México D.F. Sábado 28 de agosto de 2004
Por primera vez dos hermanos suben al podio
en un deporte individual en justas veraniegas
Iridia Salazar, la sexta mexicana en ganar una presea
olímpica: bronce
Venció 3-2 a la española Sonia Reyes en
la categoría de 57 kg; gran apoyo en tribuna
NOTIMEX
Atenas, 27 de agosto. Por primera vez en la historia
de Juegos Olímpicos dos hermanos mexicanos subieron al podio de
medallistas en deportes individuales.
Con un aguerrido combate en el tercer asalto, Iridia Salazar
conquistó la medalla de bronce en la categoría de 57 kilogramos
en taekwondo, un día después de que su hermano Oscar consiguiera
la presea de plata en la división de menos de 58.
Asimismo, Iridia suma su nombre a la lista de mexicanas
que han ganado una presea olímpica: Pilar Roldán, María
Teresa Ramírez (México 68), Soraya Jiménez (Sydney
2000), Ana Guevara y Belem Guerrero.
La
atleta se recuperó en el combate por el tercer lugar, pues perdía
1-0 desde el primer asalto ante la española Sonia Reyes y en el
segundo episodio no pudo sumar, pero en el round definitivo se lanzó
a fondo y obtuvo el triunfo por 3-2.
En un parpadeo en el primer asalto la mexicana fue conectada
por la española y recibió un punto en contra.
En el episodio definitivo Iridia salió con agresividad
al ataque y obtuvo casi en forma simultánea dos puntos que le dieron
la ventaja cuando apenas habían transcurrido 10 segundos de contienda.
Ya con la tranquilidad de tener la puntuación a su favor, la mexicana
decidió pelear al contragolpe, lo que le dio resultados ya que consiguió
otro punto.
Ya sobre el final, la española conectó y
redujo a 3-2, pero ya no tuvo tiempo para empatar y al final del combate
surgieron gritos de júbilo de la tribuna para festejar la cuarta
medalla para México en Atenas 2004.
Largo fue el camino que la subcampeona mundial tuvo que
recorrer para llegar al tercer lugar, ya que tuvo que disputar cinco combates.
En su primera pelea enfrentó a la colombiana Paola
Delgado, a la que venció fácilmente 5-2. Ya en el grupo de
las ocho mejores, venció por superioridad tras un empate 7-7 a la
uzbeka Irina Kaydashova con un golpe al rostro que le valió dos
puntos.
Sin embargo, en semifinales cayó 3-2 (2-1 por penalización
de un punto a ambas competidoras) ante a la postre ganadora de la medalla
de oro, la coreana Jang Ji Won. La mexicana no pudo mantener su ventaja
de dos puntos en los primeros dos asaltos.
Esa derrota la llevó a la ronda del repechaje,
en la que su primera rival fue la italiana Cristiana Corsi, a la que se
impuso por cerrado 3-2. En el duelo por la medalla se encontró ante
la española Reyes, a quien venció cuatro veces en competencias
previas.
Esta es la segunda ocasión que dos hermanos consiguen
medalla para México en Juegos Olímpicos. La anterior fue
en Berlín 1936, donde Carlos y Víctor Borja consiguieron
bronce en basquetbol.
Se trata de la tercera presea para México en esta
disciplina desde que fue reconocida como deporte oficial, luego del bronce
conseguido por Víctor Estrada en Sydney 2000.
Dominan Irán y Corea del Sur
La coreana Jang Ji Won se impuso 2-1 a la estadounidense
Nia Abdallah, que se quedó con la plata.
La desanimó perder ante la coreana Won,
acepta
Es el mejor momento de mi vida: Iridia Salazar
Agradece la confianza de autoridades para su entrenador
NOTIMEX, AFP Y REUTERS
Atenas, 27 de agosto. "Es un sueño", expresó
una emocionada Iridia Salazar al bajar de la zona de combate y abrazar
a su hermano Oscar, quien un día antes también se había
convertido en medallista olímpico en Atenas.
"Sí, es un sueño que los dos seamos medallistas.
Este es el mejor momento de mi vida. Mi hermano que está aquí
conmigo me dio el máximo apoyo y su medalla de plata fue una gran
inspiración", señaló Iridia, abrazada también
por su padre y entrenador, Reynaldo Salazar, y su mamá, María
de Lourdes Blanco. De inmediato recibió una llamada telefónica
del gobernador de Michoacán, Lázaro Cárdenas Batel,
a quien agradeció el apoyo recibido.
"Todavía
no me la creo", dijo entre lágrimas y casi sin poder articular palabras.
