Demandarán al Ministerio de Defensa británico por negligencia

La madre de un soldado británico muerto en la región iraquí chiíta de Basora, en junio pasado, demandará ante tribunales británicos al Ministerio de Defensa por actuar negligentemente en la capacitación y seguridad de su hijo de 19 años, Gordon Gentle, cuyo caso será el primero en la historia de Gran Bretaña en que una entidad de gobierno sea perseguida por la muerte de un militar en combate.

Rose Gentle, quien la semana pasada abandonó abruptamente una reunión con el viceprimer ministro John Prescott cuando el funcionario le dio explicaciones insatisfactorias sobre el fallecimiento de su hijo, anunció hoy su decisión de llevar su querella ante un juez.

Gentle es uno de los 65 militares británicos que han muerto en Irak desde que en marzo de 2003 Gran Bretaña acompañó a Estados Unidos en la invasión de ese país, donde hay 9 mil uniformados británicos, principalmente estacionados en la zona petrolera del sureste. El soldado iba en una caravana cuando el vehículo en el que viajaba fue atacado con explosivos.

"El Ministerio de Defensa tiene el deber de entregar a los soldados el equipamiento necesario para su protección y la buena ejecución de su misión con el mínimo de riesgo", afirmó el abogado de la familia, John Cooper, quien precisó: "si no entregan este equipamiento, es una falta a su deber".

La madre de Gentle sostuvo que su hijo pudo haberse salvado si su patrulla hubiera estado equipada con un dispositivo de señal electrónico, que impide que una bomba detone.

REUTERS Y AFP