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ASESINAN DE DOS BALAZOS A EMPRESARIO EN CIUDAD JUAREZ

Un alto ejecutivo de la radio mexicana fue ejecutado este jueves de dos balazos en la cabeza, en la fronteriza Ciudad Juárez, donde durante 2003 se han registrado 36 homicidios similares, confirmó la Policía judicial del lugar. El empresario Eustacio Martínez, de 58 años, fue asesinado cuando salía de su casa. Era ejecutivo de la empresa Nueva Era, que tiene bajo su control ocho de las más importantes estaciones de radio en Ciudad Juárez. El hoy fallecido era considerado decano de los publicistas de esa ciudad fronteriza, que padece, además de ejecuciones, altos índices de secuestros, narcotráfico y asesinatos de mujeres. Martínez "recibió dos impactos de bala, uno en el cuello y otro en la cabeza, al parecer con una pistola calibre .45", dijo a la prensa Mauro Conde, portavoz de la Policía Judicial de Chihuahua. El asesinato será investigado por el grupo Zeus, que normalmente se encarga de las ejecuciones que están ligadas al narcotráfico, adelantó el funcionario. Según versiones de algunos testigos que pidieron el anonimato, uno de los presuntos sicarios fue perseguido por los guardaespaldas del empresario hasta un hotel cercano a su domicilio. Sin embargo, las autoridades no pudieron confirmar si fue arrestado o logró huir. Hasta este jueves en Ciudad Juárez se han registrado 37 asesinatos presuntamente ligados al narcotráfico, la penúltima de ellas fue hace dos días, cuando fue localizado el cuerpo de un hombre al que prendieron fuego rociándolo con gasolina, en un popular barrio de la localidad.

Acapulco, Gro., 4 de diciembre. Familiares de Zacarías Barrientos Peralta (testigo de la guerra sucia de los años setenta), asesinado en un paraje cercano a Rincón de las Parotas, municipio de Atoyac, recibieron protección de la Agencia Federal de Investigación (AFI) para que continúen colaborando con la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (Femospp), que investiga las desapariciones forzadas de 276 personas ocurridas en la entidad. Agentes de la AFI y de la Femospp se reunieron con parientes de Barrientos Peralta -quien la semana anterior falleció acribillado con armas de uso exclusivo del Ejército-, a quienes les ofrecieron protección y les pidieron su colaboración en las pesquisas sobre el homicidio. No obstante que los deudos habían manifestado su negativa a participar en las investigaciones sobre el asesinato del informante y que consideraban el caso "como cerrado", accedieron a reunirse con efectivos de la PGR.