México D.F. Martes 24 de agosto de 2004
Alertan Las Abejas
Ligados, comicios y tensión social en Chiapas
El grupo Las Abejas apremió a los gobiernos estatal y federal a promover el desarme de los paramilitares y exigió el retiro de los destacamentos del Ejército y la policía estatal de los municipios indígenas de los Altos, Selva y Norte de Chiapas.
Al recordar la matanza de Acteal, los representantes de Las Abejas expresaron su preocupación por el reactivamiento de la violencia en el municipio de Chenalhó, donde el pasado 11 de agosto un indígena desplazado fue emboscado y asesinado con armas de alto poder.
"Esta muerte es un trágico recordatorio de que en Chenalhó no hay verdadera paz, como dice el gobierno, que aparentemente las llamas del fuego están apagadas, pero dentro de las cenizas siguen encendidas las brasas de la guerra de baja intensidad", aseguran y critican las campañas políticas que realizan los partidos políticos con miras a las elecciones locales del próximo 3 de octubre.
Señalan que generalmente la situación que prevalece previa a las elecciones "siempre viene acompañada por desestabilización social, lo que no es casual", y hacen referencia a un problema surgido en la comunidad de Yaxgemel, donde dos grupos priístas -uno católico tradicional y otro pentecostal- están enfrentados por la construcción de una iglesia.
Ninguna de las dos partes, agregan Las Abejas, está buscando una vía pacífica de solución, que es el camino que siempre han buscado Las Abejas; por eso, dicen, se deslindaron de lo que pase. Recuerdan que algunos grupos han intentado presentar la matanza de Acteal como un problema religioso, "eso nunca ha existido, lo de Acteal no fue un problema religioso".
Anuncian que no votarán por ninguno de los candidatos a la presidencia municipal de Chenalhó. Decidieron marginarse de las elecciones porque los dos candidatos al ayuntamiento formaron parte de la organización paramilitar que mató a los 45 niños, mujeres y ancianos el 22 de diciembre de 1997.
"Queremos decirles a los políticos, tanto a los de Chenalhó como a los que actúan a nivel nacional, lo que dicen nuestros ancianos: para nosotros, los cargos son lo que dice su nombre, cargos o cargas. Son algo pesado que hay que cargar y por eso son una responsabilidad que muchos no quieren tomar. Pero para los políticos de los partidos los cargos son, como ellos mismos dicen, huesos con mucha carne, y por eso se pelean como perros para ver quién se queda con ellos". JUAN BALBOA
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