México D.F. Martes 27 de enero de 2004
Grupos políticos y militares habrían planeado el homicidio
Ante versiones de que lo iban a asesinar, regresa de Brasil el presidente paraguayo
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 26 de enero. El presidente de Paraguay, Nicanor Duarte Frutos, afirmó esta tarde que no cederá "ante la intimidación" y que está seguro de "los pasos que vamos a dar en los próximos días", durante una rueda de prensa en una jornada de tensión, al divulgarse versiones sobre un plan para atentar contra la vida del mandatario, que le habrían revelado los servicios de inteligencia de Brasil, donde estuvo de vacaciones.
Durante todo el día circularon los rumores no sólo en Paraguay, sino también en los países vecinos y socios del Mercado Común del Sur. Duarte Frutos terminó de manera abrupta sus vacaciones en Brasil, después de haber sido notificado por los servicios de inteligencia de ese país de un posible atentado en su contra, posiblemente a su regreso a Paraguay. Durante la ausencia del mandatario, quien antes de sus vacaciones estuvo en la Cumbre de Monterrey, "se habría gestado un plan de grupos mafiosos que tienen fuertes vínculos con ciertos sectores políticos e inclusive con las fuerzas armadas", señalaron medios de información paraguayos.
Los medios también destacaron la virtual "desaparición" del mandatario, quien debía regresar anoche del balneario de Guarujá. Hubo un momento en que no se sabía si seguía en Brasil o ya había llegado a Paraguay.
Según informes de la prensa, un grupo de cinco o seis sicarios brasileños habría ingresado al país con la misión de matar al presidente. Pero también se mencionó el ingreso de armas de guerra, como un misil aire-tierra capaz de derribar un helicóptero o una aeronave.
En su conferencia de prensa, Duarte Frutos no confirmó la versión, aunque habló de "darle un purgante al poder administrador", en aparente alusión a los cambios en las fuerzas armadas y la policía.
Recientemente fue detenido el teniente coronel Enrique Sarubbi, señalado como integrante de grupos que actuaron en la represión, por el intento de robo de una ametralladora antiaérea .50 Growing de los arsenales de la fuerza aérea. Sarubbi estaría vinculado con el robo de automóviles y el narcotráfico.
También está en el aire la investigación por los secuestros y torturas de los dirigentes políticos de izquierda Anuncio Martí y Juan Francisco Arrom, quienes estuvieron varios días detenidos-desaparecidos hace dos años. El grupo que los mantuvo cautivos quería que confesaran su participación en un secuestro.
Asimismo, está en marcha la investigación de un grupo de policías que intervino en una brutal represión contra campesinos la semana pasada, que dejó dos muertos y decenas de heridos en la zona de Ypekuá, Caaguazú.
Duarte Frutos evitó aclarar la razón por la que subrepticiamente regresó esta mañana, y sostuvo que se trataba de "información reservada" y de un asunto de Estado. También dijo que 2004 será declarado "con preminencia" año social, según confirmó a este periódico, desde Asunción, el colega Miguel López del periódico Ultima Hora.
En medio de los rumores, muchos interpretaron -entre ellos algunos dirigentes campesinos- que más bien podría tratarse de una "cortina de humo", ante el costo político por la represión en Caaguazú.
Sin embargo, nadie ignora que en Paraguay tocar a los jefes militares de la corrupción ha costado más de un golpe de Estado. Hoy el mandatario insistió en que "no habrá tolerancia con quienes deshonran a las fuerzas armadas", y consideró que quienes roban armas del ejército deberían recibir una "baja deshonrosa", en alusión al caso de Sarubbi, considerado "un intocable", como señalaron a La Jornada colegas paraguayos consultados.
Estaba previsto que Duarte retornara ayer, pero como no fue encontrado en el aeropuerto y esta mañana no llegó a la Casa de Gobierno, las especulaciones crecieron y la confusión imperó hasta que el jefe de prensa del presidente, José Duarte, confirmó en la tarde que el mandatario ya estaba en la residencia oficial.
Mientras esto sucede, tropas estadunidenses autorizadas a realizar ejercicios ya llegaron a la zona del Chaco paraguayo, donde precisamente se extiende el Acuífero Guaraní, la mayor reserva subterránea de agua dulce del mundo. De manera imprevista, el Senado paraguayo aprobó el pasado 30 de diciembre el ingreso de las tropas, lo cual ha puesto en alerta a organizaciones sociales, pues temen que se trate de crear una situación desestabilizadora para avanzar en el proyecto clave de Estados Unidos para controlar la estratégica zona de la Triple Frontera entre Paraguay, Brasil y Argentina.
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