El director general del instituto presentó su primer informe de gobierno
Innecesario buscar la autonomía del Politécnico, considera Enrique Villa
Al invertir recursos autogenerados se resuelve la parte económica, refiere
La deserción escolar disminuyó 6 puntos porcentuales en 2004, destaca
Luego de las reforma fiscales que permitieron al Instituto Politécnico Nacional (IPN) reinvertir los recursos autogenerados por investigaciones, convenios o proyectos con otras instituciones, el gobierno o la iniciativa privada, "no tiene caso" insistir en la autonomía de la institución, afirmó el director general de la institución, Enrique Villa Rivera, luego de presentar su primer informe de gobierno. "Yo no la voy a apoyar ni para atrás ni para adelante".
Para Villa Rivera, el decreto legislativo que permite al IPN utilizar sus recursos autogenerados y no regresarlos, como en los tres años anteriores, a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) "nos permite tener resuelta esa parte", es decir, agregó, "ya no tiene sentido adicional seguir buscando cambios".
Sin embargo, aceptó que queda pendiente el proyecto de ley de autonomía, la responsabilidad de la propia institución en relación con la sociedad y los órdenes de gobierno federal, en términos de nombramiento de las autoridades y, por supuesto, la participación de la comunidad en la elección de esas autoridades.
"En este momento no es mi intención buscar ningún cambio adicional", insistió para explicar más adelante que el clima político que vive el país no permite garantizar con certeza lo que podría pasar si la Cámara de Diputados analizara una nueva ley para el instituto. "El clima político se tendrá que estabilizar cuando haya un nuevo Presidente de la República. En el momento en que exista una definición sobre la Presidencia, en ese momento se tendrá certidumbre del gobierno que tendrá que llegar al Politécnico Nacional", agregó.
Y ante ese clima político, subrayó que para este año y 2006 -cuando termina su primer periodo y podría buscar la relección- su tarea será garantizar la estabilidad de la institución favoreciendo el clima de respeto a las diferentes opiniones políticas, que haya discusión libre de las ideas, "pero sí estaremos atentos a que no haya contaminación al interior de nuestra comunidad".
Por otra parte, sostuvo que el problema del empleo para los egresados de las instituciones públicas de educación superior "no les atañe directamente", ya que "la responsabilidad del IPN es garantizar un egresado con alto grado de empleabilidad, es decir, con calidad y capacidad técnica y tecnológica, pero también con competencias y habilidades que hagan factible su desempeño en el mundo laboral", dijo.
Poco antes, en el auditorio Alejo Peralta del Centro Cultural Jaime Torres Bodet, y ante algunos de los ex directores del IPN -no asistió ningún representante de la Secretaría de Educación Pública, a la que está adscrito el instituto-, Villa Rivera afirmó en su primer informe de labores que en 2004 se registró en el nivel medio superior un incremento en 7 puntos porcentuales en el índice de aprobación (57 por ciento); el índice de deserción disminuyó en 6 puntos porcentuales, al pasar de 13.8 a 7.4 por ciento, y alcanzó una eficiencia terminal de 61 por ciento, 5 por ciento más que la lograda en el ciclo escolar anterior.
Respecto del posgrado, en el ciclo escolar 2003-2004 egresaron 2 mil 100 alumnos, y con la incorporación de acciones de apoyo y seguimiento a profesionistas, se registró el mayor número de graduados en los pasados años: 618 doctores, maestros en ciencias y especialistas.