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México D.F. Lunes 29 de marzo de 2004
José Cueli
El toro a la horizontal
"El toro es a la horizontal lo que el torero es a la vertical, esto es geometría ancestral'', dice el poeta. El toreo se basa en la diferencia de ejes entre el hombre y el toro. El toreo tiene un eje horizontal, planea en traslación, gira y rota así al torero, es el eje del arco de un círculo que describe el toro y le permite la pureza en los lances y el juego de la pierna que torea.
Federico Alcázar, crítico taurino madrileño del siglo pasado, planteaba en sus crónicas la duda de la pierna que se adelantaba al torear, no al citar -no hay que confundir-, y la planteaba en los siguientes términos: Ƒcuál es la pierna contraria? ƑLa opuesta del lado del toro por donde se torea? Si es así, cuando se torea por el lado izquierdo la pierna contraria es la derecha y a la inversa. ƑY cómo se puede echar adelante o adelantar la pierna contraria al torear, no al citar?
Esta es la cuestión reducida a su expresión más simple. La pierna que se debería adelantar o echar adelante es la del lado del toro por donde se torea, que no es la contraria, colocándose en posición violenta para torear e impidiéndose cargar la suerte y ligar los pases. O sea, se puede adelantar la pierna contraria al citar, pero no al ejecutar la suerte, al torear.
A los toros parados, débiles que se lidian hoy día, los toreros les porfían y obligan a embestir a zapatillazos, voces, golpes con la pierna contraria en la parte de acá de la pala del pitón para obligarlos a tomar el engaño. Según el que esto suscribe eso no es torear, porque la pierna que torea es la del lado por donde se torea. Y no se puede torear a menos de dar la distancia adecuada al toro para torear con la pierna del lado en que se torea.
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