Las recogieron en la calle
Guerrero: fallecen 7 menores por comer galletas envenenadas
Chilpancingo, Gro., 20 de marzo. Siete menores de edad, entre 7 y 11 años, perecieron el sábado pasado, presuntamente por ingerir galletas envenenadas que encontraron en la comunidad de Zoyapezco, municipio de Acatepec, en la región de la Montaña de Guerrero.
Este domingo por la noche el comisario de esa localidad indígena, Alvino Valencia Tizapa, informó del fallecimiento y explicó que desde la noche del viernes los siete menores presentaron síntomas de envenenamiento pero no pudieron ser atendidos a tiempo, por lo que murieron entre las 6 y las 8 de la mañana de este sábado.
Las víctimas son: Joaquín Hernández Gómez, Adriana Torres Reyes, Pedro Torres Reyes, Germán Torres Reyes, David Tizapa Valencia, Alvaro Tizapa Torres y María Tizapa Valquim.
De acuerdo con la versión del comisario municipal, los siete menores jugaban en las inmediaciones del poblado de Zoyapezco cuando hallaron las galletas tiradas en la calle, las cuales recogieron y consumieron.
María Valencia, mamá de David Tizapa Valencia, corroboró esta versión por teléfono. "Mi hijo se empezó a sentir mal y a vomitar. Le preguntamos qué había comido y nos dijo que galletas que tiraron los de la tienda del pueblo."
Los pobladores de Zoyapezco acudieron a la tienda rural de abasto popular (antes Conasupo) para preguntar al encargado los motivos por los que desechó esas galletas, quien sólo manifestó que "ya no servían". Luego del deceso de los siete menores, los pobladores, sumamente irritados, acudieron a la tienda para tratar de exigir una explicación al encargado, pero ya había huido del establecimiento.
De estos hechos tuvo conocimiento el Ministerio Público de Tlapa, quien acudió hasta Zoyapezco donde intentaron convencer a los familiares de los siete niños para que permitieran el traslado de los cuerpos a Chilpancingo, donde les harían estudios para determinar las causas del deceso.
Familiares rechazan autopsia
Sin embargo, los familiares de los siete niños indígenas se negaron y decidieron darles sepultura este domingo al mediodía en el panteón de Zoyapezco.
Los agentes ministeriales se llevaron del poblado varias galletas que serán enviadas a un laboratorio para analizarlas. En tanto, María Valencia exigió a las autoridades estatales que se haga justicia en este caso y se castigue al encargado de la tienda rural.
Estos decesos se suman a los de tres menores que perecieron en enero del 2004 en la comunidad de Laguna Seca, municipio de Tlacoapa, en esa misma zona de la región de la Montaña alta de Guerrero.
Las autoridades sanitarias determinaron entonces que las galletas habían sido envenenadas con raticida y desechadas en el basurero de la comunidad. Esa ocasión, cinco menores las comieron, tres de los cuales perecieron, sin que hasta la fecha se haya ejercido acción penal contra el o los presuntos responsables.