Cierra su campaña para dirigir al sol azteca en el DF
López Obrador, único candidato del PRD: Batres
Ampliar la imagen Gilberto Ens�iga y Mart�atres, durante su cierre de campa�OTO Mar�Luisa Severiano
Ante un numeroso contingente, Martí Batres, aspirante a dirigir el PRD capitalino, dijo que para este partido no hay más candidato presidencial que Andrés Manuel López Obrador, e incluso reconoció que en caso de concretarse el desafuero en la Cámara de Diputados "sí hay un plan A, un plan B y un plan C", pero en todos esos escenarios el abanderado será el actual jefe de Gobierno, "así esté en la cárcel".
Junto con Gilberto Ensástiga, compañero de fórmula y quien busca la secretaría general del partido del sol azteca, Batres encabezó ayer su último acto masivo de campaña, que se realizó en la explanada del Monumento a la Revolución, al cual asistieron desde diputados locales y federales hasta funcionarios públicos, líderes sindicales y del comercio informal, así como dirigentes partidistas delegacionales.
Uso de recursos delegacionales
Los asistentes al acto se concentraron desde las ocho de la mañana -fundamentalmente vendedores ambulantes-, misma hora en que los organizadores desplegaban sillas, mantas, sonido, tarima, estructuras metálicas; algunos de los perredistas como parte del equipo se desplazaron en vehículos oficiales, fundamentalmente de la delegación Azcapotzalco.
Así, por ejemplo, un camión de volteo del Sistema de Transportes Eléctricos, al que se le cubrió con hojas blancas el logotipo de esa dependencia, transportó estructuras metálicas que se instalaron en el lugar de la concentración, mientras que algunas camionetas, como la de placas 2733 BZ, trasladaron a personas que portaban banderines perredistas, al igual que unidades conocidas como julias, pero que no tenían las correspondientes placas metálicas.
El acto partidista inició a las 10:30 de la mañana, cuando Martí y Ensástiga, acompañados por una decena de delegados, líderes de corrientes perredistas y diputados llegaron al punto mencionado desde la calle de Lafragua. Ya en el presidium, la delegada de Cuauhtémoc, Virginia Jaramillo, y la diputada federal, Clara Brugada, utilizaron media hora para presentar a los principales asistentes, entre los cuales llamó la atención el diputado federal Emilio Serrano, quien al ser nombrado más que aplausos recibió los conocidos cinco chiflidos. Luego, sólo dos oradores: Batres y Ensástiga.
De entrada, Batres agradeció la presencia de los "10 mil asistentes", aunque otros más aseguraban que había entre 4 y 5 mil simpatizantes. En su discurso, el ex funcionario del gobierno capitalino resaltó que hicieron la más austera de las campañas y sin ninguna confrontación interna.
Posteriormente, se refirió al desafuero y dijo que no es de confiar la palabra del presidente Vicente Fox, de que ya no hablará sobre el tema, pues "es un profesional de la mentira". Por el contrario, llamó a los perredistas a estar atentos a una sorpresa en Semana Santa.
En su oportunidad, Gilberto Ensástiga fue más concreto. Reseñó los esfuerzos que ha costado consolidar al PRD y las oportunidades que se han dejado de aprovechar para renovarlo. Incluso, subrayó: "no necesitamos manos extrañas que limpien sus derrotas con nuestros triunfos anunciados", en clara alusión a ex priístas que pretenden tomar parte fundamental en los destinos de este partido.
Criticó que dentro del sol azteca haya ganado terreno el pragmatismo y la mercadotecnia, y remarcó: "la democracia en la que creemos ha sido herida por ese tipo de prácticas" y llamó a revertir la situación.
Concluyó con el tema del desafuero al mencionar que "una disputa basada en votos y no en balazos hace posible que la resistencia civil cobre una dimensión inesperada".