México D.F. Viernes 27 de febrero de 2004
Londres retira cargos contra la acusada de filtrar datos
La SRE ve difícil probar si hubo espionaje de EU o GB
REUTERS
El gobierno de México señaló que ve difícil verificar si Estados Unidos o Gran Bretaña espiaron su representación ante la ONU, antes de la guerra contra Irak, después de que Londres retiró cargos contra una traductora acusada de filtrar información condifencial a la prensa.
''Si no hay juicio, seguramente no habrá ninguna verificación de si hubo o no hubo espionaje'', dijo el canciller Luis Ernesto Derbez a periodistas.
El miércoles, los fiscales británicos dijeron que no tenían evidencia suficiente para probar que la traductora Katharine Gunn, de 29 años, filtró un memorando estadunidense que pedía ayuda al gobierno del primer ministro Tony Blair para espiar a miembros de Naciones Unidas antes de lanzar la invasión contra Irak.
Las acusaciones contra Gunn fueron retiradas a pesar de que ella había admitido la entrega del documento secreto que, según dijo, revelaba el plan de Washington para espiar misiones en la ONU de miembros del Consejo de Seguridad indecisos sobre si apoyar o no la invasión de marzo del año pasado.
''La posición nuestra es sencillamente que nosotros no tenemos verificación propia'', dijo Derbez. ''No tenemos de ninguna manera una verificación que pudiéramos decir 'aquí están, encontré este microfonito, encontré esta cosa', eso no se dio y no existe en nuestro caso'', añadió el canciller.
Pero un día después de retirarse las acusaciones contra Gunn, la ex ministra británica Clare Short dijo ayer que su país espió al secretario general de la ONU, Kofi Annan, antes de la invasión a Irak.
México, que ocupaba un asiento en el Consejo de Seguridad de la ONU en ese periodo, reveló este mes que envió a los gobiernos de Washington y Londres en diciembre notas diplomáticas para aclarar las sospechas sobre el posible espionaje.
Durante el periodo previo a la guerra, que culminó con el derrocamiento del presidente iraquí, Saddam Hussein, el consejo atravesó un fuerte debate y divisiones internas sobre avalar o no la guerra contra el país árabe.
México negó su apoyo a la coalición formada por Estados Unidos, Gran Bretaña y España para una invasión contra Irak, que se concretó en marzo de 2003, lo que creó tensiones entre ambos vecinos y socios comerciales.
El ex embajador mexicano en la ONU, Adolfo Aguilar Zinser, quien estaba a cargo en ese entonces, dijo hace unos días que estaba convencido de que la misión de México había sido espiada.
Aguilar Zinser dejó el cargo el 20 de noviembre de 2003, tras el revuelo que causaron unas críticas suyas a Estados Unidos. El también ex embajador de Chile en las Naciones Unidas, Juan Gabriel Valdés, había dicho que la representación de su país, con un escaño no permanente en el consejo, había sido espiada en febrero del año pasado.
|