Salvo comestibles y productos de aseo personal, la mercancía fue retirada para retiquetarla

Alza de precios provoca tumultos en tiendas de Cuba para adquirir comida

Convocan para el viernes a una manifestación en contra de las medidas de Washington

GERARDO ARREOLA CORRESPONSAL

La Habana, 11 de mayo. Los cubanos formaron hoy largas filas y, en algunos casos, padecieron tumultos para comprar en dólares alimentos y artículos de higiene personal, antes de una anunciada alza de precios.

Un plan de ajuste económico, difundido el lunes, fue explicado como respuesta al endurecimiento de la política de Estados Unidos hacia Cuba y por ello la población fue convocada para una manifestación de protesta contra el gobierno de Washington, para el próximo viernes.

Los comestibles, los artículos de aseo y los combustibles del mercado en dólares se vendieron este martes a los precios anteriores, sin que hubiera indicios del nivel de los aumentos.

El primer efecto visible del paquete de ajuste fue una masiva entrega de divisas a las arcas del Estado, por medio de la presión popular sobre los anaqueles de alimentos y efectos de higiene etiquetados en billete verde.

El resto de la oferta de bienes en dólares salió del mercado para inventario y reclasificación y un alza de precios posterior, dijeron a La Jornada empleados de tiendas.

Esta será la primera alza generalizada de precios en Cuba desde que el país legalizó la circulación del dólar en 1993 y se inició la oferta de mercancía en esa moneda.

En esta década la isla ha creado un mercado interno en moneda fuerte, que ahora incluye ropa, calzado, peletería, bisutería, joyería, muebles, textiles, ferretería, autopartes, artículos para el hogar y electrodomésticos.

La oferta libre en dólares, alimentada por importaciones y producción local, también reúne materiales de construcción, herramientas, papelería, equipos informáticos y fotográficos, cintas de audio y video e implementos deportivos, entre otros ramos.

El gobierno ordenó el lunes sacar del mercado, "hasta nuevo aviso", el grueso de la oferta en dólares y dejar disponible sólo la de comestibles y artículos de aseo.

El anuncio oficial advirtió que el ajuste será insuficiente para compensar los precios de los alimentos y el "costo casi inaccesible del petróleo".

La factura petrolera (mil millones de dólares al año) y la alimentaria (mil 200 millones) son las principales presiones en la balanza de pagos, de la que se desconocen precisiones oficiales y que expertos consideran con un déficit al alza "insoportable".

Pero la factura política está claramente dirigida al gobierno de Estados Unidos.

"Nuestro pueblo, que conoce bien su historia y construye con sacrificio y confianza su futuro, no está dispuesto a ser humillado, ultrajado y pisoteado por sus enemigos", dijo la convocatoria oficial a la marcha "contra la política fascista" de la Casa Blanca.

El plan estadunidense para "acelerar la transición" en Cuba incluye restricciones a los viajes familiares y al envío de remesas, calculadas en cerca de mil millones de dólares anuales.

El ajuste económico sigue al control de cambios adoptado en 2003 y a la prohibición de este año de que las compañías locales operen con divisas en giros que no son los sustanciales de cada una.

Un programa de perfil recaudatorio, como el que está en curso, fue objeto de conjeturas callejeras hace dos años, al filtrarse detalles de una política que finalmente no se consumó.

Sin embargo, el ministro de Economía y Planificación, José Luis Rodríguez, anticipó en diciembre pasado en su informe al parlamento la dificultad de enfrentar en 2004 "los altos precios del petróleo y los alimentos, que contrastan con los reducidos precios del azúcar".

La línea económica sería, dijo entonces Rodríguez, "elevar la eficiencia económica, reducir gastos, incrementar los ingresos y concentrar los recursos y las decisiones para su uso".