México D.F. Domingo 1 de febrero de 2004
ENTREVISTA /MANUEL
CAMACHO SOLIS, EX PRIISTA
Peligrosa, la apuesta de Fox y el PAN de dividir
al PRI
UN TRICOLOR FRACCIONADO ES ELEMENTO DE INESTABILIDAD
POLITICA
La confusión se volvió un recurso político.
Nadie dice con claridad que una propuesta que incluye subir los impuestos
a los sectores de menos ingresos, como es el caso de un IVA generalizado,
y bajar el ISR a las empresas o a quienes tienen altos ingresos, es conservadora
MIREYA CUELLAR
Conocedor de los mecanismos internos del Partido Revolucionario
Institucional (PRI), no sólo porque fue uno de los operadores políticos
del ex presidente Carlos Salinas de Gortari, sino por su actividad como
académico, Manuel Camacho Solís afirma que un tricolor
dividido se vuelve automáticamente elemento de inestabilidad política,
porque ya no se sabe cómo van a votar sus diputados ni hay con quien
establecer acuerdos confiables.
Por eso Camacho, ex priísta, considera una apuesta
"muy peligrosa" la del presidente Vicente Fox y el Partido Acción
Nacional (PAN) de dividir al PRI y aliarse con uno de sus grupos para pretender
hacer mayoría en la Cámara de Diputados, ya que el resultado,
advierte, puede ser la pérdida del control político del país
y, por lo visto en días recientes, ha pasado esto último.
El peligro está, apunta, en que las mayorías
que se pudieran construir con un tricolor fraccionado serían
muy inestables. En ese partido, la división de los grupos no se
corresponde estrictamente con las diferencias ideológicas; hay muchos
intereses entrecruzados y las alianzas irán y vendrán en
función de los temas, y así no se puede gobernar un país,
añade.
Si queremos conservar el estado de derecho, señala
Camacho, vamos a tener que fortalecer la representación política
y la capacidad de establecer acuerdos, de otra manera el régimen
republicano va a ser sustituido por poderes fácticos.
Los
resultados electorales de 2000 fueron la oportunidad para generar un nuevo
arreglo institucional, pero como se hizo de la reforma eléctrica
y el IVA en alimentos y medicinas la prioridad del gobierno que había
hecho el gran cambio democrático (esto último lo dice arrastrando
las palabras), entonces éste terminó por ser una especie
de extensión de los dos sexenios anteriores.
-¿Y qué papel jugará el PRI en las
actuales condiciones?
-Será muy importante la manera como dirima su disputa
interna. Si logra establecer un sistema de representación interna
mantendrá la unidad, y si lo hace antes de 2006 irá a la
competencia con posibilidades de ganar, con un Partido de la Revolución
Democrática (PRD) con alianzas y un PAN debilitado.
"Ahora, si no es capaz de encontrar una nueva forma interna
de gobierno, entonces parece muy probable que una parte del PRI quiera
aliarse con el PAN y otra empiece a converger con el PRD. Podría
ser tal la incapacidad política que simplemente se dé la
fragmentación y cada quien proteja sus intereses y terminen liquidando
su propia viabilidad política.
"Los priístas han intentado sustituir la figura
del presidente de la República, que se ubicaba por encima de todos
y convocaba, con una mesa de gobernadores que ya mostró su incapacidad
para mantener el control de los grupos: no lograron unificar el voto de
la fracción priísta en torno al IVA.
"Tendrían que reconocer, primero que nada, que
existen por lo menos dos grandes fuerzas internas y, por tanto, hay que
consensuar las decisiones, lo cual les llevaría a seleccionar un
candidato a la Presidencia que no fuera ninguno de los conocidos, sino
un tercero en disputa. Pero como eso es muy poco probable que lo acepte
Roberto Madrazo, entonces la tentación de seguir en la ruptura va
a ser muy grande."
