La Comisión de Derechos Humanos del organismo refuta las aseveraciones
Reprocha México a Naciones Unidas desdén por cumbre de discapacitados
Ginebra, 18 de marzo. En tono de reproche, el gobierno de México afirmó que la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos se muestra "ajena y desinteresada" en torno a la negociación para organizar una convención internacional que promueva y proteja los derechos de las personas con discapacidad, iniciativa a la que el país ha dedicado dos años.
Esta propuesta será una de las prioridades de México en la 61 reunión de la Comisión de los Derechos Humanos, y que, aparentemente, carece del "ímpetu y el activismo" de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Louise Arbour.
El vocero de esta comisión, José Luis Díaz, negó por su parte que exista tal desinterés. Los derechos de las personas con discapacidad son una de las prioridades de esta oficina, dijo el funcionario en respuesta a La Jornada.
En su intervención del 15 de mayo ante el segmento de alto nivel de la comisión, la subsecretaria de México para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, Pa-tricia Olamendi, hizo oficial el llamado a la Oficina del Alto Comisionado a un mayor activismo.
"La comunidad internacional está construyendo una convención que promueva y proteja los derechos de las personas con discapacidad, y para ello requerimos el apoyo del sistema de protección de derechos humanos, a fin de que podamos contar lo antes posible con un instrumento sólido, que reivindique su derecho a la no discriminación. Llamamos a la Alta Comisionada a sumarse activamente en este esfuerzo", sostuvo entonces.
El reproche lo retomó en una rueda de prensa el 16 de marzo, cuando dijo que México "no ve que la Oficina de la Alta Comisionada quiera asumir, como quisiéramos, un papel de importancia en esta negociación, en que nosotros hemos venido insistiendo por dos años; vemos, sí, mucha resistencia de parte de ellos".
-¿Cuál o por qué sería la resistencia a la que alude?
-Lo que pedimos es más activismo de su parte, que tenga un papel más activo en el proceso de negociación y también co-mo facilitador. Habíamos pedido, solicitado que dos periodos de negociación se llevaran a cabo en Ginebra y no se ha podido. Un seminario sobre la temática se canceló sin razón. Pedimos apoyo porque no es posible estar negociando una convención si la Alta Comisionada y la Oficina del Alto Comisionado son ajenos al proceso. Se seguirá negociando -respondió a la pregunta de esta corresponsal.
"Ya lo hemos hablado con ella (Louise Arbour) desde el año pasado, pero no vemos avance", insistió Olamendi. El embajador Luis Alfonso de Alva intercedió y señaló que la comisión ha designado a una persona para darle seguimiento a la iniciativa y eso es una contribución de importancia, "pero se requiere mucho más", explicaron a este diario.