El ex delegado ya se encuentra en calidad de indiciado: Bátiz

La nueva investigación por fraude en Tláhuac complica la situación de Martínez Rojo

AGUSTIN SALGADO

Con el nuevo expediente consignado a un juzgado penal del Reclusorio Norte, referido a Carlos Ahumada Kurtz y varios ex funcionarios de la delegación Tláhuac, por un fraude de más de dos millones de pesos, se complica la situación jurídica del ex titular de esa demarcación, Francisco Martínez Rojo.

El titular de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), Bernardo Bátiz Vázquez, estableció que Martínez Rojo ya se encuentra en calidad de indiciado, y adelantó que está por concluir una averiguación en su contra.

Sobre la ex jefa de Gobierno, Rosario Robles Berlanga, el procurador señaló que aún no se encuentran elementos para iniciar una indagatoria.

Acerca de la acusación de Carlos Imaz a la ex perredista, en el sentido de que cometió una falta al presentar un documento de una averiguación del fuero federal ante un juzgado del fuero común, Bátiz explicó que la situación es similar a la acusación de la Procuraduría General de la República contra funcionarios de la PGJDF por haber utilizado una copia de la investigación al ex secretario de Finanzas, Gustavo Ponce Meléndez.

Bátiz Vázquez consideró que el caso de Tláhuac es similar al de la Gustavo A. Madero: se hicieron una serie de pagos, que ascienden a 2 millones de pesos, por una aparente adquisición de materiales de construcción, "los cuales no tienen ningún respaldo en contratos, facturas, ni autorizaciones".

Indicó que el ex funcionario Jaime Arturo Hidalgo López, quien ya está a disposición del juez, trabajó primero en Grupo Quart, propiedad de Carlos Ahumada, y luego "fue incrustado" en la delegación Tláhuac, donde "autorizó pagos sin ningún fundamento, pagos indebidos. Esta era la manera de actuar de Ahumada, colocaba gente en las delegaciones", abundó.