-¿Qué está pasando en el PRI? ¿Cuál
es su diagnóstico?
-Está en un juego de suma cero; cada vez el pastel
se ha hecho más chico y hay la tendencia de un grupo a quedarse
con toda la representación, sus bienes y canonjías. Todos
hubiéramos apostado a que la confrontación se daría
cuando tuvieran que elegir a su próximo candidato a la Presidencia,
pero hemos visto que se adelantó, porque los grupos ya se están
disputando el control del partido como medida para asegurar la candidatura
a la Presidencia.
"Pero también está pasando en el PRI que
distintos políticos y una parte de las bases, que son reales, no
están aceptando, como antes, las instrucciones verticales. Además
hay una cierta conciencia nacionalista que había sido confundida
o reprimida y está resurgiendo, expresándose. Con ello, las
diferencias ideológicas se amplifican".
-¿Cuál es su lectura de la votación
dividida del 11 de diciembre en la Cámara?
-Aquí ya hubo dos bloques, uno de priístas
con diputados del PRD, el Partido del Trabajo y Convergencia, y otro de
priístas con el PAN, y si bien el que votó contra el IVA
va a estar variando mucho, en términos ideológicos ya se
están definiendo dos bandos en el país. Uno conservador,
que se formó electoralmente en 1989, cuando se dio una alianza PRI-PAN
para sacar adelante una reforma electoral que le hacía la vida mucho
más difícil al PRD, y que hizo reformas a los artículos
27 y 130 constitucionales, entre otras.
"Otro bando está en formación, un bloque
progresista, mucho más incipiente, pero que tiene que ver con el
PRD, con las posiciones de Cuauhtémoc Cárdenas frente al
petróleo, con lo que está haciendo López Obrador.
Las posturas del propio Manuel Bartlett... hay una especie de aglutinamiento
político natural simplemente por exclusión a la otra postura.
"El poder presidencial pudo arrastrar a todo el PRI en
la misma dirección que los conservadores, pero en la medida que
ya no es lo que era, esa coalición PAN-PRI ya no tiene la misma
cohesión que antes. Lo que vimos es que ese bloque conservador de
1989 no es invencible. Derrotar la alianza PRI-PAN era impensable, pero
ahora, por la división del PRI, se pudo".
-Pero, ¿acaso estamos frente a un escenario donde
Madrazo es un progresista?
-No. Madrazo está atrapado. El salía ganando
si se aprobaba el IVA, porque le hubiera podido mostrar a los empresarios
y a sus aliados políticos que era capaz de sacar lo que ellos querían.
En el fondo perdió esa votación y ahora les resulta disfuncional
a esos sectores. Pero tampoco se puede correr para el otro lado, porque
no tiene coincidencias ideológicas con los sectores progresistas.
Ahí ya se desfigura.
"Hay que tener claridad, porque si no, vamos a caer en
definiciones mecanicistas. Sería erróneo pensar que todo
el grupo del PRI que votó en contra del IVA es de izquierda y todo
el que votó en favor es conservador. Como te decía, en el
PRI las diferencias ideológicas no se corresponden estrictamente
con las divisiones de los grupos."
-Hay una gran confusión en el país.
-Sí. Porque la confusión se volvió
un recurso político. Se le ha cambiado el nombre a las cosas para
reducir las resistencias. Nadie dice con claridad, como ocurre en otros
países, que una propuesta que incluye subir los impuestos a los
sectores de menos ingresos, como es el caso de un IVA generalizado, y bajar
el ISR a las empresas o a quienes tienen altos ingresos, es conservadora.
Con su propaganda, el gobierno ha convertido sus contrarreformas en reformas
y presentado a quienes se oponen a ellas como los enemigos del cambio.
Esta es la manera como ha estado operando la política en años
recientes, con un objetivo muy claro: sacar adelante una serie de decisiones
que no serían bien recibidas por la población si fueran llamadas
por su nombre.
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