"Somos prisioneros de conciencia", dice al dejar La Palma
Libre, uno de los Cerezo; dos más continúan presos
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Alejandro Cerezo y su hermana Emiliana en Almoloya de Ju�z, al salir el primero de La Palma FOTO Agencia MVT
Alejandro Cerezo Contreras, uno de los tres hermanos a los que la Procuraduría General de la República (PGR) detuvo el 13 de agosto de 2001 por presuntamente haber atentado con explosivos contra sucursales bancarias de Banamex y por sus presuntos vínculos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias del Pueblo (FARP), fue excarcelado ayer del penal federal de La Palma, ubicado en el estado de México.
La primera impresión que ofreció a los representantes de los medios de comunicación fue que en realidad se trata de una libertad a medias, ya que sus hermanos Héctor y Antonio aún permanecen recluidos en los penales federales de Puente Grande, Jalisco, y Matamoros, Tamaulipas, respectivamente. Además, aseguró que emprenderá de inmediato la lucha por la liberación de ellos.
Prácticamente 24 horas después de que el segundo tribunal colegiado de segundo circuito le otorgó el amparo por considerar que no existían elementos para sostener la sentencia de siete años y seis meses de prisión -por los delitos de violación a la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada, acopio de artificios y de armas de uso exclusivo del Ejército-, el menor de los Cerezo Contreras responsabilizó al gobierno foxista de la división y desintegración de su familia.
El joven, de 23 años -quien estudiaba las carreras de economía en la Universidad Nacional Autónoma de México y de sociología en la Autónoma Metropolitana- indicó que durante su estancia en el penal de máxima seguridad de La Palma fue sometido a tortura sicológica permanente, y rechazó las imputaciones que la PGR les hizo al tratar de vincularlos con los capos del narcotráfico que hasta hace unos días tenían el control de la cárcel federal.
"Es mentira todo lo que se ha dicho. Nosotros nunca organizamos una huelga de hambre en La Palma junto con los narcotraficantes. La única que hicimos fue por nuestra libertad y por una amnistía a todos los presos políticos y de conciencia. En el caso concreto de la huelga pasada, nosotros no estábamos en ella ni la organizamos, ni incitamos a nadie a que se pusiera en huelga. Entonces no hay ninguna relación con el narcotráfico de parte nuestra. Es más: el gobierno, violando las normas internacionales, nos pone en un lugar compartiendo el espacio con presos comunes, cuando somos prisioneros de conciencia" explicó.
Alejandro Cerezo fue detenido el 13 de agosto de 2001 cuando arribaba a la casa de su hermanos Antonio y Héctor, y acusado con éstos como presuntos responsables de las explosiones ocurridas en tres sucursales bancarias del Distrito Federal, actos que fueron atribuidos a las FARP.
Vestido con pants gris y huaraches, en punto de las 18: 25 horas traspasó la aduana principal del penal donde estuvo recluido tres años y siete meses. En la garita fue recibido por su hermana Emiliana y por compañeros de la universidad que, desde la madrugada, se apostaron en las puertas de la penitenciaría a esperar su liberación.
Por la mañana, la abogada Bárbara Zamora, defensora de los hermanos Cerezo, indicó en entrevista telefónica que era una "arbitrariedad" el hecho de que Alejandro no hubiera sido liberado desde el pasado lunes, día en que obtuvo el amparo.
Horas más tarde, la litigante refirió que un error administrativo retrasó su liberación casi 24 horas. Y es que la resolución del segundo tribunal colegiado de segundo circuito, que le otorgaba la libertad inmediata, se dictó a las 18 horas del lunes, pero en lugar de haberse notificado a las autoridades penitenciarias de La Palma, el segundo colegiado informó de la resolución al segundo tribunal unitario.
Este último espero 16 horas antes de notificar a las autoridades carcelarias, es decir, fue ayer a las 10:50 horas cuando el actuario del tribunal notificó a las autoridades del penal de la determinación que revocaba la sentencia de siete años y seis meses impuesta por el segundo tribunal unitario del estado de México en diciembre de 2003.
Alejandro Cerezo admitió haber tenido el mismo temor desde que conoció la resolución que le devolvía la libertad.
-¿Qué le dices al gobierno después de tres años y siete meses de prisión? -se le preguntó afuera del penal
-Hipócrita e injusto.
Asombrado por el tumulto de cámaras y reporteros, reiteró que sólo pretendía disfrutar de su libertad y de su familia.
-¿Vas a contrademandar al gobierno por el tiempo que estuviste en prisión?
-No tendría caso, sería perder el tiempo.
Posteriormente, en un enlace con el noticiario Hoy por Hoy, de Javier Solórzano, reconoció que cuando fue detenido "pensaba que me iba a morir, pero tuve suerte.
"Ahora voy a luchar por la libertad de mis hermanos, Todo el coraje y odio lo transformaré en creatividad para luchar por la libertad de mis hermanos", reiteró.
Tanto Bárbara Zamora como Emiliana Cerezo y un grupo de intelectuales que acudieron ayer a expresar su solidaridad a la familia Cerezo Contreras se mostraron sorprendidos por la resolución del segundo tribunal colegiado, ya que sólo a Alejandro le otorgaron el amparo, pero a Antonio y Héctor les ratificaron la sentencia de siete años y seis meses de prisión, a pesar de que los tres fueron acusados por los mismos delitos.
Los intelectuales Francisco Martínez Marcué y Carlos Perzával anunciaron que la próxima semana tendrán una reunión con el secretario de Gobernación, Santiago Creel Miranda, para exigirle la liberación inmediata de Antonio y Héctor Cerezo Contreras, quienes fueron acusados por los mismos delitos que a Alejandro Cerezo, los que no se pudieron acreditar.