Comenzó gira

Copperfield asombra con viaje relámpago

DAVID CARRIZALES CORRESPONSAL

Monterrey, NL, 18 de febrero. El ilusionista David Copperfield actuó anoche en el Teatro de la Ciudad, en cuyo escenario apareció un lujoso automóvil Lincoln 1948, que era el sueño de su abuelo; y entre otros trucos que divirtieron y asombraron al público disminuyó su estatura hasta parecer más pequeño que Nelson Ned.

El mago, originario de Nueva Jersey, traspasó una lámina de acero, y en un minuto viajó, de ida y vuelta a una playa de Finlandia, acompañado por un joven que desde niño tenía la ilusión de conocer aquel país, pero que su padre, Pedro López, no pudo cumplirle y dejó de ser su héroe; un día salió de la casa para no regresar.

Al centro del escenario estaba una pantalla en la que el público podía ver la supuesta playa en la que aparecieron Copperfield y su acompañante, tras desvanecerse un velo. Cumplida su tarea, el mago fue cubierto nuevamente por la tela y cuando sus asistentes la retiraron, él ya no estaba; se apagaron un momento las luces y al encenderse, el ilusionista estaba entre el público, al fondo del teatro, mientras dejaba caer un puñado de arena, supuesta prueba de su viaje.

Como acto final, el ilusionista desapareció a 13 espectadores escogidos al azar, que, para sorpresa del público, en lugar de estar sobre el escenario, fueron localizados a unos 40 metros de distancia, en el segundo nivel del teatro, que lució un lleno total.

Así, Coppferfield comenzó su gira por México, que culminará la próxima semana en el Auditorio Nacional de la capital del país.