Bravo Mena acudió al fin de campaña de Porfiria Sandoval
Chilpancingo, Gro., 2 de febrero. Ante unos 3 mil simpatizantes, la candidata del PAN a gobernadora del estado, Porfiria Sandoval Arroyo, cerró aquí su campaña con la asistencia del dirigente nacional del partido, Luis Felipe Bravo Mena.
Sandoval Arroyo afirmó que no se metió al fango en que se revolcaron sus adversarios. "Ambos decían (el priísta y el perredista) que no necesitaban a los del PAN para ganar, y luego vinieron a rogar por nuestros votos. Pero jamás declinaremos, porque Acción Nacional no es electorero".
Los candidatos de las coaliciones Todos por Guerrero, Héctor Astudillo, y Guerrero será mejor, Zeferino Torreblanca, "solo tienen la propuesta de compra y venta, por eso, ante ese derroche de recursos, ante los acarreos, ante la compra de conciencias, el PAN sigue agitando conciencias".
Por su parte, Bravo Mena llamó a los ciudadanos del estado a liberarse de la "opresión de los caciques que tanto ha ofendido y humillado a este pueblo. "Guerrero requiere de justicia y de oportunidades de desarrollo, lo que no han dado estos 70 años de gobierno del PRI; no hay resultados o frutos", dijo.
Sorpresivamente llegó al acto Silvino Mosso Porfirio, alcalde con licencia de Zapotitlán Tablas, sobre quien pesan dos órdenes de aprehensión por su presunta responsabilidad en el asesinato de seis indígenas, el 11 de mayo de 2002, cuando policías municipales y antorchistas lo rescataron de un bloqueo en Escalerilla Lagunas. El dirigente nacional panista mostró su desconocimiento del caso al afirmar que se trataba de la "guerra sucia del gobierno del estado".
Jesús Saavedra Lezama, corresponsal