Un muerto, saldo de otra jornada de protestas de la oposición en Venezuela

Declararán nulas casi 50% de firmas recabadas contra Chávez, trasciende

El presidente asegura que Latinoamérica repudia a Bush, a quien calificó de "muy pendejo"

REUTERS, AFP Y DPA

Caracas, 1º de marzo. El Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE) no validará casi la mitad de las 3 millones 400 mil firmas recabadas para someter a referendo la revocación del mandato del presidente Hugo Chávez, trascendió hoy aquí en una jornada marcada por nuevas protestas contra el gobernante, con saldo de un muerto.

A la efervescencia política se sumó una gran confusión sobre la continunidad de los trabajos de observación que realiza aquí el Centro Carter, pues el presidente del CNE, Francisco Carrasquero, informó en la tarde que dicho centro daba por concluida su misión en este país, luego que una de las integrantes de la entidad electoral, Sobella Mejías, se pronunció contra la revisión de las firmas recabadas para un referendo contra Chávez.

No obstante, más tarde, la jefa de la misión del Centro Carter, Jennifer McCoy, negó el retiro de los observadores internacionales y aclaró que la confusión se debió a que ella y el otro representante, Francisco Diez, viajarán por razones personales. Ella irá a Atlanta y el segundo a Argentina.

Diez atribuyó la confusión a las tensiones del momento que se viven en el CNE, y precisó los detalles del incidente: "Estábamos esperando a la rectora Sobella Mejías, y luego de que ella hiciera una presentación pública, cambiaron las condiciones del diálogo. Nosotros informamos a todos los demás (rectores) que pensamos que no es conveniente seguir adelante con esa iniciativa en este momento".

Explicó que lo único que quiso decir es que se retiraban de la reunión de hoy específicamente y de las instalaciones del CNE, mas no de la labor que han venido cumpliendo.

Aclarada esa confusión, el CNE anunció la postergación para mañana de la divulgación del informe sobre el proceso de verificación de firmas para el referendo revocatorio contra Chávez, y oficializar el 25 de marzo si procede la solicitud de los opositores al mandatario.

Pero los resultados que el CNE no divulgó se filtraron a los medios de comunicación. Extraoficialmente se asegura que sólo un millón 914 mil 491 firmas superaron el proceso de verificación, de las 3.4 millones de rúbricas que entregó la oposición para pedir el referendo, informó el diario caraqueño El Universal en su edición digital.

Los opositores dijeron que mantendrán las protestas hasta que el CNE rectifique su posición de objetar las firmas y ordene que los electores cuestionados ratifiquen su petición. Un miembro de la Coordinadora Democrática (CD), Delsa Solórzano, afirmó: "estamos en este momento en desobediencia civil", y señaló que el CNE, por órdenes del gobierno, está evitando el referendo.

Enfrentamientos y aprehensiones

Las protestas de la oposición, iniciadas el pasado viernes, se reanudaron temprano. Efectivos militares dispersaron con gases lacrimógenos a manifestantes que bloquearon avenidas y autopistas de Caracas con barricadas y neumáticos incendiados.

Los incidentes ocurrieron en las cercanías de la Plaza Altamira, enclave opositor, y en otros sectores del sureste de la capital donde, al caer la noche, proseguían enfrentamientos entre manifestantes y la militarizada Guardia Nacional. La agencia Reuters refirió que hubo un muerto, pero no dio más precisiones.

Aunque las protestas se centraron en áreas residenciales del este de la capital, también se efectuaron manifestaciones en zonas del centro, donde las fuerzas del orden multiplicaron su movilización.

Unas 30 personas fueron detenidas por los cuerpos de seguridad, reveló el comandante de la Guarnición Militar de Caracas, el general de división Carlos Acosta Pérez.

En Baruta se produjo un enfrentamiento entre opositores y oficialistas, en el cual fue agredido un equipo de Globovisión, mientras la Guardia Nacional disparó una bomba lacrimógena que penetró el primer piso de la Policlínica Metropolitana, lo que ameritó el traslado de los pacientes al área de urgencias.

De su lado, Amnistía Internacional instó a las fuerzas de seguridad venezolanas a actuar con escrupuloso cumplimiento de las normas que regulan el uso de la fuerza contra manifestaciones y movilizaciones.

El ministro de Información, José Chacón, afirmó que las manifestaciones violentas se efectúan sólo donde los alcaldes opositores las permiten, pero aseguró que, a pesar de los desórdenes, la situación no amerita decretar el estado de emergencia.

A su vez, el ministro de Defensa, Jorge Luis Carneiro, sostuvo que las fuerzas armadas "harán respetar la Constitución y pondrán orden", tras señalar que los focos estén bien identificados, en la parte del este, es decir, en los barrios residenciales, no en los pobres, y también descartó un estado de excepción.

Valencia, Miranda, Mérida y Maracaibo fueron también escenario de protestas opositoras, a las cuales reprimió la militarizada Guardia Nacional.

Así las cosas, la poderosa y opositora agrupación empresarial Fedecámaras calificó de insólita la amenaza de Chávez de cortar el suministro de petróleo a Estados Unidos en caso de que el país se vea bloqueado o invadido.

Precisamente el embajador de Caracas en Washington, Bernardo Alvarez, advirtió hoy a Estados Unidos del peligro de una crisis petrolera en caso de desestabilización de Venezuela, tras recordar que la producción de crudo de su país es, fundamentalmente, para exportar a esa nación norteamericana.

Mientras tanto, Chávez, que ayer calificó de "muy pendejo" a George W. Bush y lo acusó de ser un gobernante ilegítimo, aseguró que América Latina se levanta contra el presidente de Estados Unidos, en una entrevista con la emisora colombiana RCN, en la que también aseguró que enfrentará y derrotará a los opositores.

Afirmó que en estos días habrá una serie de manifestaciones en países de América Latina e incluso en Estados Unidos, en apoyo a su gobierno y la revolución bolivariana y "contra la pretensión del señor Bush de seguir atropellando la verdad, de continuar impulsando la injerencia y el intervencionismo colonialista en este continente".

Chávez consideró que América Latina viene recuperando su dignidad y su soberanía, y agregó que "desde México hasta Argentina hay un pueblo acostumbrado a luchar por su soberanía y dispuesto a seguir luchando por ella".

Aseguró, por otro lado, que enfrentará y derrotará a sus opositores. "En Venezuela no hay una oposición política con la cual se pueda hablar racionalmente; sólo hay que decirles a los alocados y desesperados de estos focos violentos, que ya no son oposición política, que ya han caído en el terreno subversivo y que los enfrentaremos y los derrotaremos", concluyó.