El aumento de 60% en tarifas de Gas Natural en Monterrey impactará en inflación
La CRE sirve a concesionarios y no a usuarios, critica experto
Se estudian esquemas para apoyar a consumidores de menores recursos, afirma la comisión
AMEE: las regasificadoras, opción viable para abatir precios, pero la primera operará en 2007
Ampliar la imagen Trabajadores en pozo petrolero. Pemex debe disponer de un mecanismo que le permita tener los recursos suficientes para continuar con la explotaci�e gas natural a fin de abatir precios, afirma el presidente de la AMEE FOTO La Jornada
Los incrementos de más de 60 por ciento en las tarifas de gas natural para el consumo residencial, específicamente en Monterrey, aplicadas por la compañía Gas Natural, subsidiaria de la española Repsol, revelan que la Comisión Reguladora de Energía (CRE) sirve a los concesionarios y no al público usuario, consideró Víctor Rodríguez Padilla, especialista en temas energéticos.
El experto advirtió que los aumentos en la facturación del consumo residencial, comercial e industrial será un serio obstáculo para que el Banco de México logre este año su meta inflacionaria de 3 por ciento, más- menos un punto porcentual.
Por su parte, la CRE informó que ha sostenido conversaciones con la empresa Gas Natural, con autoridades federales, estatales y municipales, así como con representantes sociales para analizar las opciones existentes y buscar una solución al problema.
Las tarifas que se aprueban refirió la CRE, son máximas, y las empresas distribuidoras pueden ofrecer tarifas menores en forma no discriminatoria, o proponer diferimientos de los escalonamientos, detalló.
Sin embargo, aclaró que el marco legal y reglamentario prevé la posibilidad de canalizar apoyos directos a través de las tarifas de distribución.
''El reglamento de gas natural establece que el otorgamiento de estos subsidios sólo puede derivarse de disposiciones de las autoridades competentes, debe ser transparente y debe cubrirse con recursos que dichas autoridades asignen para tal propósito'', recordó la comisión.
A este respecto, la autoridad regulatoria del país aseguró que actualmente se estudian diversos esquemas que tienen por objeto apoyar a los usuarios con menores recursos.
Por separado, Eduardo Andrade, presidente de la Asociación Mexicana de Energía Eléctrica (AMEE), consideró que los importantes aumentos que han sufrido los consumidores de gas natural por la inestabilidad del precio, sobre todo en el norte del país, obligan a las autoridades a replantear el esquema de generación de energía eléctrica mediante el gas natural.
Recordó que las plantas de ciclo combinado que forman parte de la actual estrategia de generación de energía eléctrica fueron planeadas cuando el precio del gas natural se ubicaba en 2.07 dólares por cada millón de unidad térmica británica (BTU, por sus siglas en inglés), mientras ahora ronda los 6 dólares.
La CRE es la autoridad que fija el precio del gas natural mensualmente; para marzo de 2005 se fijó un precio de 5.91 dólares por cada millón de BTU.
El presidente de la AMEE estimó que para abatir los precios del gas natural se debe buscar un mecanismo por medio del cual se le asigne a Petróleos Mexicanos (Pemex) los recursos suficientes para continuar con la exploración y explotación del gas natural y tratar de ser eficientes.
Sin embargo, afirmó que la eficiencia no significa dejar de consumir gas, sino aumentar la oferta. Eduardo Andrade afirmó que pese a que las tarifas son reguladas por la CRE, el proveedor original de gas natural es Pemex, y lo que hacen las empresas concesionarias es transportarlo. Las tarifas del transporte representan alrededor de 10 por ciento de la molécula de gas, por lo que la volatilidad en los precios se debe al precio internacional del gas.
México es un importador de gas con un precio referenciado con el sur de Texas, que es uno de los más altos del mundo, por ser un mercado importante, además de que nos surtimos de un país también importador neto del energético.
Eduardo Andrade aseguró que las plantas regasificadoras serán una opción viable para abatir los precios del combustible, pero aclaró que la primera regasificadora que se construirá en Altamira empezará a operar en 2007, por lo que es urgente encontrar otros mecanismos para disminuir el precio del gas natural.
Mencionó que una alternativa será el regreso a la utilización de combustóleo y carbón en la generación de energía eléctrica, lo cual podrá repercutir en la demanda y por ende en la disminución de los precios del gas. Con una generación de 6 mil megavatios mediante carbón o combustóleo eventualmente se reducirían las importaciones de gas natural en 50 por ciento, que sólo en 2004 representó una erogación de mil 715 millones de dólares.
Martes, reunión con Elizondo en busca de acuerdo
Actualmente, la española Gas Natural enfrenta protestas de los consumidores de Monterrey, Nuevo León, y eventualmente puede enfrentar un boicot, como el que sufre la anglo-holandesa Shell en Argentina, si no reduce sus tarifas del gas natural.
Se espera que el próximo martes en la reunión convocada con el secretario de Energía, Fernando Elizondo Barragán, se pueda lograr un acuerdo para abatir los precios del hidrocarburo en aquella área, ahora que se acercan las temperaturas más altas del año.
Por otro lado, Petróleos Mexicanos (Pemex) aseguró que contuvo en 2004 la tendencia decreciente en la participación de la oferta nacional de gas natural con relación a las importaciones que se realizan para abastecer la demanda interna, debido a la mayor disponibilidad de dicho energético que permitió a Pemex Gas y Petroquímica Básica alcanzar niveles históricos de producción, destacando el del pasado noviembre con 3 mil 208 millones 800 mil pies cúbicos diarios.
Durante los últimos cuatro años de la presente administración gubernamental, la dinámica de la demanda de gas natural en México se ha mantenido por encima de la capacidad de respuesta de Pemex. En 2004 las ventas del este hidrocarburo aumentaron 5.1 por ciento con respecto a 2003 y 33.8 por ciento (695 millones 600 mil pies cúbicos diarios) comparadas con el año 2000.
El crecimiento en la demanda de gas natural en el país fue impulsado por la reactivación de la economía y, en especial, por el sector eléctrico que por razones ecológicas y económicas ha multiplicado sus requerimientos de este combustible hasta constituirse en el principal consumidor de México.