"Ganar una medalla en Juegos Olímpicos ha sido el sueño de
toda mi vida. Este año ha sido muy difícil, muy agotador,
pero aquí está la recompensa", dijo y recordó que
no pudo conseguir su clasificación a Atenas en París, pero
luego lo hizo en el selectivo de Querétaro.
-¿Qué se siente ser medallista?
-Una emoción totalmente distinta. Siempre había
soñado con el momento en que me pusieran la medalla y el aro de
olivo.
Eufórica por su triunfo, se dio tiempo para pedir
el reconocimiento para su padre y técnico. "Gracias al profesor
(Nelson) Vargas y a CIMA, que confiaron en nuestro entrenador y nos dejaron
entrenar con él. El trabajo ha servido y vean, ya hay dos medallas.
Estoy muy emocionada y agradezco también a mi familia que tanto
me apoyó y a toda la gente de México", señaló.
Dijo estar contenta y satisfecha por las dos medallas
que consiguió la familia Salazar Blanco y agradeció a sus
padres "que me hayan llevado por el camino del deporte, a mi mamá
que me apoya y a mi papá que es mi entrenador las 24 horas".
Iridia aceptó que se sintió decepcionada
después de su derrota ante la coreana Won. "Eso me bajó un
poquito el ánimo, porque ya no tenía oportunidad de llegar
a la final, pero logré recuperarme y sabía que tenía
que luchar con todo por la medalla de bronce", expresó.
Mencionó que todavía no ha tenido oportunidad
de observar esa contienda, en la que hubo marcaciones polémicas
en su contra. "No le di tanta importancia porque tenía que prepararme
para el repechaje. Mi técnica en esa pelea estuvo un poco confusa",
apuntó.
Del combate contra la española Reyes, comentó
que se sintió nerviosa porque estaba en juego la medalla, y aunque
dijo haber sentido un poco de decepción porque pudo haber aspirado
a más, aseguró que la medalla de bronce es importante en
su carrera.
Ahora sus únicos proyectos son "tomarme unas vacaciones
y no me queda más que disfrutar todo esto".
Asimismo hizo votos porque el otro taekwondoín
mexicano, Víctor Estrada, "también consiga una medalla".
Iridia Salazar Blanco
México, DF
22 años
Hasta 57 kg
Abierto de Estados Unidos 2000, primer lugar
Abierto Mexicano 2000, primer lugar
Panamericano de Aruba 2000, segundo lugar
Abierto de España 2000, primer lugar
Copa del Mundo Francia 2000, primer lugar
Abierto de Holanda 2000, primer lugar
Copa del Mundo Vietnam 2001, tercer lugar
Campeonato Mundial Corea 2001, segundo lugar
Copa del Mundo Japón 2002, primer lugar
Abierto de Alemania 2002, tercer lugar
Juegos Centroamericanos El Salvador 2002, primer lugar
Abierto de Bélgica 2002, primer lugar
Abierto de Estados Unidos 2002, primer lugar
Juegos Panamericanos Santo Domingo 2003, primer lugar
Campeonato Mundial Alemania 2003, segundo lugar
Clasificatorio Olímpico Querétaro, primer lugar
Abierto de Alemania 2004, segundo lugar
Abierto de Holanda 2004, primer lugar
Juegos Olímpicos de Atenas 2004, tercer lugar
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Trabajaremos más
Sufrí más con los combates de ella: Oscar
NOTIMEX Y REUTERS
Atenas, 27 de agosto. Oscar Salazar se mostró muy emocionado por la medalla que consiguió su hermana Iridia, pero aclaró que con las preseas ganadas adquieren un mayor compromiso.
"Debemos seguir trabajando y tener los pies bien puestos en la tierra. Es muy importante no dejar de ser seres humanos sencillos y humildes", advirtió el medallista de plata, luego de la euforia por los festejos del triunfo de su hermana.
Expresó que su familia, muy unida en los aspectos deportivo y sentimental, ha trabajado muy duro para poder llegar al podio olímpico. Confesó haber sufrido más con los combates de Iridia que con los propios, pero resaltó que con las dos medallas de la familia el objetivo se cumplió.
"Cuando Iridia perdió el primer combate se vino un poco abajo porque ella estaba preparada para ganar oro. Había que sacarla de ese letargo, y lo único que le dije fue que ahí estaba la medalla, que si quería la tomara, si no, ni la mires; y la miró y se la colgó", reveló.
Mis hijos dejaron de estudiar
El entrenador y padre de ambos, Reynaldo Salazar, dijo que al realizar un balance con las medallas, sólo puede decir que ha sido el resultado de muchos años de sacrificios.
