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México D.F. Miércoles 3 de diciembre de 2003
Realizan foro contra la ''desincorporación'' de instituciones culturales y científicas
Fazio: si petróleo y electricidad se privatizan, la investigación científica correrá la misma suerte
CESAR GÜEMES
Si se privatiza el sector petroeléctrico, sostiene el periodista Carlos Fazio, ''no habrá, a la postre cine ni diarios ni libros, ni investigación científica que no terminen privatizados en manos de corporaciones multinacionales". La toma de posición tuvo lugar la noche de este lunes en el contexto del foro ''México después del 2 de julio y el mundo actual", que se desarrolla en Casa Lamm, en el cual participaron también el cineasta Jorge Fons y Enrique Herrera, diputado por el Partido de la Revolución Democrática, en su momento primer director de Notimex.
El foro fue convocado para protestar contra la iniciativa gubernamental de desincorporar 18 instituciones públicas de los rubros cultural y científico, así como gravar con 10 por ciento de impuesto a libros, revistas y periódicos. ''El Estado mexicano funciona como un Estado de bienestar para los ricos -explicó Fazio-, un poderoso Estado niñera, como lo llama Noam Chomsky, que se encarga por un lado de distribuir los recursos públicos de la nación, incluidos nuestros impuestos, a un puñado de ricos que lo son aún más que antes; y por otro lado de reducir el nivel de vida del grueso de la población marginándola más que antes."
Más tarde, concluyó el periodista: ''Como movimiento intelectual, como gente de la cultura, no podemos ni debemos conformarnos con la eventual postergación de las medidas regresivas respecto a cinematografía, libros, publicaciones y centros de investigación, para luego callar silenciosamente cuando se esté entregando el país por todos los medios al capital multinacional, nacional y extranjero. Si se privatiza el sector petroeléctrico no habrá, a la postre, cine, ni diarios, ni libros, ni investigación científica que no terminen privatizados en manos de corporaciones multinacionales, en manos de la tiranía privada del capital".
En su turno, Fons señaló que la industria cinematográfica nacional padece severos problemas, puesto que mientras ''los sectores de distribución y exhibición se mantienen a salvo, la producción está a punto de desaparecer. La exhibición está garantizada porque se muestra casi sólo el material de Hollywood: el bueno, el malo y el peor, que es la mayoría de lo que nos llega". Con su falta de apoyo, dijo el cineasta, ''el Estado quiere evitarnos la tarea de pensar".
Enrique Herrera, a su vez, fue tajante al recordar que en marzo de 2001, en la Cámara de Diputados, presentó un acuerdo que implicaba que si sólo se contaba para la nación con medio escudo, entonces sólo había medio país y medio presidente, por lo cual ''como lo hicieron los ecuatorianos con Bucaram, era necesario que mandáramos al presidente a su casa. Había que hacerlo".
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