Pide a los surcalifornianos votar sin miedo al gobernador
Latente, la violencia durante comicios, considera Amaya
La Paz, BCS, 2 de febrero. El candidato a gobernador por la alianza PRI-PVEM, Rodimiro Amaya Téllez, consideró que el resultado de las elecciones del próximo domingo dependerá, además de la movilización del voto leal priísta y de la definición de los muchos electores hoy indecisos, de que los sudcalifornianos "pierdan el miedo" al gobernador perredista Leonel Cota Montaño, quien -según el abanderado- ejerce un control absoluto sobre los burócratas.
Amaya Téllez militó en el Revolucionario Institucional hasta 1999, cuando se afilió al Partido de la Revolución Democrática (PRD) para sumarse al proyecto de Cota Montaño. Por unos meses fungió como secretario de Gobierno en la administración actual, posteriormente fue electo senador por el sol azteca, y en 2004, tras desertar del perredismo por no ser postulado a la gubernatura, aceptó la candidatura tricolor. Luego su cierre de campaña en esta capital, afirmó que desde su inicio la contienda tuvo el sello de una elección de Estado.
Sostuvo que para lograr que triunfe el candidato de la coalición PRD-Convergencia, Narciso Agúndez Montaño, en las elecciones del 6 de febrero, Cota Montaño ha usado recursos públicos, amén de que aplica una política de presión y miedo a la población, particularmente hacia empleados estatales, a varios de los cuales despidió por su simpatía hacia el aspirante priísta.
En entrevista, Amaya Téllez confió en que los sudcalifornianos emitirán en las urnas una decisión libre y abandonarán su temor a represalias, "hartos de un gobierno populista que sólo benefició a la camarilla que busca mantenerse en el poder".
Agregó que se han sumado a su campaña figuras panistas e incluso del PRD que como él también dejaron al PRI hace seis años, y han retornado a las filas tricolores. Aseguró haber logrado "aglutinar en este proyecto a una verdadera alianza ciudadana".
Sobre la posibilidad de que surjan conatos de violencia durante los comicios, por la intervención del aparato gubernamental, dijo "estamos preparados, llamando a la ciudadanía a que con mucho orden, pero con mucha fuerza y responsabilidad, vayan a las urnas. Estamos cuidando esta elección porque es una elección de Estado".
Consideró que está latente la posibilidad de violencia, pues "es el estilo del gobernador". Comentó que en Baja California Sur "no hay división de poderes, él (Cota Montaño) concentra todo, el líder del Congreso le dice 'patrón', la presidencia del Tribunal Judicial está en sus manos, incluso la autoridad electoral, que ya canceló las encuestas de salida y el conteo rápido el día de la elección".
Afirmó que "Leonel es autoritario. Cuando el PRI fue su contendiente, se fue sobre el PRI hasta desmantelarlo, cuando Gustavo Porras (funcionario del gobierno estatal) se salió, se fue contra él; cuando Manuel Salgado (candidato a la alcaldía de La Paz por el PRI) salió, también le corrió a toda la gente. Ahora lleva más de 70 gentes que ha corrido de su gobierno porque son afines a Rodimiro. Con Leonel no puede haber puntos de vista distintos a los suyos, porque estás con Dios o con el diablo".