Reconoce el Presidente que encabeza un ''gobierno de minoría''

La falta de consensos para sacar adelante las reformas estructurales ha sido el ''principal obstáculo'' en la primera mitad de la presente administración, aseguró el presidente Vicente Fox, quien reconoció que encabeza un ''gobierno de minoría'', debido a que su partido no tiene mayoría en ninguna de las dos cámaras donde se toman las decisiones.

En una entrevista que el matrimonio Fox-Sahagún concedió a la revista La Nación, editada por el Partido Acción Nacional, el mandatario avizoró que la falta de acuerdos entre los partidos políticos continuará, pero sostuvo que su obligación es presentar al Congreso las iniciativas de ley que considera indispensables para ''acelerar'' la marcha del país hacia el progreso y el desarrollo nacional.

''Requerimos de consensos y de acuerdos con la oposición, de otra manera no hay avances; estamos estancados en materia de decisiones cruciales sobre la marcha del país'', respondió el presidente Fox durante la entrevista, en la que habló de los logros, metas y obstáculos que ha encontrado en los primeros tres años de su gobierno.

Afirmó también que la transición ''ya está hecha''. Dijo que los mexicanos vivimos todos los días una democracia real. ''La transición ya se fue, sucedió en el año 2000. Ahora nos toca construir el México del futuro, impulsar los cambios sobre los rezagos y problemas que heredamos, impulsar la modernización del país y, particularmente, integrar a todos al proceso de desarrollo'', puntualizó el Presidente.

México, país maravilloso, como maravillosa es su gente

En esa entrevista, Fox y su esposa piden a los panistas ''redoblar'' el esfuerzo y construir, junto con el pueblo de México, un país mejor, a la altura de lo que esperan las futuras generaciones de mexicanos. ''Quienes somos panistas estamos orgullosos de tener un partido muy sólido'', dijo Marta Sahagún. Ambos pidieron al pueblo de México que conserve la esperanza y la fe, porque es un país maravilloso, como maravillosa es su gente. A juicio del jefe del Ejecutivo, el país también dejó atrás, con toda certeza, el riesgo de regresión en materia política, por lo que ya no retornarán las ''dictaduras'' de personas y de partidos.

Entre los logros obtenidos por su gobierno destacó que en términos políticos fue un triunfo importante la transición sin turbulencias, crisis ni devaluaciones, y sí con plena estabilidad social y económica. Apuntó que el cambio en el Poder Ejecutivo también implicó un verdadero federalismo y un respeto absoluto a los otros poderes. Esto conlleva un Poder Judicial autónomo, con capacidad de actuar sin límites por parte del Ejecutivo, e implica avances importantes en materia de seguridad y estado de derecho, según reproduce La Nación en su número 2115, que ayer empezó a circular.

JOSE ANTONIO ROMAN