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México D.F. Jueves 8 de enero de 2004
Trabajadores sindicalizados ocupaban el inmueble
desde noviembre; hay 95 detenidos
Desalojan más de 100 policías el comité
de agua de Tapachula
La Junta Local de Conciliación y Arbitraje declaró
ilegal el movimiento por "incumplir la normatividad"
RODOLFO VILLALBA Y JUAN BALBOA CORRESPONSALES
Tapachula, Chis., 7 de enero. Más de 100
policías del estado recuperaron esta madrugada las instalaciones
del Comité de Agua Potable y Alcantarillado de Tapachula (Coapatap)
y detuvieron a 95 trabajadores sindicalizados que ocupaban el inmueble
desde el 12 de noviembre, cuando empezaron un paro de labores.
El
procurador de Justicia del estado, Mariano Herrán Salvatti, informó
que a las 5:30 horas, policías de Seguridad Pública y de
la Agencia Estatal de Información rescataron las oficinas administrativas,
el área de capacitación, la planta potabilizadora y los pozos
de distribución que se encontraban en poder de los empleados.
En el operativo, agregó Herrán Salvatti,
se aseguraron 10 tanques de 10 kilogramos de gas-cloro, se restableció
el estado de derecho y se entregaron las instalaciones del Coapatap al
ayuntamiento.
Herrán Salvatti dijo que el problema había
rebasado el orden constitucional y de gobernabilidad, y que luego de las
indagaciones que realizó la Secretaría General de Gobierno
se procedió al desalojo, durante el cual fueron detenidos 95 trabajadores,
quienes fueron presentados ante el Ministerio Público por el delito
de despojo y los que resulten.
Apenas ayer, más de 100 trabajadores del Coapatap
marcharon por la ciudad para exigir una auditoría a la dependencia,
la renuncia de la encargada de recursos materiales y la cancelación
de las demandas penales en su contra.
Durante el recorrido se apoderaron violentamente del palacio
municipal, donde retuvieron a la regidora Isabel Mérida; al secretario
municipal, Rafael Sommers González; al subdirector de Recursos Humanos,
Carlos Manchinelly; al director de Obras Públicas; Carlos Pereyra
Salazar, y al coordinador de asesores, Segundo Vicente Marín, así
como a otros siete trabajadores.
A todos ellos los amarraron y exhibieron en el centro
de la población, pero después de ocho horas los liberaron
y abandonaron la alcaldía, al enterarse de que efectivos de Seguridad
Pública del estado los desalojarían.
Sin embargo, mantuvieron tomadas las instalaciones
del Coapatap, las cuales estaban en su poder desde el 12 de noviembre,
lo que provocó desde entonces desabasto de agua a más de
50 mil familias de la zona urbana de la ciudad, la segunda en importancia
del estado. Los trabajadores sindicalizados empezaron su paro laboral con
10 demandas, pero no dieron aviso de su queja ante la Junta Local de Conciliación
y Arbitraje por no cumplir con algunas normativas, por lo que ésta
declaró ilegal el movimiento.
No obstante, ocho días después representantes
de los empleados y de los gobiernos estatal y municipales instalaron una
mesa de diálogo donde se resolvieron siete puntos del pliego y los
mismos trabajadores firmaron el acuerdo en el que se comprometían
a suministrar agua a la ciudad.
Sin embargo, no cumplieron su promesa con el pretexto
de que el gobierno se negaba al pago de salarios caídos y dejaron
sin el líquido a colonias del sur de la ciudad, por lo que el ayuntamiento
empezó una querella por la ocupación de las instalaciones
y la planta potabilizadora del organismo.
Así, en las primeras horas de este miércoles
efectivos policiacos del estado recuperaron las instalaciones.
De los detenidos, cuatro tienen orden de aprehensión
y los 91 restantes están en calidad de presentados y rinden su declaración
ministerial.
El alcalde Manuel Pano Becerra indicó que se restableció
el servicio de agua potable a toda la población y que los efectivos
policiacos resguardan las instalaciones recuperadas.
Señaló que a partir de hoy empezará
una nueva relación laboral con los trabajadores al servicio del
Coapatap para revisar las condiciones contractuales mediante reglas claras
que eviten que personas ajenas a los intereses de la sociedad, de los trabajadores
y del mismo organismo los afecten.
De los detenidos, señaló que muchos fueron
obligados a permanecer en el movimiento, por lo que se hará una
revisión profunda de cada uno de sus expedientes laborales para
analizar y determinar quién puede continuar en la empresa, "porque
hay buenos empleados, y con toda seguridad los tomaremos en cuenta".
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