México D.F. Martes 13 de abril de 2004
Observadores del PC francés relatan los hechos que presenciaron en Zinacantán
Tendieron "una trampa" a zapatistas
HERMANN BELLINGHAUSEN ENVIADO
San Cristobal de las Casas, Chis. 12 de abril. "Cuando empezó el problema nos dimos cuenta que se trataba de una trampa. Jech'vó es un cul de sac (callejón sin salida). De todos modos, no esperábamos lo que sucedió. La manifestación de los zapatistas era tan tranquila y pacífica. Sin armas. Al no ver policía, estábamos tranquilos."
Habla Marie Billi, miembro de un grupo de observadores civiles del Partido Comunista Francés (PCF) que acompañó el sábado la movilización de las bases de apoyo del EZLN a Jech'vó, para llevar agua a las familias zapatistas en Zinacantán. "Pudo ser más grave. En un lugar cerrado, con una sola salida, pudo haber una matanza", prosigue Billi. "Nos extrañó que nadie interviniera para evitar los hechos. Hubo tiempo suficiente. En los días que llevamos en Chiapas, hemos visto patrullajes militares y de policía por todas partes. Sólo en el camino de San Cristóbal a San Andrés, hay tantos campamentos de vigilancia armada, que parece Palestina."
Los demás observadores de PCF, de la región de Niza, son Jean Jacques Parent, Sylviane Douhet y Michel Dandon. Billi rememora: "los zapatistas se veían tan sorprendidos, que nos hicieron recordar la manifestación de Génova en 2002, cuando la gente iba con niños, confiada, festiva. Y fuimos atacados brutalmente".
Contrasta "la tranquilidad y el amor" de la manifestación zapatista, y "el odio y la violencia" que recibió. "Para nosotros fue un choque muy fuerte ver gente igual entre sí enfrentada. No eran un ejército, ni policías, sino campesinos. Al salir por Nachig el ambiente era hostil, de insultos. Y esta gente sólo había llevado agua a sus hermanos."
La observadora francesa se dice convencida de que el ataque "fue una trampa organizada, y con una protección que suponemos oficial". Los agresores "actuaron abiertamente, sin temor, como lo hace sólo alguien respaldado de arriba". Para los observadores del PCF, "la violencia no tenía justificación".
Los hechos "demuestran que el gobierno es débil. El ataque no fue una demostración de fuerza, sino de debilidad. El gobierno le tiene miedo a este movimiento político, organizado y pacífico; necesita la violencia".
Refiere que después del bloqueo, la tarde del 10 de abril, la marcha "se organizó muy bien. Al empezar los balazos y ver sus heridos, la gente corrió muy asustada, pero vimos gente suya protegiéndolos. Cuando los carros pasaron con heridos, vimos grandes orificios de bala en la lámina" (e indica un círculo más grande que una moneda de un peso).
Corregir el ideal
Tras anunciar que en cuanto retornen a su país enviarán una protesta formal al embajador de México en París por el ataque que presenciaron contra las bases de apoyo del EZLN, los observadores franceses relatan que este domingo se entrevistaron con la junta de buen gobierno (JBG) de Oventic, y todavía no se reponen de la impresión: "Para nosotros, después del necesario fin del comunismo soviético y de todos esos fracasos, el zapatismo representa, para todo el mundo, el renacimiento de los pueblos. No son una esperanza 'ideal'. Han logrado crear un gobierno local diferente. En Francia tenemos mucha teoría, pero no podemos. Ellos tienen todo en contra; más que nosotros, pues el capitalismo en México es más salvaje. Pero los zapatistas demuestran que es posible hacer otra cosa, y corren riesgos, como acabamos de ver".
Los veteranos luchadores sociales, sobrevivientes (aún bastante enteros) del derrumbe comunista, dicen encontrar en Chiapas "un vivero para la humanidad". Los zapatistas están "en la base del altermunismo", pero a diferencia de ese movimiento global, "ya encontraron el camino para llevar la alternativa a la práctica, donde nosotros hemos fallado en Europa".
Marie Billi reconoce que el movimiento zapatista "es peligroso para los poderes del mundo entero. Su ejemplo es inmenso. Tienen la fuerza de su palabra, que es hermosa y deja soñar, enseña que 'poder' es poder decir. La noción de dignidad es central en su lucha. Me hacen pensar en el nacimiento de la revolución cubana".
Rescata una frase de su larga y "estimulante conversación con la JBG Corazón céntrico de los zapatistas delante del mundo. "La lucha nos ha humanizado, antes éramos tratados como animales. Ahora sólo aceptamos que nos traten como personas", dijeron los indígenas rebeldes. Billi es vehemente: "ellos humanizan el mundo. Cambian la actual ruta de muerte y destrucción. Tienen mucho amor hacia los demás. También ahí está su fuerza".
En los indígenas de Chiapas hay "lo que le faltó al comunismo: luchan contra todas las formas de opresión, no sólo la económica y de producción. No construyen desde arriba, sino de abajo. Han corregido el ideal que alimentó al comunismo antes de fracasar".
Otro de los observadores del PCF viste una camiseta del encuentro europeo realizado en Larzac (Francia) del 8 al 10 de agosto de 2003, que fue simultáneo a la creación de los caracoles zapatistas. Y comenta en francés: "mientras nosotros hablábamos allá de que otro mundo es posible, los zapatistas lo estaban construyendo".
|