Capturan a 4 presuntos responsables; lo habían plagiado

Asesinan a administrador de aduanas del aeropuerto

AGUSTIN SALGADO

Durante las primeras horas del viernes, José Noé Garduño, administrador de aduanas del Aeropuerto Internacional Benito Juárez, fue secuestrado y asesinado. Al parecer la intención de los victimarios era pedir rescate por liberar a Garduño, pero al verse descubiertos por efectivos policiacos optaron por asesinarlo y darse a la fuga.

Luego de una persecución, en el sur de la ciudad, se logró la detención de cuatro sujetos, aunque los tripulantes de un vehículo que servía como muro pudieron darse a la fuga.

Minutos antes de la medianoche, Francisco González, subalterno de Noé Garduño, fue interceptado por tres sujetos cuando salía del aeropuerto. A punta de pistola lo obligaron a subir a un automóvil Ford Grand Marquis negro, con placas PMH-1090 del estado de Michoacán.

El grupo se dirigió a la zona de Villa Coapa, en la delegación Tlalpan, donde obligó a González a citar a su jefe en un restaurante de la avenida Miguel Angel de Quevedo.

Más tarde José Noé Garduño arribó al lugar de la cita, y en cuanto bajó de su automóvil fue interceptado por los sujetos. De acuerdo con el reporte policiaco, en un descuido Francisco González logró huir de sus captores.

Ya con Garduño en su poder, los individuos se dirigieron hacia el Periférico; al parecer un Chevy Monza azul les sirvió de muro.

Los tripulantes de la patrulla 6985 de la cuarta coordinación territorial de Tlalpan reportaron que siguieron a los vehículos con la torreta apagada, mientras solicitaban ayuda al puesto de mando de la Secretaría de Seguridad Pública. Los secuestradores se percataron de que habían sido descubiertos y emprendieron la fuga, pero fueron detenidos en la glorieta de San Jerónimo, en Periférico Sur.

Al verse copados por varias patrullas, los ocupantes del Grand Marquis descendieron y trataron de escapar a pie, pero finalmente fueron capturados. Dentro del vehículo se encontraba el cadáver de Noé Garduño, con un impacto de bala en el rostro.

Sergio Quintana Hernández, Alberto Sánchez Amezcua y Juan Carlos Ochoa Luke fueron sometidos por los policías y se les decomisó una pistola calibre 38 y tres teléfonos celulares.

Ochoa Luke se identificó con una credencial falsa del Estado Mayor Presidencial, matrícula B-7602280, como capitán primero de caballería. Horas después, la Presidencia de la República desmintió en un comunicado que en la Secretaría de la Defensa Nacional laborara un sujeto con ese nombre.

Antes de que los individuos fueran presentados a la agencia 24 del Ministerio Público, uno de los celulares decomisados sonó y un uniformado fingió ser del grupo de secuestradores. Quien hablaba era un taxista, de nombre Luis Daniel García Alzate, quien preguntó dónde estaban. El policía le indicó que en la esquina de Revolución y Barranca del Muerto, donde finalmente fue aprehendido.