Advierte sobre la crisis de bienestar social en el país

Ni al empresario le va bien con Fox: López Obrador

Especuladores y banqueros, beneficiarios del modelo

ANGEL BOLAÑOS SANCHEZ

Más allá del problema de la inseguridad pública, sobre el cual no quiso hablar por considerar que sigue teniendo "mucho ruido", el jefe del Gobierno del Distrito Federal (GDF), Andrés Manuel López Obrador, advirtió que un problema de fondo en todo el país es el agravamiento de la crisis de bienestar social, por lo que el propósito de cambiar la política económica no tiene razones ideológicas, sino estrictamente técnicas.

Si se quiere una sociedad mejor, apuntó, se tiene que procurar más igualdad y menos pobreza, y agregó que de 1982 a 2003 el crecimiento per cápita fue cero, lo que definió como "dos décadas perdidas", mientras que en el gobierno de Vicente Fox "nada más les digo que no ha cambiado la política económica".

Advirtió que ningún modelo económico va a funcionar si persiste la corrupción, y en esto enmarcó el "boquete" de 80 mil millones de dólares que significa para las finanzas públicas el Fobaproa.

A esto añadió que la Secretaría de Hacienda oculta información sobre la deuda pública al manejar una doble contabilidad, pues dice que hay una deuda (externa) de casi 80 mil millones de dólares, cuando la cifra es de alrededor de 220 mil millones, pero no considera la deuda (llamada contingente) del Fobaproa-IPAB, que asciende a unos 80 mil millones de dólares, ni los proyectos de impacto diferido en el gasto (Pidiregas, que asciende a unos 30 mil millones de dólares) ni otros hoyos (como el del rescate carretero, que representa otros 11 mil millones de dólares), a lo que habría que agregar la deuda pública interna, de casi 77 mil millones de dólares, lo que eleva la cifra a más de 277 mil millones.

"Por eso hice ayer un planteamiento para cambiar la política económica que no ha funcionado, que una y una y otra vez ha fracasado", dijo, y recordó los tres planteamientos de su "nueva política de desarrollo" que dio a conocer el martes en un foro de la revista británica The Economist: reactivación económica y generación de empleos, modernización del sector energético y rescate del campo.

En el primer caso, expuso que no se trata de pensar sólo en la macroeconomía, como hacen los tecnócratas en la actualidad, sino en impulsar las actividades productivas y la generación de empleos.

Sobre el segundo punto, advirtió que desde hace 20 años no se invierte en el sector energético, se siguen explotando los mismos pozos petroleros de fines de los años 70, no hay exploración de nuevos yacimientos y mucho menos se capitaliza la industria petroquímica que, por el contrario, "se está cayendo a pedazos", y además se importa gas y gasolina. "Estamos en el absurdo", apuntó.

En cuanto al tercer punto, aseguró que nunca como en los tres años de la gestión foxista habían emigrado tantos mexicanos, un millón 200 mil, por el abandono en el que se encuentra el campo: mientras que en los años 60 dejaban sus tierras de 25 a 30 mil personas, ahora se van más de 300 mil, por lo que es urgente la necesidad de reactivar el sector. "Con el actual modelo económico ni a los empresarios les ha ido bien y sólo se han beneficiado los especuladores y los banqueros", dijo.