Señala que se atrincherará hasta el último minuto de este año para defender su iniciativa

Sería ''criminal'' dejar pasar una propuesta fiscal populista, dice Fox

Se suman dirigentes y diputados panistas; negociaremos hasta con el diablo, sostienen

JOSE ANTONIO ROMAN, GEORGINA SALDIERNA Y JUAN MANUEL VENEGAS

A lo largo de todo el día de ayer el presidente Vicente Fox reiteró sus acusaciones en contra del PRI por ''mentir, engañar'' y querer imponer una propuesta de reforma fiscal populista; advirtió que sería ''criminal'' dejarla pasar, y señaló que se atrincherará hasta el último minuto de este año para defender la iniciativa que presentó al Congreso el pasado 6 de noviembre.

''Estoy dispuesto a dar la batalla, cien batallas, ¡mil batallas por México! ¡Antes (del 31 de diciembre), no nos vencerán!'', enfatizó.

En términos poco usuales, el mandatario indicó que el debate por la reforma es ''una batalla por la justicia''; que lo ocurrido el pasado jueves en la Cámara de Diputados es apenas ''el primero de muchos rounds''; arengó a los panistas a ''pelear en la misma batalla'' pues ''la guerra no se ha perdido'', y dijo estar con los mismos bríos para seguir ''hasta el último día''.

Al mensaje foxista se sumaron dirigentes y diputados de Acción Nacional, quienes desayunaron con el Presidente en Los Pinos. Y esta vez no desentonaron: ''Para nosotros no se ha dado la batalla definitiva; me ha animado muchísimo ver a quién es el capitán de nuestro equipo (Fox) con esa disposición a dar la batalla'', sostuvo el coordinador parlamentario, Francisco Barrio. ''¡Vamos a negociar hasta con el diablo para sacar adelante la reforma!'', señaló el coordinador adjunto de la bancada, Germán Martínez, y el dirigente nacional del blanquiazul, Luis Felipe Bravo Mena, dijo que su partido ''está en pie de lucha'' y no dará ''ni un paso atrás''.

El único que se salió del script fue el secretario de Gobernación, Santiago Creel, quien a pesar de haber asistido al cónclave foxipanista de la mañana, por la tarde anunció que este miércoles el PAN presentará una nueva iniciativa fiscal. Esto a pesar de que desde el viernes pasado el presidente Fox ha venido sugiriendo y llamando a la ''responsabilidad'' de los diputados para retomar su propuesta original.

Incluso este martes, durante una gira por San Luis Potosí, Fox fue tajante al defender su iniciativa: ''Lo único que pasó por mi mente al presentar esa reforma es que precisamente a través de ella podemos continuar reduciendo la pobreza... por eso este gobierno va a seguir luchando, hasta el 31 de diciembre a las 12 de la noche. ¡Vamos a estar en pie de lucha!, y vamos a insistir en el tema y vamos a volverlo a poner en la Cámara de Diputados y vamos a volver a llevarlo al pleno y vamos a volver a pedir una votación, porque esa votación tiene que ver con el futuro del país''.

''Tenemos ganada la batalla moral''

En la encerrona que tuvo lugar en la casa presidencial, Fox y los panistas cerraron filas decididos a ''conquistar'' una reforma fiscal integral antes de que concluya el año. El Presidente y sus correligionarios se comprometieron a enfrentar juntos, como un solo bloque, la ''batalla, la guerra'', por una reforma ''responsable'', y rechazaron categóricamente el ''camino demagógico y populista'' que proponen quienes quieren llevar al país al retroceso.

''Yo me siento fuerte, muy fuerte, dispuesto a dar una batalla, cien batallas, mil batallas por México'', dijo el titular del Ejecutivo en el mensaje que dirigió a directivos y legisladores panistas; mientras, Martínez Cázares señaló que serán capaces de negociar ''hasta con el diablo'' para sacar adelante la reforma fiscal.

Con energía y recordando las ''duras'' e ''históricas batallas'' que el PAN ha dado a lo largo de sus más de 60 años de vida, Fox reclamó dar una gran batalla y dijo que lo ocurrido el pasado jueves, cuando la mayoría legislativa rechazó la iniciativa fiscal que preparó en alianza con la defenestrada Elba Esther Gordillo, sólo ''fue uno de muchos, muchísimos rounds de una guerra que todavía no concluye. Estamos en pie de lucha, el Presidente está en pie de lucha, jamás aceptaremos una propuesta como la que anda circulando por ahí como reforma fiscal; eso sería criminal aceptarlo para México''.

Reunidos en el salón Manuel Avila Camacho, al que asistieron también los secretarios de Gobernación, Santiago Creel, y de Energía, Felipe Calderón, el mandatario aseguró a los legisladores que desde ahora los panistas tienen ganada la ''victoria moral'', debido a que sus propuestas tienen el ''amplio respaldo'' ciudadano. ''Así lo demuestran'' -dijo- múltiples encuestas, pero que están llamados a ganar también la ''batalla legislativa''.

La guerra no se ha perdido -insistió-, ''estamos a la mitad del camino y ya planteamos unos sólidos cimientos para seguir construyendo un país justo y democrático. Esa es nuestra verdadera lucha y no podemos, no vamos a claudicar. No pueden grupos populistas o grupos que engañan y mienten, o en su caso conflictos internos de partido, detener la marcha de México (...) México necesita avanzar y avanzar rápido, no nos pueden detener'', dijo en la reunión, que concluyó con el grito de ''¡Duro! ¡Duro!'' y el puño en alto por parte de los legisladores blanquiazules.

Tras el encuentro partidista, el Presidente se trasladó al salón contiguo, el Adolfo López Mateos, para entregar los premios Nacionales de Calidad 2003. En ese acto, Fox insistió en el tema fiscal y su lucha por su aprobación en la Cámara. Aseguró que lo que está en juego es mucho más que una reforma: es si México sigue estancado y moviéndose en la mediocridad o avanza decididamente hacia la construcción de un país moderno, al día y competitivo; un México con verdaderas salidas y respuestas para la siguiente generación.

''Agarraré al toro por los cuernos''

Cerca del mediodía, el Presidente viajó a San Luis Potosí. En dos de los tres actos que programó en la entidad, tema central de sus mensajes fue nuevamente la reforma fiscal. En la entrega de títulos de propiedad a ejidatarios de la Huasteca potosina salió al paso de sus detractores: ''Hay quienes dicen que el presidente Fox ya va contra los pobres, contra los humildes y contra quienes menos tienen ... y digo precisamente lo contrario, porque la reforma fiscal que presenté es para resolver los angustiantes problemas de las familias en el país''.

Apeló a su ''responsabilidad de gobernante'' para advertir que podía haber dejado pasar las cosas y, como otros lo están haciendo, pensar en la siguiente elección y buscar, de manera populista, quedar bien con la gente, engañándola. No será así, expresó, ''no voy a dejar pasar el toro sin agarrarlo por los cuernos ... voy a ser responsable y lo voy a hacer cada minuto, cada día, luchando hasta el 31 de diciembre a las 12 de la noche''.

Luego tuvo una comida con empresarios de la entidad. En un ambiente propicio, con el respaldo de los hombres del dinero potosino, que a lo lago de todo su discurso lo interrumpieron para aplaudirlo, Fox reiteró su velada amenaza de veto a cualquier otra propuesta fiscal que no se ajuste a su proyecto; esta vez añadió, incluso, que tampoco aceptará un paquete económico creado ''sobre ingresos ficticios que no sean reales y que después nos lleven a los dolorosos recortes presupuestales''.