"Los muchachos empezaron desde los cinco años en el taekwondo, muchas veces los obligábamos a ir porque era importante mantenerlos en el deporte. Ellos han dejado sus estudios para seguir una carrera deportiva y los frutos ahora se han dado", indicó.
El jefe de familia añadió que afortunadamente han contado con el apoyo de las autoridades deportivas del país y ahí "están los resultados".
Por otra parte, en el Distrito Federal, alrededor de 20 personas entre familiares y amigos de la familia Salazar se reunieron en su casa de Iztapalapa donde festejaron la victoria de este viernes.
"Estoy muy emocionado y muy contento de pertenecer a esta familia, nunca dudé de que mis hermanos consiguieran este anhelado triunfo, estoy muy orgulloso de ellos", señaló Rodrigo, a quien sus hermanos también le dedicaron sus medallas.
Después de la victoria, el grupo salió del domicilio, echaron porras y hasta encendieron un cohete, que se le salió de control de las manos de Rodrigo y por poco causa un accidente.
Categoría menos 80 kg
Víctor Estrada, por la revancha ante Angel Matos
Atenas, 27 de agosto. El taekwondoín Víctor Estrada, medallista en Sydney 2000, entrará en acción este sábado, en la categoría de menos de 80 kilos, al enfrentar en su primer combate al recio cubano Angel Matos.
Se trata de la última esperanza de medalla para México, a un día de que terminen los Juegos Olímpicos.
Estrada, quien obtuvo la medalla de bronce en Sydney 2000, tendrá cuatro años después la oportunidad de una revancha, ya que Matos fue quien lo relegó de la lucha por la presea de oro. Además, el cubano es el monarca defensor en esta categoría.
En caso que Estrada salga avante de este compromiso tendrá otro duro rival en la siguiente fase, pues se vería las caras con el estadunidense Steve López, campeón mundial en 2001 y 2003. NOTIMEX
Unas 10 mil personas festejaron a la subcampeona
olímpica que llegó en un turibús
La medallista de plata, Belem Guerrero, fue recibida
en Neza como una heroína
Pese al cansancio por el viaje, la pedalista convivió
algunos momentos con su gente
JORGE SEPULVEDA MARIN RENE RAMON CORRESPONSAL
Ciudad Nezahualcoyotl, 27 de agosto. Se fue con
un sueño en la mente y regresó con una medalla en el cuello.
Belem Guerrero Méndez, orgullosa representante de este municipio
mexiquense, se rencontró ayer con su gente, que la recibió
con un gran fiestón.
La explanada del palacio municipal Unión de Fuerzas
hizo honor a su nombre, porque desde las 16 horas empezó la llegada
de los vecinos, quienes pese a la latente amenaza de lluvia no se movieron
del lugar que apartaron para el gran momento, para cuando la subcampeona
olímpica de Atenas llegara a saludarlos.
Del
Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México la pedalista fue
conducida en un turibús descubierto y su paso llamaba la atención
de transeúntes, vecinos y automovilista.
Belem sintió una fuerte emoción cuando cruzó
los límites de la capital de la República para internarse
en este municipio. Sus vecinos formaban vallas a su paso y se paralizó
la circulación en algunas calles.
A las 19:45 horas las aproximadamente 10 mil personas
apostadas en la explanada estallaron en júbilo. Hubo pocas banderas
tricolores, no más de 50, pero lo que sobraba era el ánimo,
la alegría y el deseo de hacer sentir en la medallista olímpica
y su familia la solidaridad de, como dicen por acá "la raza de Neza".
Una manta con la leyenda "Neza, tierra de campeones. Bienvenida,
Belem de plata" hizo sonreír apenas a la agobiada pedalista.
Arriba del templete intentaba mantener la sonrisa, sin
lograrlo. El cansancio acumulado por el cambio de horario, el largo vuelo,
atender a los medios y el pausado camino de vuelta a casa la tenían
exhausta.
Apenas con el ánimo para decir a los suyos: "Felicidades,
esta es una medalla para ustedes y ¡Viva México!"; mensaje
breve, pero que provocó una respuesta unánime: "¡Viva!".
Belem abandonó el lugar custodiada por un equipo
de uniformados. Abordó un vehículo y las patrullas con las
sirenas sin callar la condujeron velozmente hasta la puerta de su casa,
en la calle de Aculman, fraccionamiento Rey de Neza -Belem es ahora la
reina de ese lugar-, donde debió atender con el mejor semblante
que pudo a sus vecinos, quienes adornaron sus fachadas con listones, focos,
coloridos carteles y hasta hicieron sonar sus estéreos a todo volumen.
