También imprimirá para secundaria un texto en el sistema Braille

La SEP distribuirá libros para estudiantes con debilidad visual

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

La Secretaría de Educación Pública (SEP) distribuirá a partir de agosto, en el próximo ciclo escolar, libros para casi 2 mil estudiantes de primaria que padecen debilidad visual aguda, impresos con letras e imágenes que miden el doble del tamaño normal, y extenderá a secundaria el libro de texto en sistema Braille, para lo cual adquirió una máquina de impresión adicional.

La Comisión Nacional de los Libros de Texto Gratuitos (Conaliteg) anunciará hoy el nuevo programa. La elaboración de libros para débiles visuales representará una inversión de 6 millones 900 mil pesos, mientras la máquina para la impresión de textos en Braille tuvo un costo de un millón 100 mil pesos y se destinará a la publicación de 8 mil 300 ejemplares.

Por décadas la atención al problema de los alumnos con debilidad visual fue casi inexistente en las escuelas mexicanas. A partir de enero de 1999, cuando la SEP puso en marcha el programa Ver bien para aprender mejor, comenzó la recolección de fondos y la distribución de lentes para atender a 2.3 millones de niños que lo requieren, pero falta dar atención especial a aquellos que padecen una discapacidad visual más grave sin llegar a la ceguera.

En este grupo se encuentran menores -cuyo censo está por levantarse- que ven muy deficientemente y que no mejoran a pesar de tratamiento médico, quirúrgico y óptico, lo que constituye un obstáculo para su desarrollo normal. Necesitan herramientas especiales para leer y escribir, tales como letra impresa amplificada, lupas, ayudas telescópicas, software para agrandar la pantalla de la computadora, sintetizadores de voz y otros dispositivos.

El director de la Conaliteg, Jorge Velasco y Félix, explicó en entrevista con este diario que en un primer sondeo de estudiantes de primarias públicas con debilidad visual aguda se encontró que hay mil 932. Sin embargo, consideró que el número es mucho mayor. Por ello llamó a las autoridades estatales a que "se pongan las pilas", para que puedan detectar mejor estos casos.

La iniciativa surgió de una sugerencia del secretario de Educación de Baja California, José Posada, que un día le pidió ayuda a Velasco y Félix porque estaba haciendo un gasto considerable en la duplicación del tamaño de los libros. Fue así que la Conaliteg pidió a los representantes de la SEP en los estados que hicieran un sondeo y finalmente la secretaría aprobó la impresión de libros para los casi 2 mil estudiantes registrados.

En los nuevos libros el tamaño de la letra se duplicará (en la mayoría de los párrafos pasaría de 14 a 28 puntos) y lo mismo ocurrirá con la pantalla de impresión. Los recursos provendrán de ahorros que, según el funcionario, se hicieron en la compra de cajas para el empacado de los libros de texto.

Los estados que informaron tener un mayor número de estudiantes de primaria con debilidad visual aguda son: Nayarit con 360, México (134), Guerrero (128), Michoacán (120), Puebla (106), Yucatán (84) y Coahuila (80).

En el sondeo hubo estados que dijeron no tener un solo niño con este padecimiento (Baja California Sur, Colima, Oaxaca, Querétaro y Sonora). En tanto, otras entidades dieron una mínima cantidad de alumnos: Hidalgo (tres), Tlaxcala (nueve), Morelos (diez) y Baja California (12).

Por grado escolar, la distribución de estudiantes débiles visuales es la siguiente: 331 en primer año, 361 en segundo, 364 en tercero, 291 en cuarto, 303 en quinto y 282 en sexto. Se decidió imprimir 500 libros de cada grado para tener material adicional.

La otra novedad es la compra de una máquina impresora en sistema Braille, que se usará para libros de secundaria, que fue adquirida a una empresa de Bélgica con un costo de un millón 100 mil pesos.

La máquina ya fue instalada en la planta de la Conaliteg y se encargará de imprimir los textos de mayor demanda en secundaria, por considerar que en ese nivel educativo hay diversas opciones para cada grado y asignatura.

Velasco y Félix indicó que van pedir a las editoriales con más ventas de libros de secundaria que permitan poner sus materiales en Braille sin el pago de derechos.

De acuerdo con la Conaliteg, el número de estudiantes de secundaria invidentes en todo el país es de 361. La mayor parte son de Nayarit (cien), Michoacán (60), Coahuila (42) y Zacatecas (37). Tanto en el sondeo de débiles visuales como en el de invidentes, que proporcionó el director de la comisión, no aparece información del Distrito Federal.

La compra de la nueva tecnología, añadió, es muy importante, porque se van a poder cubrir las necesidades de niños que tienen deseos de seguir estudiando. Además señaló que representa una innovación en América Latina, lo mismo que los libros para débiles visuales.

Desde 1966 la SEP reparte libros de primaria en sistema Braille. La máquina que opera actualmente produce 30 mil al año, es decir, 82 libros al día. El próximo proyecto, informó el funcionario, será la impresión de libros para conformar una biblioteca de aula para invidentes, considerando que la máquina nueva tiene capacidad para imprimir 20 mil adicionales.