur cuenta hasta este momento con 700 elementos desplegados.
A su vez, el presidente del gobierno español, José María Aznar, envió hoy 200 militares que serán desplegados en la zona de Diwaniya, donde se encuentra la brigada Plus Ultra formada por efectivos españoles y centroamericanos. Según el Ministerio de Defensa español, realizarán tareas de apoyo logístico, como abastecimiento de recursos, apoyos en el mantenimiento del material bélico, transportes de personal y material, y asistencia sanitaria, reportó Armado G. Tejeda, corresponsal de La Jornada en Madrid.
Detienen a guardias de Hussein
La policía iraquí y el ejército estadunidense detuvieron el domingo a dos generales de la guardia republicana de Saddam Hussein en la norteña ciudad de Mosul cuando se encontraban en un café, indicó un oficial de policía iraquí que participó en el arresto. Según Fathi Abdalá Zbeidi, uno de ellos llevaba 40 mil dólares.
Los dos detenidos son sospechosos de estar relacionados con el número dos del antiguo régimen, Ezzat Ibrahim al-Duri, el hombre más buscado por las fuerzas angloestadunidenses después de Hussein, afirmó.
También en Mosul, tres sospechosos de pertenecer a la red Al Qaeda, de Osama Bin Laden, fueron detenidos por los estadunidenses, anunció el lunes un portavoz militar. Los tres fueron detenidos hace dos semanas y transferidos a Bagdad, afirmó el comandante Hugh Cate, de la 101 división aerotransportada. Interrogado acerca de si los sospechosos eran iraquíes o extranjeros que se habían infiltrado en Irak, el oficial dijo no conocer su nacionalidad.
El diario The New York Times afirmó que Hussein trataba de obtener un línea completa de producción de misiles de Corea del Norte antes de la invasión estadunidense, con la oferta de Siria de una ruta de tránsito para enviar los materiales. Corea del Norte nunca despachó su parte del trato luego de un pago de Hussein por 10 millones de dólares, indicó el rotativo. El supuesto pacto fallido fue revelado por primera vez a principios de octubre por el experto en armas de Estados Unidos David Kay, quien dirige el grupo de investigación sobre Irak creado por Estados Unidos para buscar armas de destrucción masiva, agregó el Times.
|