El documental sobre Argentina se presentó en Festival Internacional de Guadalajara

Memoria del saqueo, espejo de la situación de México: Solanas

La película no está hecha con ánimo demagógico ni de golpe bajo, sino de reflexión y calma

El neoliberalismo es el nuevo hipercolonialismo que destroza todo, afirma el cinerrealizador

JORGE CABALLERO ENVIADO

Guadalajara, Jal. 14 de marzo. Fernando Solanas, realizador de Memoria del saqueo, que se presenta en la Sección de Largometraje Documental en el Festival Internacional de Cine en esta ciudad, es contundente y dice: "A Brasil, Venezuela y México no les ha pasado lo que a Argentina, porque no han privatizado su industria petrolera, claro que todos los días tienen presiones: el dólar alto... su deuda externa... los bancos internacionales... el Fondo Monetario..., pero, en definitiva, el gobernante que no apela a su pueblo, a sus ciudadanos, está liquidado".

El contundente documental en el que se muestra al pueblo argentino, a la gente de todos los días, a los más afectados por la crisis, en 10 capítulos, como una novela o un ensayo, menciona Solanas, está filmado con 25 por ciento de material de archivo, 40 por ciento "con mi camarita, esa cámara subjetiva que se mete entre la gente y otro resto es la cámara más objetiva que busca el gran plano general. El problema de una película de este tipo es cómo inventarla para que no sea el documental de televisión. La monté seis veces, cada 15 días me daba cuenta que rengueaba, que era larga, que faltaban conceptos, tiene niveles de simple denuncia y testimonio, pero también está la vocación de reflexionar y posee una conclusión.

"La didáctica de la cinta es clara. Tiene un traspaso de comunicación-emoción, además no está hecha con ánimo demagógico ni de golpe bajo, sino de reflexión y calma; a diferencia de Fahrenheit 9-11, que está hecha para dar la batalla y evitar la relección de (George W.) Bush, Memoria del saqueo en un réquiem después de que pasó la guerra."

Importante que la vean, dice

Solanas menciona que es importante "que venga y acompañe la película, que diga las cosas, porque le va a venir muy bien que se vea aquí, ya que es un espejo; Argentina no es México ni Venezuela ni Brasil, pero tienen situaciones similares".

Fernando Pino Solanas nació en Buenos Aires en 1936; es director, guionista, actor, productor, cinefotógrafo y sonidista. Entre sus trabajos se cuentan La nube (1998), El viaje (1990), Sur (1987), El exilio de Garde (1985, Los hijos de Fierro (1975), Perón: Actualización política y doctrinaria para la toma del poder, Perón, la revolución justicialista, Argentina, mayo de 1969: los caminos de la liberación (no estrenada comercialmente, 1969), Seguir andando y La hora de los hornos, en el que documentalmente expresa su teoría de que "el pueblo sólo tiene un camino: la lucha armada".

Recientemente fue homenajeado en el Festival de Cine de Berlín con un Oso de Oro honorario.

En un gobierno de transición

-¿Qué tanto se sigue sintiendo la crisis en Argentina?

-Desde que terminó el gobierno de Eduardo Duhalde, a finales de 2002, el país comenzó a cambiar el rumbo, torció el barco hacia el MERCOSUR, saliéndose de la ruta que tenía hacia el ALCA. El de Néstor Kirchner es un gobierno de transición, de una Argentina que está en la lona; pero realiza una política de reactivación intensa y 2003 se termina con baja inflación, 4 por ciento, y casi 9 por ciento de producto bruto y sorprende a todo mundo; en 2004 la tendencia se mantuvo, que por supuesto no es suficiente y la diferencia entre quienes ganan más y quienes ganan menos es enorme. El gobierno Kirchner no ha modificado el régimen impositivo que tenía Carlos Saúl Menen, que es uno de los más regresivos. Eso es cuanto a cifras. En relación con la gente, aunque ya no es 2002, todavía hay grandes sectores que están en la lona. Kirchner tiene 70 por ciento de popularidad lo que no significa que tenga 70 por ciento de los votos, en la historia de Argentina en momentos críticos ha sido capaz de salir a la calle y producir todo ese movimiento para cambiar el gobierno.

"Lo positivo del gobierno Kirchner es que llega en un momento que no he conocido otro igual, donde coinciden la hecatombe neoliberal y el surgimiento de gobiernos progresistas, como en Brasil, Uruguay ahora, la consolidación de Hugo Chávez en Venezuela con su formidable referendum revocatorio... en Argentina falta conformar una gran mayoría, por ejemplo el sector petrolero sigue siendo muy importante, quien no ha querido enfrentar a las petroleras extranjeras fuertes, sólo les ha impuesto restricción, no gozan de la impunidad que les brindó Menen."

Los periodistas se volvieron empresarios

El cinerrealizador considera: "El neoliberalismo es el nuevo hípercolonialismo que destroza todo. Tomando sólo el caso de Argentina liquidaron todas las empresas de servicios, privatizaron los medios de comunicación sin convocar a ningún debate ni de la sociedad ni del Congreso; hicieron un modelo de televisión y radio financiado por los anuncios de las grandes corporaciones, los periodistas se volvieron empresarios antes que informadores, y la publicidad modificó el contenido de los programas... bueno la censura fue total, eso se da en toda América Latina o nos olvidamos de Fernando Alfonso Collor de Melo o de Carlos Salinas de Gortari, quien firmó el TLC, o ese que fue presidente de la socialdemocracia internacional y que terminó masacrando a tres mil venezolanos, me refiero a Carlos Andrés Pérez... es Menem, es ese grupo de bandidos esa mafiocracia, como dicen en el documental, todo esto no se puede dar sino degradas las instituciones republicanas, sin amordazar a los medios... las leyes del petróleo y gas en Buenos Aires se votaron con falsos diputados, salió en los diarios.

"Para esto hay que democratizar a la sociedad, para evitar esta dolorosa y trágica experiencia; hablo desde la Argentina cada país debe inventar su propia salsa, como experiencia porque esto que nos sucedió se ejecutó en varios países con muchas variantes por eso Carlos Andrés Pérez y Salinas de Gortari son lo que son, unos delincuentes. Hay que democratizar a la sociedad que sea participativa, aplicar formas de democracia directa con mecanismos accesibles para cuestionar a los representantes populares.

Actualmente Solanas está trabajando en su documental Argentina latente, segundo de la trilogía, que trata de cómo respondió la gente y cómo se defendió ante la falta de comida y trabajo; la tercera y última será La nación inconclusa.

Se le preguntó si le alcanzará la vida para hacer uno que se llame La nación ya hecha o La nación perfecta y respondió: "Después de esto viviremos nuevas cosas, pero si conseguimos que en Argentina se reconstruyan los mecanismos de control y se termine con la explotación de las empresas, democratizar la justicia y los medios de comunicación, así como solucionar el problema de la educación, que en nuestros países es pésima, opresiva, no liberal y que no ayuda a pensar y terminemos con la cultura de la derrota, a lo mejor".