Estará cuatro años más al frente del organismo al superar a su oponente con 36 votos
La relección del Tibio dividió a los Vázquez Raña en el COM
Ortiz Rubio obtuvo el apoyo de Olegario y la mayoría de los presidentes de federaciones
Muñoz Kapamas fue respaldado con firmeza por Mario y los miembros permanentes
Ampliar la imagen Mario V�uez Ra�izquierda), presidente honorario vitalicio, durante la asamblea donde fue relecto, Felipe Mu�Kapamas como presidente del Comite Ol�ico Mexicano FOTO Yazmin Ortega cortes
En inédita y acalorada asamblea que duró tres horas y media, Felipe Muñoz fue relecto por cuatro años más al frente del Comité Olímpico Mexicano (COM) al ganar con diferencia de 36 votos a Pascual Ortiz Rubio, quien tuvo el respaldo de Olegario Vázquez Raña y de la mayoría de los presidentes de federaciones, mientras que su hermano Mario apoyó con dureza al Tibio, quien salió triunfal gracias a la nutrida presencia de los miembros permanentes.
Pese a que Muñoz Kapamas tenía con anticipación la relección asegurada con las dos planillas que lo postularon y la que al final fue unificada, debió soportar una serie de impugnaciones y denuncias que le señalaron los federativos que apoyaban a Ortiz Rubio para que el voto fuera secreto, lo que propició una prolongada discusión entre dirigentes de ambos bandos que pedían escrutadores, pero la intervención de Mario Vázquez como presidente honorario vitalicio fue determinante, al pedir que la votación fuera pública y libre para demostrar "la democracia'' que hay en el seno olímpico.
Infructuoso fue el intento de Olegario para que su candidato lograra la victoria, y por más que defendió que el sufragio fuera secreto, como las asambleas del Comité Olímpico Internacional, de la cual es miembro, pidió al representante de ese organismo, el español Peré Miró, quien dijo estar allí como observador, que explicara cómo era el proceso de elección en el COI, pero hábilmente su hermano Mario, quien estaba sentado al lado del invitado en el presidium, le susurró al oído y el otro simplemente dijo que no podía opinar al respecto, porque veía "la democracia'' mostrada en el seno del COM.
Con el evidente distanciamiento público entre los hermanos Vázquez Raña, la votación abierta se realizó en 15 minutos y el Tibio ganó con 92 votos que recibió de 61 miembros permanentes y 31 federaciones, por los 56 que obtuvo Ortiz Rubio, quien tuvo 44 sufragios de federativos, la mayoría olímpicas, y 12 del resto de los personajes que cada cuatro años acuden a levantar la mano.
Aunque la democracia imperó en estas elecciones, donde por primera vez se presentó un candidato de oposición que reflejó la división que hay en el COM y la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), como lo admitieron parte de los invitados, también se vivieron momentos ríspidos entre los federativos de la planilla del cambio contra la gente de Muñoz, antes de ingresar al auditorio y en plena asamblea que comenzó al mediodía.
Los seguidores de Pascual llegaron juntos una hora antes de la cita con Alonso Pérez, presidente de la Federación Mexicana de Beisbol, y Aurora Bretón, titular de tiro con arco, y fueron recibidos por edecanes del dirigente de boxeo, Ricardo Contreras, para realizar su acreditación.
Empezó el jaloneo, pues la gente del COM impidió el acceso de 19 dirigentes que pertenecían a las federaciones no olímpicas, aunque están reconocidas por esta institución y la internacional, pues según Contreras, de pie en las escaleras les informaba que no estaban acreditados y que algunos habían delegado de última hora a un representante temporal.
Adolfo Baca, de racquetbol; Alfredo Iñiguez, de montaña y escalada, con copias de los estatutos del COM, defendían su derecho de ingresar a la asamblea no sólo para emitir un voto, sino dos, como hacen las federaciones olímpicas, porque están reconocidas por la Federación Internacional, aunque no forman parte del programa en justas veraniegas.
Sonó el grito: ¡maldito cacique!
En medio de un centenar de reporteros, Pascual Ortiz amenazó con abandonar la asamblea si no dejaban entrar a las federaciones que representaba e incluso habló hasta de presentar una demanda y la presión ejercida surtió efecto, porque en esos precisos momentos arribaba Mario Vázquez con sus guardaespaldas y apenas alcanzó a decir entre la muchedumbre "esto es la democracia'', mientras Contreras apresuró el paso no sin antes escuchar el grito de "maldito cacique''.
Francisco Maciel, de tenis, y Jesús Topete, miembro del COM ni gafete alcanzaron y tampoco podían entrar, lamentando la sería situación del deporte nacional. Luego se les vería levantar la mano entre la familia olímpica para dar su voto a Muñoz.
Como no hubo acceso para los reporteros, la acalorada asamblea se observó por una pantalla de televisión en el anexo del comedor, donde se vio a un Mario Vázquez con el gesto duro y la ceja arqueada, pero siempre ordenando con las manos al Tibio para ceder la palabra de un seguidor o callar la de algún oponente, bajo el amparo de los estatutos del COM, según la interpretación que daba Muñoz.
Cantada la victoria, el nuevo comité ejecutivo 2005-2009 quedó conformado por algunos federativos que repitieron el cargo como Mariano Lara Piña (atletismo) y José Luis Aguilar (deportes invernales) en las vicepresidencias; Contreras, en la secretaría general; Artemio Izquierdo, prosecretario y Mario García (handball), así como la inclusión de Ivar Sisniega, Luis Razo, Juan Manzo y Jorge Castro, en las vocalías.
El impugnado Fernando Corona presentó su renuncia tras rendir su informe financiero como tesorero del COM y en su lugar quedó Javier Rosas, de la Federación de Triatlón, aunque de todos modos seguirá trabajando con el cargo que tiene como director general de la institución.
Después de tomarse la protesta al nuevo consejo, Muñoz Kapamas prometió más cambios en el COM y aseguró a las federaciones que no le dieron el voto que no habrá represalias y pugnó por la unidad.