Prefiere dictar conferencia en Monterrey, donde fustiga el "nuevo populismo" en AL

Aznar, ausente de la conmemoración del 11-M; alega que no fue convocado

DAVID CARRIZALES CORRESPONSAL

Monterrey, NL, 11 de marzo. El conservador José María Aznar, ex presidente del gobierno español, pidió hoy aquí un minuto de silencio por las víctimas del 11-M y sostuvo: "los terroristas deben saber que van a ser derrotados y que pagarán por sus delitos ante la justicia".

Para ello "necesitamos la cooperación de todos; también necesitamos perseverancia, determinación y coraje, para no ceder nunca a su chantaje criminal; pero necesitamos también el acicate moral de las víctimas, pues ellas son las que dan sentido ético a la lucha de la civilización y la libertad frente al terror y la sinrazón", dijo ante unos 200 estudiantes y maestros del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, que lo invitaron a dictar una conferencia.

Un asistente le preguntó por qué estuvo en Monterrey en lugar de participar en los actos para recordar a las víctimas de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid. Aznar respondió que el Tecnológico de Monterrey lo invitó y el gobierno de Rodríguez Zapatero no lo convocó.

En otros temas, expresó que Cuba no es hoy el mayor problema de Iberoamérica, a pesar de que "sigue padeciendo un régimen que mantiene a su población en la opresión y la pobreza. En mi opinión, el riesgo está hoy en lo que se puede llamar nuevo populismo, movimientos que reniegan de la democracia y tienen un claro tinte antiliberal".

Sin mencionarlo por su nombre, se refirió al presidente venezolano, Hugo Chávez, como representante máximo del populismo, al afirmar: "hoy el mayor riesgo de Iberoamérica está en la ensoñación de una revolución continental, financiada por los pingües beneficios que da el petróleo, que exporta un credo antiliberal y antidemocrático por todos los países de la región".

En materia de democracia, afirmó, "si volvemos la vista atrás, vemos que el camino que ha recorrido Iberoamérica en el último cuarto de siglo ha sido ciertamente positivo, pero parece que en los últimos años asistimos a un retroceso".

El primer peligro para Iberoamérica es no creer en lo que se puede lograr, y "una de las formas de no creer consiste en buscar atajos donde no los hay", añadió.

Además, señaló el ex gobernante, otro peligro para esta zona del mundo es que hay estados que no ejercen plenamente su soberanía sobre todo su territorio, porque hay partes ocupadas por fuerzas armadas que han hecho del terror, del narcotráfico y de la extorsión su modo de vida.

"Hay que tener las ideas claras frente al terrorismo que es igual en Irak, en España o en Colombia: sólo busca imponer su proyecto totalitario."