México D.F. Martes 13 de enero de 2004
En 2003 las colocaciones de deuda totalizaron
177 mil 842 millones de pesos
Cada vez más empresas privadas y gobiernos acuden
a la bolsa por recursos
Once emisores concentran 55 por ciento del monto Siefore,
principales inversionistas en certificados bursátiles, de participación
ordinaria y pagarés a mediano plazo
VICTOR CARDOSO
Para mantener a flote sus finanzas durante 2003, 43 compañías
privadas, así como los gobiernos federal, estatales, municipales
y empresas paraestatales emitieron bonos de deuda en el mercado de valores
de México por 83 mil 964 millones de pesos.
Con esas colocaciones el saldo en circulación de
esos instrumentos en el mercado se elevó a 177 mil 842 millones
de pesos, lo que representa un crecimiento de 63 por ciento respecto de
la deuda colocada en 2002.
Con
el auge alcanzado por las colocaciones de instrumentos de deuda (certificados
bursátiles, pagarés a mediano plazo, certificados de participación
en deuda y obligaciones) en el mercado de valores, las sociedades de inversión
especializadas en fondos para el retiro (Siefore) son ya los principales
inversionistas institucionales, por arriba de empresas aseguradoras y sociedades
de inversión, al concentrar 85 mil millones de pesos de las emisiones,
equivalente a 21 por ciento del total de su cartera de inversiones.
Sólo en diciembre se realizaron 13 emisiones por
un total de 7 mil 417 millones de pesos; sobresalió la del Gobierno
del Distrito Federal por 2 mil 500 millones, equivalente a una tercera
parte de ese monto.
De acuerdo con un análisis de la deuda privada
en 2003, realizado por el grupo financiero Ixe, el sector gubernamental,
empresas paraestatales incluidas, representó 23 por ciento del mercado
total, cifra 9.6 por ciento superior a la registrada el año pasado.
Entre las principales emisiones estuvieron las realizadas por Petróleos
Mexicanos (Pemex), la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la
Sociedad Hipotecaria Federal (SHF), pero también acudieron al mercado
de valores los gobiernos del Distrito Federal, Nuevo León, estado
de México, Chihuahua, Hidalgo y Guerrero, así como algunos
municipales.
Según el análisis, 55 por ciento de la deuda
colocada el año pasado, cerca de 98 mil millones de pesos, estuvo
concentrada en 11 emisoras: KOF (Cocacola-Femsa, 10 mil millones de pesos);
SHF (9 mil 625 millones), Pemex (6 mil 500 millones), CFE (6 mil millones),
Promotora y Administradora de Carreteras (4 mil 856 millones); Cemex (3
mil 355 millones); América Móvil (3 mil millones), General
Motors Acceptance Corp. (2 mil 900 millones), Grupo Carso (2 mil 750 millones),
Gobierno del Distrito Federal (2 mil 500 millones) y Ford (2 mil millones
de pesos).
Buena respuesta, futuro incierto
Para los analistas de Ixe el crecimiento de la deuda colocada
a través del mercado de valores se derivó de una mayor participación
de las Afore (administradoras de fondos para el retiro), las cuales tienen
cada vez mayores recursos para invertir; a lo anterior se añade
la disminución de las tasas de interés, la iniciativa del
sector gobierno e infraestructura por fondearse a través
del mercado de deuda privada y una evidente evolución y sofisticación
del mercado.
De esta forma los inversionistas institucionales fueron
los que mayores financiamientos brindaron en el mercado de valores, con
un total de 157 mil millones de pesos en instrumentos de deuda privada.
Las Siefore (instrumentos de inversión de las Afore) captaron 48
por ciento del total de la cartera colocada; les siguieron las empresas
aseguradoras con 42 mil millones de pesos, o casi 23 por ciento, y las
sociedades de inversión con 30 mil millones de pesos, equivalentes
a 17 por ciento del saldo total en el mercado.
Sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas, ya que diversos
emisores de deuda han tenido que enfrentar reportes poco halagüeños
de las empresas de calificación citadas por Ixe, como Standard and
Poor's o Moody's.
Por ejemplo, recientemente Standard and Poor's dio aviso
de que su calificación del estado de México pasaba a negativa
debido a que ''podría continuar el deterioro en el desempeño
financiero del estado de México, dando como resultado una crisis
de liquidez que podría perjudicar severamente la capacidad del estado
para honrar sus obligaciones de deuda''.
La misma calificadora también emitió un
alerta sobre las emisiones de Transportación Ferroviaria Mexicana
(TFM) a las que redujo su calificación. Si bien se reconocen fortalezas
en esa empresa, las mismas ''son contrarrestadas por el deterioro en los
márgenes operativos, una política financiera dictada por
Grupo TMM, el bajo desempeño de la industria automotriz (uno de
los principales usuarios del ferrocarril, que representa 20 por ciento
de las ventas de la empresa) y el deterioro en la relación entre
sus dueños (de TFM)''.
Incluso, sobre las emisiones de Pemex la calificadora
Moody's advirtió que ''aunque el gobierno mexicano no garantiza
las obligaciones financieras de Pemex, Moody's cree que el gobierno, en
sus niveles actuales de calificación, seguirá apoyando implícitamente
la deuda de Pemex (tanto Pidiregas como no-Pidiregas) basado en la importancia
política de Pemex, su posición como una importante fuente
de empleo, ingresos fiscales y de moneda extranjera, y su papel como símbolo
de soberanía nacional''.
Cierre a diciembre
Sólo en el último mes de 2003 se colocaron
instrumentos de deuda por 7 mil 417 millones de pesos. Destacaron el Gobierno
del Distrito Federal, que absorbió 34 por ciento del monto; Carso
Global Telecom, con 18 por ciento de las emisiones de diciembre, y Ferrocarriles
Mexicanos, con 13.5 por ciento.
De acuerdo con el análisis, en este año
la deuda contraída obligará a pagar amortizaciones totales
por 10 mil 612 millones de pesos, de las cuales 4 por ciento deberán
cubrirse en el primer trimestre; 30 por ciento en el segundo; 25 por ciento
en el tercero y 41 por ciento antes de finalizar 2004.
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