La medida, para establecer un fondo contra el hambre

Chirac y Lula, por gravar la venta de ciertas armas y algunas transacciones

AFP Y DPA

Ginebra, 30 de enero. Los presidentes de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y de Francia, Jacques Chirac, abogaron hoy por la posibilidad de gravar determinadas transacciones financieras y la venta de ciertas armas, para establecer "un fondo especial de lucha contra el hambre y la pobreza" en el mundo.

"Nosotros, los presidentes Lula y Chirac, decidimos establecer un grupo técnico para seguir estudiando diferentes propuestas" para enfrentar el hambre, aseguraron en una declaración conjunta tras reunirse en la sede europea de Naciones Unidas con el secretario general, Kofi Annan, y el mandatario chileno, Ricardo Lagos.

Annan recibió "positivamente las propuestas" de ambos presidentes, que pidieron asimismo se estudie la creación de un mecanismo internacional de financiamiento como el propuesto por el primer ministro británico, Tony Blair, hace un año, encaminado a duplicar el dinero dedicado por los países ricos al desarrollo de los pobres.

Lula presentó hace un año en Davos la idea de la creación de un fondo de este tipo. En el grupo de los ocho países más ricos, seis meses después en Evián, propuso una tasa sobre las armas para financiarlo, cuya idea compartió desde entonces Chirac.

Lula y Chirac pidieron que se prolongue el "diálogo ampliado" entre los ocho y los países en desarrollo, de Evián, cuando se invitó a una docena de jefes de Estado de naciones del sur. "Será una contribución para el trabajo en el ámbito de Naciones Unidas y otros foros sobre fuentes innovadoras de financiamiento", señalaron.

El grupo técnico que analizará las propuestas de la iniciativa sobre el fondo contra el hambre y la pobreza estará integrado por especialistas franceses, brasileños y de otros países interesados, y su misión será preparar para el próximo septiembre un informe sobre las propuestas mencionadas.

Lula dijo que "si queremos un mundo más seguro debemos luchar por uno más justo y equitativo", ya que no puede haber paz sin desarrollo económico ni paz ni desarrollo económico sin justicia social.

Chirac subrayó que más de mil millones de personas sobreviven con menos de un dólar por día, y que establecer un sistema internacional tributario podría ayudarlos.

Aunque Lagos participó en la reunión, no firmó la declaración. Sólo signó la primera parte en la que los cuatro participantes, con Annan, insistieron en la necesidad de "un multilateralismo efectivo" y "reafirmaron el papel central de Naciones Unidas".

Annan llamó a los países ricos a abrir sus mercados a todos los productos de las naciones en desarrollo, y suprimir los subsidios a sus exportaciones agrícolas para luchar contra la pobreza y el hambre en el mundo.