Usted está aquí: jueves 24 de marzo de 2005 Política Asegura Fox que Bush prometió presentar una iniciativa migratoria

''Nosotros ya hicimos nuestra tarea; el asunto está en manos del Congreso de EU''

Asegura Fox que Bush prometió presentar una iniciativa migratoria

El compromiso se logró luego de una ''reunión bilateral, yo diría personal'', que duró 20 minutos

ROSA ELVIRA VARGAS ENVIADA

Ampliar la imagen Vicente Fox, George W. Bush y Paul Martin, en la Universidad Baylor FOTO Reuters

El presidente Vicente Fox Quesada regresó ayer de Estados Unidos con la promesa de su homólogo George W. Bush, de presentar una nueva iniciativa en materia migratoria y su compromiso de venderla ante el Congreso de su país. El Ejecutivo mexicano dijo no poder dar una fecha para que eso ocurra. ''Nosotros ya hicimos nuestra tarea, ya llegamos a un acuerdo global en ese tema'', aseguró. También ponderó que el ofrecimiento del jefe de la Casa Blanca ''es muy importante y quizá no se le está dando el valor que tiene''.

El mandatario mexicano logró este compromiso, informó, luego de una reunión ''bilateral, yo diría personal'', durante 20 minutos con George W. Bush, en el rancho Crawford, cuando ambos esperaban la llegada, por helicóptero, del primer ministro de Canadá, Paul Martin, para almorzar.

Charla veloz

En ese mismo lapso, donde al parecer la charla fue veloz, puesto que según Fox tocaron muchos otros temas, ambos mandatarios convinieron en llevar a un plano de ''información de inteligencia'' todo indicio vinculado con la seguridad o la eventual presencia de grupos terroristas en territorio mexicano y evitar que ésta llegue a través de los medios de comunicación, pues generalmente no está ''controlada'' o ''sustentada''.

Durante la conferencia de prensa que habían ofrecido Fox, Bush y Martin tras sus reuniones privadas en la Universidad Baylor, el tema migratorio no se abordó por el Ejecutivo mexicano. Y Bush, que sí lo tocó, no habló entonces de que tuviese en mente presentar algún plan sobre este tema, y sólo reiteró su oferta de continuar la búsqueda de una política ''justa, razonable... con comprensión'' para los migrantes mexicanos.

Y aunque ese nuevo proyecto -que en rigor es una redición del que hiciera Bush a principios del año pasado- todavía no se conoce, Fox Quesada dijo que ya quedó todo en manos de los congresistas de Estados Unidos. ''El presidente Bush ahora va a hacer su tarea y se ha comprometido públicamente... entonces, ahora todo pasa allá a la esfera de responsabilidad del Congreso de Estados Unidos''.

Ahí, añadió, sólo los diputados, los senadores, pondrán las fechas, manejarán el calendario y llegarán, en su caso, a la aprobación. ''Ya no depende de nosotros, ya no depende del presidente Bush, salvo este compromiso de llevar la propuesta ante el Congreso''.

Expuso que la propuesta del jefe de la Casa Blanca abarcará tanto a aquellos mexicanos que están indocumentados, los futuros flujos migratorios, el respeto a los derechos laborales y humanos de los paisanos que están allá, así como la reunificación familiar para aquellos que posean ''categoría de documentado''.

Convino en que ''falta afinar detalles, eso ya lo va a hacer el propio presidente de Estados Unidos y quien él decida, o a través de quien él trabaje para llevar la propuesta al Congreso''.

Entonces, dijo un satisfecho Fox, fue una ''breve conversación, sustanciosa'', y para él, un gran avance pues, evocó, ''hace sólo un año, la última vez que nos reunimos (aquí mismo), apenas estábamos negociando y estructurando entre los dos gobiernos, del lado Ejecutivo, cuál sería la propuesta. Eso ya. Terminamos esa etapa, ya resolvimos la siguiente, que es el compromiso de presentarla ante el Congreso y falta la última partes, que es que el Congreso apruebe. Pero eso ya no depende de nosotros''.

Ese mismo optimismo irradió el jefe del Ejecutivo al referirse a las declaraciones de su anfitrión sobre los llamados ''cazamigrantes'' donde, aseguró, Bush fue ''suficientemente contundente'', tiene pleno respeto a la legalidad y asume el compromiso de su gobierno para cuidar la seguridad de sus fronteras, y no ''los particulares''.

Dijo por su parte que él demandó, exigió y advirtió que actuará ante cualquier acto ilegal, cualquier atropello a la dignidad de las personas o violación a sus derechos humanos ''por parte de estos grupos''.

A bordo del avión presidencial que lo traía de regreso a su rancho en Guanajuato para continuar sus vacaciones, el presidente Fox incluyó entre estos resultados el ''buen arreglo'' en materia de agua desde la cuenca del río Bravo, que no sólo salda, afirmó, la deuda de México con Estados Unidos -''quedamos totalmente al día''-, sino que tampoco afectará a los agricultores mexicanos, pues éstos tendrán líquido suficiente para lograr ''la cosecha más alta en términos históricos para nuestro país en materia de granos''.

También abordó con Bush -siempre en esos 20 minutos- y en un tono ''de tú a tú, presidente a presidente, sin una mesa de por medio, caminando por la finca, platicando y resolviendo'', el plan de desarrollo denominado Canal Todo Americano, sobre el río Colorado, así como el ''asunto de la preinternación'' para turistas.

Fox Quesada dijo que ese encuentro ratificó la cordialidad, la amistad, la excelente relación entre él y George W. Bush, donde ''el único elemento nuevo'' de esta ocasión fue invitar al canadiense Paul Martin, lo cual los enriqueció, pues ''no faltaron cosas que él propuso sobre la mesa y que él sugirió que tomáramos en cuenta'', y viceversa.

Latinoamérica, bajo la lupa

Expuso que ya reunidos los tres (en un almuerzo que de acuerdo con el presidente Fox incluyó camarones, pollo y pay de nuez) también se detuvieron a analizar la situación de Latinoamérica, ''casi país por país'', para, de acuerdo con cada caso, ''tratar de buscar posiciones más cercanas y uniformes entre los tres''.

Se ocuparon además del tema de la reforma de la ONU, la Organización Mundial de Comercio, donde ''estamos prácticamente cercanos en las posiciones'', y de la próxima visita al G8, donde México estará invitado a participar y que tendrá a Escocia como sede.

En resumen, dijo el mandatario, México, Estados Unidos y Canadá han pasado de ser sólo socios comerciales a tener un contrato, un convenio de asociación, y le pidió a la prensa que lo entrevistaba: ''Quisiera que ustedes registraran bien la magnitud de lo que significa eso. Es trascendente, es algo que va mucho más allá de la relación que hemos tenido hasta hoy''.

 
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