ITACATE

Cristina Barros y Marco Buenrostro

Atlas gastronómico

EL 11 DE SEPTIEMBRE el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) rindió un homenaje a Gabriel Moedano, quien rodeado por colegas, familiares y amigos, presentó el disco Guelaguetza. Dar y recibir; tradición perenne de los pueblos oaxaqueños, interpretado por la Banda Filarmónica de Yatzachi el Bajo, Oaxaca, que iluminó la tarde con sus interpretaciones.

DURANTE 48 AÑOS, Moedano ha investigado la cultura de nuestro país, en especial la música. Viajar por el campo de México y apreciar las expresiones culturales de las distintas etnias originarias de este país, ver sus fiestas y estar en su trabajo diario, entender los ciclos ceremoniales y su relación estrecha con la agricultura, sólo se puede lograr con una mirada cálida como la que Gabriel Moedano trasluce en sus trabajos y en su relación con las comunidades con las que ha estado en contacto.

LO PODEMOS VER por aquellos caminos, cuidando su equipo para grabar más que a sí mismo para que llegara en buenas condiciones al lugar de la grabación. Y después escribiendo y registrando cuidadosamente datos, fechas, actos, letras de canciones con notación musical, lo grabado, preservando el material para que perdure.

PERO MOEDANO NO sólo se ha compenetrado con la música desde que fue asistente de investigación de Vicente T. Mendoza y alumno de Virginia Rodríguez, estudiosa del folclor mexicano y una de las primeras investigadoras mexicanas que se interesó en el tema de la cocina como parte del arte popular.

HACE CASI 20 años coordinó un trabajo pionero, el único que reúne las cocinas de todas las regiones del país. Junto con los otros temas que integran el Atlas cultural de México, el de gastronomía se elaboró durante la administración del historiador Enrique Florescano en el INAH.

EL GRUPO ESTUVO constituido sobre todo por antropólogos, aunque hay también historiadores como Guadalupe Pérez San Vicente. Fue asistente en el proyecto Katrin Flechsig; Dolores Avila como redactora, correctora e investigadora, y María Elena Estrada en los aspectos secretariales, fueron un gran apoyo, según refiere el propio Gabriel.

AUNQUE EL PRESUPUESTO para trabajo de campo fue reducido, siempre que fue posible se recorrieron los lugares para los que se contaba con escasa o ninguna información.

LA SERIEDAD CON que está hecho, lo convierte en un importante material de consulta para quien desee conocer las cocinas de nuestro país. En esencia la información conserva actualidad.

COMPLEMENTAN GRATAMENTE este libro los dibujos de Alberto Beltrán, quien a partir de su amplio conocimiento de México, hizo los mapas de las regiones con los platillos e ingredientes que las caracterizan.

HAY TAMBIEN IMAGENES de un grupo de reconocidos fotógrafos como el propio Gabriel Moedano, Adalberto Ríos, Carlos Blanco, Roberto Ortiz Clark y Pedro Hiriart, entre otros.

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