México D.F. Miércoles 22 de septiembre de 2004
"Los recursos se gastan en salvar a la iniciativa
privada; así no hay dinero que alcance"
Tamez y Fox se niegan a ver la realidad de la educación
superior: académicos
KARINA AVILES
Académicos de la Universidad Nacional Autónoma
de México (UNAM) respaldaron las exigencias del rector Juan Ramón
de la Fuente de que la enseñanza superior represente una prioridad
para el Estado, y lanzaron severas críticas al secretario de Educación,
Reyes Tamez, al señalar que su visión sobre el financiamiento
al sector es por demás "limitada" y en la lógica de un país
dependiente y subdesarrollado.
En entrevista por separado, la investigadora Alma Herrera,
de la Facultad de Estudios Superiores-Zaragoza, destacó que existe
una mala distribución del presupuesto, porque el gobierno federal
insiste en centrar su atención en renglones que no son prioritarios.
En
un seguimiento realizado por académicos, dijo, se observó
que el porcentaje del producto interno bruto (PIB) destinado al rescate
bancario se situaba entre 12 y 15 por ciento. En contraste, la ciencia
y la tecnología no alcanzaba ni uno por ciento del PIB.
De esta manera, añadió, no es que no haya
dinero para los proyectos sociales, sino que los recursos se gastan en
salvar a la iniciativa privada y así "no hay dinero que alcance".
Sin embargo, sostuvo, los únicos que se niegan a ver esta realidad
son el presidente Vicente Fox y su secretario Reyes Tamez.
La académica enfatizó que el conocimiento
es una fuerza productiva, pero a pesar de esta realidad México es
uno de los países que menos invierten en la generación de
conocimiento y en la formación de recursos humanos.
Expresó que más allá del llamado
del rector, lo que está en el fondo es el proyecto de nación:
"estamos ante un imperativo: hay un cambio sustancial en el financiamiento
educativo o México tendrá cada vez más asimetrías
respecto a otras naciones. Por eso no tenemos que esperar, hay que empezar
hoy".
Consideró que el argumento del titular de la Secretaría
de Educación Pública (SEP) de que "aunque invirtamos todo
el gasto del país en educación no vamos a alcanzar lo que
destinan por alumno los países que más invierten en educación
en el mundo", lejos de promover una perspectiva conjunta, representa una
visión "limitada, de perdedores".
Por su parte, el investigador Alfonso Bouzas, de la Facultad
de Economía, expresó, en el mismo sentido, que la justificación
de Tamez es "endeble" porque aquel que aprecie el papel de la educación
de un pueblo no recurriría a un argumento como el que planteó.
Señaló que la caída presupuestal
en el sector -que no es nueva- evidencia la importancia que tiene la enseñanza
para el gobierno foxista, pero también muestra que la pretensión
es que los jóvenes se formen como técnicos de mediana calidad,
en la lógica de un país dependiente y subdesarrollado.
En ese sentido, agregó, el papel que le tocaría
a México en el mundo "es por demás ingrato y las autoridades
mexicanas asumen ese papel de subordinación total". Por otro lado,
indicó que en el planteamiento del rector convergen los intereses
de estudiantes, sindicatos, académicos y autoridades universitarias.
La académica María de la Luz Arriaga, también
de la Facultad de Economía, consideró que el titular de la
SEP carece de un proyecto nacional para resolver los problemas educativos:
"no hay liderazgo, no hay ideas, no hay propuestas".
Asumir que "estamos condenados a que no exista elevación
de la calidad educativa" contradice hasta su propio discurso. "Como secretario
de Educación debería presentar su renuncia", afirmó.
Señaló que el Estado tiene claro que su
prioridad no es la educación ni la salud, y consideró que
hoy suena "demagógica" la iniciativa -hecha ley- que establece que
la inversión en educación deberá llegar a 8 por ciento
del PIB.
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