Generarán más ''inestabilidad política y económica''

Insta la jerarquía católica a no legalizar los casinos en el país

LAURA POY SOLANO

Ante el riesgo de propiciar condiciones para el desarrollo de la ''inseguridad, la corrupción política y la delincuencia organizada'', obispos integrantes de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) hicieron un llamado a los legisladores de todos los partidos políticos a rechazar la legalización de casinos y casas de apuestas, pues opinan que ''sólo generarán mayor inestabilidad política y económica en el país''.

Carlos Aguiar Retes, obispo de Texcoco y secretario general de la CEM, alertó sobre los ''graves riesgos'' que implicaría para la sociedad que se aprobara la iniciativa de ley con la que se pretende ''legitimar e implantar el negocio de las apuestas, pese a que diversos estudios han demostrado sus efectos negativos no sólo porque genera adicción al juego, sino por las graves consecuencias que ocasiona en materia de seguridad pública y corrupción''.

En una declaración de diez puntos suscrita por los integrantes del Consejo de Presidencia de la CEM, los jerarcas católicos afirmaron que un auténtico desarrollo toma en cuenta el crecimiento integral de las personas y de las comunidades.

''Sin embargo, constatamos que en el actual sistema económico no se tiene como referente principal la promoción de la persona, el respeto de su dignidad ni la justicia social. En este contexto, la industria del juego y su posible legalización fortalecería más las tendencias negativas del actual sistema económico''.

Insistieron en que la economía debe estructurarse ''y rehabilitarse desde una perspectiva ética'' que contrarreste una economía deshumanizante, por lo que ''no se puede esperar un resultado positivo de la aprobación legal de casinos y casas de apuesta''.

En conferencia de prensa, Aguiar Retes aseguró que los estudios realizados en los países donde se aprobó la instalación de casinos indican que ''los índices delictivos y las mafias que controlan el negocio del juego tuvieron un crecimiento sustancial, lo que generó no sólo mayor inestabilidad social, sino política, pues a la larga estas mafias pueden controlar e influir en los procesos electorales.

''Si esto sucedió en países como Estados Unidos, Australia, España y Argentina, que contaban con un adecuado control de su seguridad pública, qué podemos esperar en México, donde la inseguridad es uno de los problemas más graves''.

Los jerarcas católicos destacaron que si bien debe existir una ley que regule los juegos y sorteos que se dan en los pueblos y comunidades, ''esto no supone la legalización de los casinos y casas de apuestas, que con el espejismo de la creación de empleos propicia que se abra la inversión a un capital nocivo que no generara un crecimiento de la economía, pues sólo se beneficia al sector más rico de la sociedad y se olvida de los menos favorecidos''.

Honestidad e información

Sobre el cuarto Informe de gobierno del presidente Vicente Fox, Rogelio Cabrera, obispo de Tapachula y vocal del Consejo de Presidencia de la CEM, aseguró que el Ejecutivo federal ''debe informar con claridad y honestidad sobre lo que ocurre en el país y dar certidumbre en el rumbo que deberá tomar México en los próximos años''.

Agregó que como representante de una de las instituciones más importantes del país, el presidente Fox ''debe dar un buen ejemplo de lo que es informar de forma honesta y clara para dar fortaleza al país y definir hacia dónde se dirige el desarrollo de nuestra nación''.

Es el momento, indicó, de que el Ejecutivo federal ''realice una autorreflexión sincera'' sobre los problemas que aquejan al país, sin la cual no se podrán resolver ni atender las demandas más urgentes.