Acatará la resolución del tribunal electoral, pero la considera "injusta y excesiva"

Deslinda Bravo Mena al titular del Ejecutivo

La dirigencia nacional del PAN expresó que respeta y acata la resolución que tomó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), a partir de la cual se le suspende el financiamiento público hasta que termine de pagar una multa de 399 millones de pesos, por haber incurrido en irregularidades durante la campaña electoral presidencial de 2000.

Pese a asumir la sanción, la calificó de injusta y excesiva, pues se dictaminó sobre actividades que no están reguladas por la ley electoral, como es el caso de las precampañas. Lamentó que los magistrados no hayan "valorado debidamente las pruebas presentadas en tiempo y forma".

Luego de conocer que el tribunal le impuso la sanción, que le impedirá contar con financiamiento público por 10 meses, el dirigente Luis Felipe Bravo Mena dijo que el dictamen tiene un alto contenido de injusticia, pues el tribunal prejuzga que el entonces candidato Vicente Fox conocía del financiamiento, pero no hay pruebas de ello, por lo que no comparte ese punto de vista de la resolución.

Por lo demás, deslindó a Fox de toda responsabilidad y resaltó que el PAN "asume el resolutivo y la sanción con entereza y con plena institucionalidad".

Según Bravo Mena, los magistrados emitieron su fallo luego de hacer una sumatoria de situaciones, entre ellas una que no está regulada: las precampañas.

Sobre el impacto que tendrá la suspensión total de las prerrogativas, sostuvo que se obligará a un periodo especial de austeridad. Pero pese a ello, confió en que el blanquiazul saldrá adelante, pues aseguró que tiene finanzas sanas, sin deudas. Eso sí, tendrá que recurrir a las aportaciones y al trabajo de los militantes, explicó.

De esta manera, la dirigencia nacional panista reconoció que la sanción económica los pondrá en "cierta desventaja" durante los procesos electorales del presente año.

GEORGINA SALDIERNA