MEXICO SA

Carlos Fernández-Vega

Grupos oportunistas explotan las guerras e inflan el déficit de EU

La cruzada militarista de Bush, costosísima para su propio país y el resto del mundo

LA ALOCADA CRUZADA militarista de George W. Bush -lucha "contra el terrorismo" incluida- le ha resultado costosísima a la economía estadunidense y, por ende, a la del resto del mundo.

INVADIR PAISES, TIRAR A matar a todo aquello por él considerado "signo del mal" y descubrir "terroristas" en las cajas de cereal no sólo ha provocado el repudio internacional, sino el brutal incremento del déficit presupuestal estadunidense.

AYER, LA OFICINA DE Presupuesto del Congreso de aquel país reveló que a finales del ejercicio fiscal 2004 el déficit del gobierno estadunidense alcanzará un récord de 477 mil millones de dólares "y empeorará si los legisladores reducen impuestos o aumentan los gastos". En 2003 ese saldo negativo fue de 375 mil millones de dólares, el más alto de la historia. El récord previo fue de 290 mil millones de dólares en 1992, cuando el padre del actual mandatario despachaba en la Casa Blanca.

DICHA INSTITUCION ESTIMO que para el periodo 2004-2013 el déficit total podría llegar a 2.4 billones de dólares (millones de millones), de acuerdo con un despacho de Ap, contra una estimación previa de 1.4 billones de dólares en el mismo periodo.

LAS PROYECCIONES DE LA Oficina de Presupuesto del Congreso "confirman que los déficit se prolongarán mucho tiempo en el futuro. Está claro que el gobierno de Bush no tiene planes de eliminarlos", de acuerdo con John Spratt, representante de Carolina del Sur y el demócrata de más alto rango en la Comisión Presupuestaria de la Cámara de Representantes.

"ES LA GUERRA, IDIOTA", podría contestarle Bush, al recordarle que meses atrás solicitó al Congreso, y obtuvo, una partida presupuestal adicional por 87 mil millones de dólares para financiar su aventura guerrera -negocios incluidos- en Irak.

DE QUE SE QUEJAN, si el Congreso, de pie, aplaudió la invasión ordenada por Bush, los jugosos negocios, antes que el sepelio de sus muertos, y la estancia permanente del ejército de Estados Unidos en Irak. Y eso cuesta mucho dinero.

EN ESTE SENTIDO, un análisis del Cato Institute firmado por Steve H. Hanke (Los costos de la guerra) -académico titular del organismo y profesor de economía aplicada en la Universidad de Johns Hopkins- señala que Estados Unidos "está envuelto en lo que será, en palabras de su comandante en jefe, 'una prolongada guerra', un tipo de guerra diferente, peleada en muchos frentes, en muchos lugares. La guerra contra el terrorismo es una empresa nacional extraordinaria debido a que, entre otras cosas, su escala, alcance y duración no están definidos.

"CON EL FIN DE DESPEJAR la confusión necesitamos usar una perspectiva histórica. La historia nos dice que grupos de presión oportunistas explotan las guerras, las depresiones económicas y otras crisis. Se aprueban leyes, se crean ministerios, se expanden presupuestos, se imponen nuevos tributos y la inflación eventualmente se dispara. En la mayoría de los casos, lo que fue anunciado como 'temporal' se convierte en permanente".

PERMANENTE, PUES, ES EL anuncio de un nuevo récord en el déficit de Estados Unidos, situación que indiscutiblemente golpea a la economía de ese país y, por ser el "motor del mundo", al resto de la comunidad de naciones.

EL ANALISIS DE HANKE subraya que "no hay nada como una guerra para crear oportunidades en Washington. Durante la Segunda Guerra Mundial, cuando el gobierno absorbió casi la mitad de la producción económica del país, todos los grupos de presión que existían intentaron echar mano a un enorme presupuesto federal. Incluso agencias que no tenían mucho que ver con la guerra, como el Departamento del Interior, afirmaron estar haciendo una 'labor de guerra esencial' y por lo tanto tenían derecho a presupuestos más grandes y a más personal.

"NO ES DE SORPRENDER que la guerra contra el terrorismo no haya tomado fuera de guardia a los buscadores de rentas de Washington. El último llamado a las armas les ha dado nuevas oportunidades a una multitud de oportunistas. Sus propuestas van desde un rescate financiero a las aerolíneas hasta nacionalizar la producción de vacunas. La guerra también le ha dado un fuerte espaldarazo a lo que se ha convertido rápidamente en una ubicua industria de seguridad".

LOS EFECTOS SOBRE EL gasto federal, los cuales han pasado ampliamente desapercibidos, son impactantes. El incremento anual en el gasto federal real bajo la actual administración Bush es de 5.5 por ciento y esa proporción no incluye la partida suplementaria de 87 mil millones para Irak. Para poner en perspectiva esa tasa de incremento, el crecimiento anual del gasto federal real durante la era del despilfarro de Vietnam y la Gran Sociedad en las administraciones Kennedy-Johnson fue de 4.8 por ciento.

"LAS GUERRAS SON CARAS y eventualmente hay que pagarlas. Y los grandes recortes en los impuestos son vulnerables a las triquiñuelas de Washington. Tan sólo echémosle un vistazo a lo que le sucedió a los recortes de impuestos del presidente Reagan en 1981. Menos de un año después el mismo Reagan firmó una ley que aumentó los impuestos en casi uno por ciento del PIB, lo cual fue el incremento de impuestos más grande en tiempos de paz en la historia de Estados Unidos. Y eso no fue todo. En cada año subsiguiente de la presidencia de Reagan, con excepción de 1988, el Congreso aprobó aumentos de impuestos que fueron firmados por el presidente.

"LOS COSTOS DE LA GUERRA son siempre los mismos: un Estado más obeso y entrometido y, sí, también más inflación. Los precios de los metales preciosos y otros productos básicos, indicador tempranero de la inflación, ya están en fase de alza".

Las rebanadas del pastel:

EN DICIEMBRE PASADO el IMSS "transquiló" el aguinaldo de 30 por ciento de los jubilados y pensionados que de ese organismo reciben su ingreso. A ellos les descontó, injustificadamente y sin notificación oficial, más de mil 400 millones de pesos... Los afectados exigen al dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores del instituto, Roberto Vega, una explicación puntual y la inmediata devolución de su dinero... El "líder" dijo que no hay de qué preocuparse, porque el recorte "sólo se aplicó" a los que reciben más de 10 salarios mínimos... La devolución brilla por su ausencia.

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