El tema, asunto de Estado, coincide con Cárdenas Batel

Encomia Creel el guiño de Bush al acuerdo migratorio

ALONSO URRUTIA ENVIADO

Morelia, Mich., 3 de febrero. El titular de la Secretaría de Gobernación, Santiago Creel Miranda, y el gobernador de Michoacán, Lázaro Cárdenas Batel, coincidieron en que alcanzar un acuerdo migratorio con Estados Unidos debe ser ''un asunto de Estado'', un elemento central en la agenda binacional, pues ese instrumento permitirá proteger los derechos humanos y laborales de los migrantes mexicanos.

En el contexto de la inauguración de la nueva estación migratoria en esta ciudad, Creel expuso que si los migrantes canalizan a México, por conducto de las remesas, unos 17 mil millones de dólares anualmente, esto significa que la derrama que dejan en Estados Unidos oscila en 160 mil millones de dólares, lo que refleja la necesidad de trabajadores y oferta de empleos.

Luego de que la víspera el presidente estadunidense, George W. Bush, apremió en el Capitolio a impulsar una política migratoria, el funcionario federal señaló que la propuesta refleja que la relación entre ambos países no puede basarse en recriminaciones mutuas, sino en búsqueda de acuerdos.

Añadió que así como el gobierno mexicano reprobó, la semana pasada, la injerencia estadunidense en asuntos internos, igualmente "saluda" esta iniciativa, que parte del principio de corresponsabilidad entre ambos países para abordar el tema migratorio.

En esta entidad, donde anualmente salen a Estados Unidos 35 mil habitantes -según datos de la Coordinación para la Atención de Migrantes del gobierno del estado-, el mandatario local, Cárdenas Batel, reivindicó la necesidad de un acuerdo migratorio como forma de atención a un sector cuya aportación a la economía nacional es cada vez más importante -las remesas representan 3 por ciento del producto interno bruto-, en especial en esta entidad, que tiene entre 2.5 y 3 millones de residentes en Estados Unidos.

La migración, ''opción de vida''

Claudio Méndez, responsable de la Coordinación para la Atención de Migrantes, estimó en 2 mil 200 millones de dólares las remesas provenientes de michoacanos, que viven principalmente en California y Chicago. Esa cifra, estimó, es casi equiparable con los 24 mil millones de pesos que tiene como presupuesto el gobierno de Michoacán y es equivalente a 12 por ciento del total de remesas que llegan al país.

Michoacán, de hecho, disputa con Zacatecas el título de entidad más expulsora de migrantes a Estados Unidos, y es también la que se ha colocado en el primer sitio en el programa denominado Tres por Uno, el cual consiste en que por cada dólar enviado por los migrantes, los gobiernos federal, estatal y municipal aportan otro, cada uno.

En entrevista, el funcionario estatal indicó que los michoacanos representan 13 por ciento del universo migratorio; sin embargo, no sólo la pobreza o la necesidad de empleo alienta este fenómeno, sino es ya una cultura en la entidad.

La oficina creada por la actual administración perredista -expuso- pretende que la migración no sea vista como necesidad ante la pobreza, sino ''como opción de vida''. De ahí que se busque que las remesas tengan un efecto productivo en los municipios de mayor expulsión.

Explicó que entre las aportaciones que se ha buscado con esta oficina destaca también la asistencia jurídica a los migrantes michoacanos que residen en Estados Unidos. Existen convenios con barras de abogados de ese país para asesorar a los connacionales en la defensa de asuntos laborales o legales.

El delegado regional del Instituto Nacional de Migración (INM), Javier Ibarrola, destacó, en su turno, que la migración ha significado la salida de gran parte de la población económicamente activa de la entidad. Se va la gente de entre 16 y 40 años, y sólo quedan niños, mujeres y ancianos.

Ante ese fenómeno, hay familias cuyo único ingreso es el envío de recursos de parientes en Estados Unidos. Estimó que alrededor de 20 por ciento del dinero enviado es invertido en proyectos productivos o en infraestructura dentro del citado programa federal.

La comisionada del INM Magdalena Carral manifestó, en su oportunidad, que la creación de la nueva estación migratoria forma parte de un programa que pretende desalentar la utilización de cárceles habilitadas para albergar migrantes, pues el concepto que tiene el gobierno mexicano es precisamente de no criminalizar el fenómeno migratorio; no ver al migrante como delincuente.

Mencionó que en este año se crearán seis nuevas estaciones , lo que reducirá el número de cárceles municipales utilizadas para alojar a migrantes.