A Belem apenas le empezaba a caer el veinte de
haber ganado una medalla olímpica. Su entrenador, Oscar Echavarría,
explicaba la estrategia de la prueba.
"No es que se haya cansado cuando parecía que se
quedaba atrás, sino que tomó un descanso para emprender el
ataque final. Todo estaba planeado y le funcionó, que fue lo mejor",
expresó.
La pedalista se olvidó de recriminaciones
y agradeció el apoyo de autoridades y empresas
Quiero que haya más gente como yo, indicó
la medallista Belem Guerrero
Dos récords nacionales y el campeonato mundial,
sus metas; paulatino, el cambio a pruebas de ruta
ABRIL DEL RIO
Lejos de autocondolerse por las dificultades que pasó
durante su preparación, Belem Guerrero agradeció el respaldo
que le habrían dado autoridades y empresas rumbo a la obtención
de la medalla de plata en la carrera por puntos de los Juegos Olímpicos
de Atenas 2004.
"No tengo muchas palabras; se me hace un nudo en la garganta,
y lo primero que quiero decir es que espero que les haya gustado, que me
siento orgullosa de ser mexicana, de ser de Nezahualcóyotl y de
representar dignamente al estado de México", expresó la ciclista
recibida ayer en el aeropuerto capitalino por tumultos de familiares, amigos
y trabajadores, así como por militantes perredistas del municipio,
que se trasladaron en dos autobuses y un turibús con mariachi.
Luego
de escuchar La Negra y Dianas que le tocaron otros mariachis
que la esperaban en el salón de usos múltiples de la terminal
aérea, Guerrero Méndez dijo sentirse todavía "en las
nubes. No he caído todavía. Espero nada más ser la
misma Belem y, más que todo, quiero comentar el agradecimiento a
todos los medios de comunicación que siempre me han ayudado, aparte
de las empresas que siempre han estado conmigo, porque nunca me han dejado
de apoyar", subrayó.
Indicó que más allá de pensar si
en México se creía o no en su capacidad, "yo solamente quería
hacer mi mejor esfuerzo. El resultado fue fenomenal y me siento bien contenta
de enseñarles que se logró, que se puede, y que no solamente
yo, sino que primero fue Ana (Guevara) la que me enseñó el
camino, y de ahí en adelante seguimos Oscar e Iridia (Salazar) y
yo".
La pedalista se mostró consciente del impacto que
podría tener su logro como ejemplo entre la juventud, en torno a
lo cual comentó que no sólo quisiera proyectarse hacia los
jóvenes, "sino a todos los mexicanos: les diría que podemos
lograr todo lo que nos pongamos en mente, en meta, y forjarnos un amplio
criterio.
"A mí me hizo mi madre y mi padre forjarme en lo
que yo quería, con buen carácter, y espero que eso lo hagan
todos los mexicanos. Me encantaría que mi resultado lo pusieran
como ejemplo, y que otros dijeran: 'yo quiero mejorar eso', porque quiero
que haya más gente como yo".
Las palabras de Belem no se escucharon petulantes, prueba
de ello es que, más adelante, la pedalista de 30 años envuelta
en fama reveló sus temores: "El futuro es incierto, pero lo que
más temo en la vida es no reconocer a la gente humilde y sencilla.
Quiero ser la persona más sencilla que se pueda, y eso es lo que
más miedo me da ahorita; que pueda estar en lo alto y no pueda saber
bajar de ello".
Cuádruple medallista en campeonatos mundiales (una
plata y tres bronces) desde 1997, Belem tomará un descanso aproximado
de un mes; luego valorará con su entrenador, el cubano Oscar Echavarría,
el camino que seguirá en su propósito de concentrarse en
pruebas de ruta, el que -adelantó- deberá ser paulatino.
"La mayoría de mis metas se han logrardo, solamente
me faltan tres cosas: intentar imponer un récord nacional de persecución
individual, el de la hora y, si se me da, el Campeonato Mundial, que es
en lo que siempre he estado trabajando, y no se me ha dado".
Con la medalla en el cuello, y la corona de laureles que
apreciaba entre sus manos, la pedalista señaló que tanto
el cuadro de la bicicleta a la que le tuvo que agregar monedas para alcanzar
el peso reglamentario, como las ruedas y el casco, las donará a
"un lugar" para ser exhibidas, aunque dijo que más adelante dará
detalles acerca de la escuela que planea establecer en Nezahualcóyotl,
con la cual iniciaría el festejo de su logro.
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