No afectará la salida a Costa Rica, aseguraron Kikín Fonseca y Oscar Pérez
Con sus seleccionados, Cruz Azul enfrenta al Morelia en duelo de invictos
Estuve tenso en mi regreso a la selección nacional, aceptó el guardameta cementero
Oscar Pérez, portero del Cruz Azul, admitió haberse sentido "tenso" durante el partido del miércoles, cuando el Tricolor visitó a Costa Rica, en el que cometió un error que significó el único gol en contra. Sin embargo, se dijo tranquilo y en buena forma para defender este sábado el marco ante Morelia.
La Máquina, superlíder del torneo local, cerró ayer su preparación en las instalaciones de La Noria para el duelo que enfrentará a los dos mejores equipos, ambos aún invictos.
En conferencia de prensa, el Conejo Pérez destacó la buena racha del cuadro michoacano, rival que el torneo pasado los venció cuando los dos clubes eran los peores de la competencia.
Resaltó que la escuadra dirigida por Ricardo Ferretti "ha crecido en confianza y tiene gente de mucha calidad, capaz de desequilibrar si encuentra espacios abiertos".
Aseguró que el viaje a San José no afectará el rendimiento de Francisco Fonseca, Rafael García, Salvador Carmona, ni de él mismo, pues "nadie desconoce lo que se debe hacer en la cancha".
En cuanto a su yerro, refirió que un contrario le estorbó; "pasó frente a mí y perdí de vista el balón, pero el error me despertó porque estaba tenso, era mi regreso a la selección y el primer partido oficial", explicó. Pese a ello espera seguir siendo considerado por Ricardo La Volpe.
El guardameta destacó la participación de la afición cementera. "Parece que ya no hay boletos, el estadio estará lleno y eso nos motiva".
Y aunque reconoció las virtudes del Morelia, manifestó que La Máquina está preparada para continuar su marcha perfecta; sólo es cuestión de mantener la actitud, motivación y la unión de grupo, "y así será difícil que nos ganen", concluyó.
Al Kikín Fonseca todo le pinta de maravilla, pero rechazó sentirse un talismán por aquello de que donde pone el pie pinta la fiesta. Aceptó que su paso por Pumas fue exitoso, en la selección las cosas marchan bien y ahora los buenos tiempos invaden a Cruz Azul.
"Aquí somos 25 jugadores y cada uno pone su granito de arena... Yo sólo trato de disfrutar mi trabajo", indicó el atacante.
Ante Monarcas al Kikín no le importa quién anote, ni sabe si volverá a bailar con César Delgado para celebrar sus anotaciones. "Podemos improvisar ahí, pero lo importante es ganar", indicó entre risas, para afirmar que el equipo se divierte en cada presentación.
Enseguida posó con sus padres que lo acompañaron a Costa Rica; su mamá, Lupita Guzmán, dijo que repartirá estampitas de San Judas para que los jugadores las coloquen en sus medias, como antes lo hizo en Pumas.