LA VIDA (BREVE) EN SAN LAZARO

José Agustín Ortiz Pinchetti

ƑSe despedazarán entre sí por el poder?

HAY SIGNOS DE VIDA en Marte... y también en la Cámara de Diputados. Empiezan a reunirse las comisiones y, aunque rara vez se logra el quórum, los diputados introducen en el laberinto del Palacio Legislativo un ánimo travieso: rumores, chistes, felicitaciones tardías por el año nuevo. Conforme se acerca el periodo de sesiones, la Cámara se reanimará. Sobre todo por los conflictos con el Poder Ejecutivo. He aquí unos ejemplos:

1. EL PRESIDENTE FOX va a ir por la revancha en el tema del impuesto al valor agregado (IVA). Seguirá acusando al Congreso de haber impedido sus "reformas estructurales". Esto, a pesar de que el sentido común le dice que su partido no tiene poder para impulsar una reforma impopular. Habría que recordarle que sufrió una abrumadora derrota en las elecciones de 2003 (hoy no tiene 205 diputados, sino 151) y depende de aliados que son frágiles, no por "traidores", sino porque no quieren cargar con el costo en una carga tributaria mal aplicada.

DEBERIA RECORDAR QUE el señor Jeffrey Sachs, un gurú de los economistas, le advirtió que aumentar impuestos en una época de recesión es imposible. También valdría la pena que reflexionara por qué el señor Salinas, que ahora apoya el proyecto, nunca intentó aplicar el IVA generalizado en su época de oro. Por cierto, Salinas sigue "operando" políticamente, gracias a un episodio de amnesia colectiva.

2. EL GOBIERNO FEDERAL ha demandado ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación al Congreso por exigirle que entregue un informe trimestral sobre la operación de Petróleos Mexicanos y sobre la importación de alimentos básicos. Según el jefe del Ejecutivo, el Congreso se está excediendo en sus facultades. Se trata de algo sin precedentes y seguramente aumentará la irritación.

3. EL GOBIERNO PARECE haber tomado la iniciativa respecto del voto de los mexicanos en el extranjero. El subsecretario de Gobernación, Francisco Paoli, informó a la Cámara de Diputados de una serie de foros que se han realizado en Estados Unidos. De su comparecencia quedó claro que el Ejecutivo no tiene ningún proyecto serio en la materia y que tampoco ha intentado llegar a un acuerdo con el Poder Legislativo, que finalmente es el que va a decidir.

LOS SOSPECHOSISTAS INSISTEN en que el Ejecutivo ya tiene una propuesta, pero que la oculta. La verdad es que la reforma tiene sus tiempos contados y si no se produce en los próximos 10 meses se convertirá en otro más de los proyectos abortados. El tema tendría que esperar para después de 2006.

OTROS LEGISLADORES SOSPECHAN que en realidad el Poder Ejecutivo no tiene la menor intención de sacar adelante la reforma. Que enviará el proyecto a última hora, mal consensuado, y después, cuando fracase, culpará al Congreso, como ha sucedido en el tema indígena y en la reforma fiscal.

LO UNICO QUE puede proponerse es que se "amarre" un acuerdo con todos los dirigentes de los partidos, que tendrán que ser muy explícitos acerca de hasta dónde pueden o quieren llegar en este tema. Tendrán que ser incluidos genuinos representantes de las fracciones en el sondeo que está haciendo la Secretaría de Gobernación. Y esta exploración debe terminar ya. Si esperan un poco más, el proyecto se hundirá.

ESTOS CONFLICTOS ESTAN provocando exasperación en la opinión pública y en muchos analistas. Pero hay que recordarles que esto es parte de la democracia, que es mucho más conflictiva que los sistemas autoritarios. Claro, en la época de la Presidencia imperial el Congreso era un mero procesador de las iniciativas del Ejecutivo. Hoy está haciendo su trabajo y lo está haciendo bastante mejor de lo que podíamos haber esperado. Tenemos que acostumbrarnos a estas presiones y pugnas como algo natural. Si ustedes lo dudan, revisen la cotidianeidad parlamentaria de las democracias modernas. La verdad es que la pugna entre poderes en México se ha mantenido en límites civilizados. La importancia política y cultural que está adquiriendo la Suprema Corte y estas sanas tensiones y sus desenlaces aceptables se convierten en puntos a favor en el proceso de consolidación de la democracia mexicana.