Deliberado, el ataque; no querían que saliera viva de Irak, dice colega de Il Manifesto
Injustificada, la lluvia de fuego de soldados de EU: Giuliana Sgrena
Contradice la periodista italiana la versión del Pentágono: el convoy viajaba a velocidad normal
Fallecen cinco uniformados estadunidenses, cuatro de ellos en combates y uno en un accidente
Ampliar la imagen Un polic�iraqu�ubre el cuerpo de un cl�go asesinado en el sur de Bagdad FOTO Reuters
Roma, 5 de marzo. La periodista italiana Giuliana Sgrena sostuvo ante jueces que investigan el ataque estadunidense tras su liberación en Bagdad, en que resultó muerto el agente secreto italiano Nicola Calipari, que la velocidad a la que viajaba su convoy era normal y no debía causar "malos entendidos". Agregó que no sufrió "malos tratos" durante su cautiverio.
Su compañero de trabajo en el diario Il Manifiesto, Pier Scolari, señaló que el ataque fue deliberado, pues los soldados estadunidenses sabían de su traslado y no querían que saliera viva de allí porque "cuenta con información que no conviene a Estados Unidos".
Sgrena regresó este sábado a Roma, y fue inmediatamente trasladada a un hospital militar. Visiblemente cansada y con el brazo en cabestrillo, la periodista bajó la escalerilla auxiliada por dos personas, uno de ellos Scolari.
"Giuliana debe ser operada por una fractura en la clavícula izquierda", declaró Gabriele Polo, director de Il Manifiesto, periódico del que la periodista era enviada especial en Bagdad.
"Ayer le realizaron una primera intervención para extraerle el proyectil, que quizás fue el mismo que causó la muerte a Nicola Calipari", añadió.
La periodista recibió los primeros auxilios en el hospital militar estadunidense en Bagdad antes de partir de regreso a Italia.
Sgrena declaró este sábado a los jueces encargados de la investigación del ataque, que la velocidad del vehículo en que viajaba no justificaba la acción en su contra.
"La velocidad de nuestro vehículo no justificaba esa lluvia de fuego. Nuestro automóvil viajaba a velocidad normal que no debía causar malentendidos", agregó.
De esta manera contradijo la versión que dio el ejército de Estados Unidos, que alegó que la velocidad del automóvil fue la causa principal del ataque.
"No era un puesto de control, sino una patrulla que disparó contra nosotros justo después de iluminarnos con un faro", precisaron Sgrena y otro agente de los servicios secretos italianos, quien también resultó herido.
La corresponsal liberada indicó que "mientras hablaba con Nicola Calipari sobre el proceso de mi liberación, fuimos sorprendidos por una lluvia de fuego".
Calipari cubrió inmediatamente a Sgrena con su cuerpo, cuando recibió un disparo en la cabeza. El peor momento de esta experiencia aterradora, según Sgrena, fue que "el hombre que me liberó moría en mis brazos". El auto en que viajaban recibió entre 300 y 400 disparos mientras se aproximaba al aeropuerto de Bagdad.
Asimismo, Sgrena afirmó no haber sufrido maltrato alguno durante su secuestro de un mes. Su compañero, Pier Scolari, indicó que la periodista fue herida deliberadamente con el fin de matarla para ocultar información.
"Giuliana tenía información y los militares estadunidenses no querían que saliera viva", señaló al salir del hospital Celio de Roma, donde está ingresada la periodista, y mencionar que se trató de una "emboscada" estadunidense.
"Los estadunidenses y los italianos fueron avisados del paso del automóvil. Estaban a 700 metros del aeropuerto, lo que significa que pasaron todos los controles militares", subrayó Scolari.
Ante esta situación, el ejército estadunidense en Irak prometió esclarecer los hechos.
El presidente italiano, Carlo Azeglio Ciampi, recibió la noche de este sábado en Roma los restos de Calipari. El papa Juan Pablo II expresó en un mensaje su admiración por ese "gesto heroico".
El jefe de Estado, su esposa y el primer ministro Silvio Berlusconi rodearon a su viuda y sus dos hijos cuando el avión militar que transportaba su féretro cubierto con la bandera italiana llegó al aeropuerto Ciampino de Roma, poco antes de la medianoche local.
Antes, Ciampi exigió explicaciones. "Como todos los italianos, esperamos que Estados Unidos aclare esta dolorosa tragedia", anunció por la mañana.
Ciampi no se contentó con las disculpas expresadas por el presidente George W. Bush, durante una entrevista telefónica de cinco minutos con Berlusconi.
Retiro, exigen comunistas
"El presidente tiene motivos para exigir explicaciones ya que Estados Unidos es responsable de la muerte de Nicola Calipari. Lo único hay que hacer ahora es retirar las tropas de Irak", afirmó Fausto Bertinotti, secretario general del opositor Partido de la Refundación Comunista.
Por su parte, el diputado iraquí Yonadam Kanna declaró en Bagdad que Giuliana Sgrena fue plagiada por partidarios de derrocado presidente Saddam Hussein, y liberada tras pagarse un rescate.
"Se hace llamar (el grupo) los Mujaidines sin Fronteras, pero es un nombre falso, pues se trata de antiguos miembros del régimen de Saddam", afirmó.
En el terreno, la operación Río Relámpago, lanzada por el ejército estadunidense y las fuerzas iraquíes en la provincia sunita de Al Anbar, al oeste de Bagdad el pasado 20 de febrero, terminó este sábado con más de 400 detenciones en menos de dos semanas, señaló un comunicado militar de Estados Unidos.
Mientras, el ejército de Estados Unidos anunció la muerte, el viernes anterior, de cuatro soldados en la provincia sunita de Al Anbar, y de otro de sus miembros en un accidente de carretera cerca de Tikrit, al norte de Bagdad.
En Mosul, las fuerzas de seguridad iraquíes descubrieron cuatro coches bomba y al oeste de esta localidad sunita perecieron dos personas en enfrentamientos.
En la capital, cuatro iraquíes, uno de ellos una mujer, resultaron heridos en un atentado con moto bomba durante la madrugada, en el barrio sunita de Adamiya, en tanto que seis soldados iraquíes perdieron la vida hoy en dos ataques al norte de Bagdad.