BALANCE DE LA JORNADA
El clásico América-Chivas, en buen momento
Ampliar la imagen Diego Alonso festeja el gol con el que Pumas empat�ovisionalmente al Atlas FOTO Fernando Castillo/Micphotopressx
EL CLASICO DEL FUTBOL mexicano se presenta exactamente a mitad de torneo, cuando se juega un nivel aceptable y los partidos son emotivos, de volteretas y tan sorpresivos como el triunfo del Atlante sobre el hasta ayer invencible Cruz Azul.
AMERICA Y CHIVAS no llegan en su mejor momento, pero en un derby eso nunca influye en el partido ni en el resultado. Lo único cierto es que del cotejo se hablará toda la semana y el Azteca lucirá su primer lleno del torneo.
EL CUADRO TAPATIO empieza a pagar el precio de participar en dos competencias. Esta semana apenas sumó dos empates, luego de la ineficacia ofensiva mostrada ante el campeón de la Copa Libertadores, el Once Caldas, y del 1-1 que rescató ante Dorados, que estrenó técnico con Carlos Bracamontes, pero es el principal candidato al descenso.
EN EL OTRO BANDO las Aguilas mantienen el futbol ratonero que caracteriza a Mario Carrillo. El sábado en Morelia realizaron un pésimo primer tiempo, pero se repusieron para el complemento y obtuvieron un empate que les dará tranquilidad para trabajar rumbo al partido grande.
POR CIERTO, EN TV Azteca se intentó dar a este duelo tintes de gran rivalidad, pero el aficionado no se engaña con artificios de locutores y en juego sólo estuvieron los tres puntos en disputa.
EL CLASICO SE AVIZORA nivelado y desde ya se adelanta que América jugará al contragolpe, en busca de balonazos con sus tres únicos elementos ofensivos: Blanco, Kléber y López.
POCOS VISLUMBRABAN la primera derrota del Cruz Azul, después de que se mantuvo durante siete fechas no sólo sin derrota, sino con un nivel que sorprendía a los mismos Cementeros.
COMO BIEN LO HABIA definido Salvador Carmona, el Atlante es un equipo raro, gitano, que un día golea y al otro es goleado. Pero el futbol también es de estilos y los azulgranas y el Chamagol González le tienen tomada la medida al cuadro celeste, sin importar que sea el último invicto o que vaya de superlíder.
PARECE UNA OPORTUNA llamada de atención para los cruzazulinos que, comandados por el talentoso Chelito Delgado, siguen siendo, hasta esta mitad del torneo, el equipo a vencer. Un mejor marco merecía el Conejo Pérez, quien al sumar 309 partidos con el uniforme de La Máquina igualó a la máxima leyenda azul: José Miguel Marín Acoto.
RESALTA POR SUPUESTO la actuación de Tecos, que ya empataron a los Cementeros en el liderato general y están más ocupados en clasificar que en pensar en el descenso. El técnico Daniel Guzmán se ratifica como un estratega inteligente y que tiene en su tocayo Daniel Ludueña a uno de los elementos más destacados.
EL BICAMPEON PUMAS ya presiona a los punteros del grupo uno. Hasta el rector Juan Ramón de la Fuente mostraba gran preocupación cuando Atlas se imponía 2-0 en Ciudad Universitaria. Pero con esas "amígdalas" que les ha imbuido el Pentapichichi los auriazules lograron un triunfo que los hace mantener sus aspiraciones en busca del tricampeonato.
ATLAS, EN TANTO, sigue fiel a su destino: crea esperanzas, pero al final pierde. Mala semana para los rojinegros: siguen de sotaneros generales, con alarmantes siete derrotas en ocho partidos, y Alberto de la Torre recibió otra vez el calificativo de títere, ahora por parte de Alejandro Burillo.
EL QUE TUVO TAMBIEN un buen debut fue Víctor Manuel Vucetich, a quien hace algún tiempo se conoció como el Rey Midas del balompié nacional. La característica principal de sus equipos es el orden defensivo y con eso Veracruz sorprendía a un Toluca que depende en demasía del lesionado Saturnino Cardozo.
LOS TIBURONES ya están sin Rafael Herrerías, pero ahora tienen a Gerardo Gallegos, un directivo a quien se le recuerda sobre todo por su participación en el caso de los cachirules que impidieron a México asistir a Italia 90.