EU y Rusia deben firmar el Protocolo de Kyoto, indica

Advierte experto sobre los efectos del cambio climático en México

ANGELICA ENCISO L.

Ante el cambio climático del planeta y la falta de acciones para enfrentarlo por el rechazo de Estados Unidos y Rusia a ratificar el Protocolo de Kyoto, se prevé que aumente la presencia e intensidad de desastres naturales, con serios impactos en la economía y en la población; disminuirá la disponibilidad de agua y bajará la oferta de alimentos, advirtió Ricardo Sánchez, director para América Latina y el Caribe del Programa de la Organización de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).

La obtención de recursos para atender esos problemas, agregó, tendrá que provenir de los organismos financieros internacionales, porque las naciones no tienen dinero para enfrentar los efectos del cambio climático. Dijo que ya se habló con esas instituciones, entre las que están Global Enviromental Facility, del Banco Mundial, e instituciones financieras regionales y locales.

Manifestó que así como la población pobre es la más vulnerable a este fenómeno, las naciones en desarrollo también sufren los mayores efectos en pérdida de vidas y en su economía. Es indispensable, puntualizó, que los países utilicen instrumentos económicos como incentivos a los empresarios; que los productores incorporen tecnologías ambientalmente sanas para reciclaje, así como que establezcan el registro de emisiones para reducir la contaminación.

Señaló que aunque países desarrollados como Estados Unidos y Rusia, que generan alrededor de 30 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero, se rehúsan a ratificar el Protocolo de Kyoto, que establece medidas de reducción de esas emisiones, es necesario establecer acciones para revertir el problema.

Planteó que ante los problemas ambientales del planeta, la pobreza y la desigualdad son lo primero que debe revertirse, por lo que se deben buscar soluciones y proyectos de desarrollo sustentable que contribuyan a que se usen sustentablemente los recursos.

"El crecimiento en la intensidad y frecuencia de los desastres naturales impacta a los países en desarrollo, vulnerables tanto en su medio ambiente rural como en el urbano, ya que tienen menos capacidad económica y tecnología para enfrentar los problemas", añadió. Recordó que en la región ha habido problemas serios por huracanes, inundaciones y terremotos.

"Realmente el cambio climático ya está presente en el planeta y tiene costo en vidas humanas y pérdida de recursos económicos. En tan sólo en un año provocó pérdidas económicas por 60 mil millones de dólares, la muerte de unas 20 mil personas en Europa y daños por 10 mil millones de dólares en la agricultura", precisó.

Destacó que ante este panorama, los países que ya ratificaron el Protocolo de Kyoto mantendrán su demanda de que Estados Unidos y Rusia se sumen al convenio y adopten medidas para la incorporación de energías renovables para contribuir a la disminución de emisión de gases de efecto invernadero.

Con relación a los problemas de disponibilidad de agua, explicó que aun en este momento ya son críticos para la región, porque los recursos hídricos se localizan en zonas donde existe poca población y desarrollo industrial. México, advirtió, está en ese caso porque el grueso de la población reside en el centro y el norte del país, mientras el líquido está en el sureste.

Aunado a ello, continuó, hay problemas de contaminación de las cuencas, inundaciones y sequías. A esto se suma que con el cambio del clima se prevé una disminución de 20 por ciento de los recursos hídricos y un incremento de 20 por ciento en la demanda de alimentos por el crecimiento poblacional.

Planteó que un avance fue el establecimiento del fondo para apoyar a las naciones vulnerables ante el fenómeno, el cual fue acordado en la novena sesión de la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático. A esos recursos México no podrá acceder por ser miembro de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos.

Sánchez mencionó que en los últimos días de noviembre se efectuó la 14 reunión del Foro de Ministros de Medio Ambiente de América Latina y el Caribe, en el que se determinó impulsar la Iniciativa Latinoamericana y Caribeña para el Desarrollo Sostenible, que considera ocho temas prioritarios para trabajar.

Entre ellos está el acceso a los recursos genéticos y la distribución equitativa de los beneficios derivados de su utilización; recursos hídricos; asentamientos humanos, vulnerabilidad y ordenamiento territorial; comercio y medio ambiente; instrumentos económicos y política fiscal, así como energías renovables e indicadores ambientales.

Precisó que otro acuerdo fue establecer indicadores ambientales para medir el impacto de las políticas en el combate a la pobreza, la deforestación, la pérdida de diversidad biológica, la contaminación y el aumento de los residuos peligrosos.