Usted está aquí: miércoles 30 de marzo de 2005 Opinión ASTILLERO

ASTILLERO

Julio Hernández López

Torcidísimo

Procuraduría rinconera

Golpes "jurídicos", intención política

Nahúm y Espino, otro complot

A CONFESION DE parte, relevo de pruebas: el presidente del comité nacional panista ha acusado a la Procuraduría General de la República (PGR) de haber manejado con "torcidísima intención" un caso presuntamente jurídico que acabó siendo un golpe político en el marco de un proceso electoral sucesorio. Manuel Espino, el hombre que llegó a la cúpula formal blanquiazul en alianza con Vicente Fox y Marta Sahagún, aseguró en conferencia de prensa que tiene la "sospecha fundada" de que "desde algún rincón" de la militarizada procuraduría federal hubo enroscamientos y contorsiones de la legalidad para tejer "una jugada" contra el PAN, que no sería la primera elaborada desde esos recovecos macedonios contra el partido presuntamente en el poder.

EL COMISIONADO DE El Yunque para conducir el PAN, el citado Manuel EsPinos, dijo incluso que el caso de quien fue coordinador de giras presidenciales, Nahúm Acosta Lugo, habría sido "construido sobre supuestos y no sobre hechos", y que "ahí hay algo que no está bien", una especie de "lado oscuro", pues no es normal que luego del tremendo escándalo armado por el presunto espía del narco en la casa presidencial "de repente haya dejado de ser tema y se haya echado en el olvido". Los señalamientos de quien comparte el mando nacional panista con la omnipresente señora Marta confirman, desde un inmejorable punto de vista interno, que es un gran torcedor el general Rafael Macedo de la Cancha (este último apellido ha sido adaptado a las necesidades deportivas del caso, no sólo en recuerdo de andanzas futboleras con Carlos Ahumada, sino también por la vocación de armar vistosas jugadas de córner, es decir, en tiros de esquina o rincón).

RECUERDE EL DESAFORABLE lector que la PGR dio a conocer en pleno proceso electoral partidista el expediente de El Encin..., no, perdón, de Nahúm Acosta Lugo, a quien se acusó de haber construido un camino hacia un hosp....no, perdón, de haber sido un infiltrado de bandas de narcotraficantes para conocer los movimientos presidenciales, al grado de haber puesto en riesgo, decían en la PGR, la seguridad del esposo de la señora copresidenta. La intención de lastimar a Manuel Espina e inhabilitarlo para que no pudiera seguir adelante con su proyecto alternativo de partido estaba tan a la vista desde el primer momento que no escapaba ni siquiera a un tecleador despistado como el que aquí firma. El estilo M de la C era más que evidente: maniobra electorera, retorcimiento institucional con propósitos facciosos, uso del poder represivo para ajustes de cuentas o acomodos grupales, todo aderezado con bonitos discursos sobre el estado de derecho, la inviolabilidad de la ley y otras rutinas verbales que para mejor deleite del público eran pronunciadas con ceño fruncido, aire de solemnidad extrema y vista puesta en el más allá (tal vez para que nadie se fijara en lo que sucedía más acá).

EL USO DE la PGR como cuerno de chivo produjo en su momento resultados políticos contundentes, pues entre otras cosas llevó a Los Pinos, a un breve arraigo dialogante, al Hijo Desobediente que hasta entonces era el tal Espino, para que a pocos días del desenlace interno panista se fraguara una ultraderechista alianza concebida y operada por el gran jefe yunque, Ramón Muñoz. Esa negociación, hecha con la pistola PGR sobre la sien ya para entonces nada espinosa, entregó al rehabilitado Manuel el cascarón de la presidencia nacional panista, desinfló a la corriente de Felipe Calderón e incluso jubiló al muy sentimental Carlos Medina Plascencia, abrió el paso a la señora Marta para que se encaramara en el CEN y en la Comisión Política panista, consolidó las aspiraciones del ya para entonces muy maltratado y devaluado Santiago Creel, y preparó el camino para que el propio jefe Muñoz salga del virtual clandestinaje palaciego y sea llevado a Bucareli en relevo del Hombrecito actual en caso de que finalmente le cumplan la promesa de hacerlo candidato oficial Totalmente Los Pinos.

PERO NO TODO HA de ser desafuero y torcimientos. Por Acapulco paseaba ayer con cualquier pretexto la copresidenta de la República (esta vez era la instalación de una tal "Red de Atención de Centros de Integración Juvenil"), lanzando bendiciones y exoneraciones al gobernador saliente de Guerrero, René Juárez, a quien calificó de "hombre de bien", de ser "demócrata" y de ser un hombre "de compromiso con el país". (Malpensado a sabiendas de que así suele acertarse, el autor de estas líneas se entera de los elogios martísticos y se pregunta si acaso la alternancia dizque perredista encarnada por Zeferino Torreblanca fue una negociación de altura al estilo Zedillo con Fox.)

Y EN LA frontera con México, más de mil voluntarios inscritos en el Minute Man Project están listos para iniciar abril cazando migrantes que se internen ilegalmente en territorio imperial. Pero no hay atención posible para ese asunto altamente peligroso ni para muchos más que forman la bomba política y social de México (mejor la Mara Salvatrucha está ofreciendo organización para enfrentar a los vigilantes gringos, mientras el gobierno foxista no abre la boca más que con comunicados guangos, no se vaya a enojar el patroncito Bush). Fox, sus PANiaguados y sus funcionarios (en especial el general Macedo Díaz Ordaz y el secretario Porfirio Creel) sólo piensan en el desafuero y en la manera de librar las protestas que generaría tal golpe de retorcidísima intención.

FINALMENTE, LA JORNADA legislativa relacionada con el desafuero cierra con una posposición que da más tiempo para las negociaciones entre priístas y foxismo. Es obvio que el tahúr Madrazo habrá de sacar la máxima ganancia posible, sobre todo si enfrente tiene a los apostadores de ocasión sexenal que están dispuestos a dilapidar lo que sea con tal de conseguir el desafuero con el que creen podrán deshacerse del rival menos débil y mantenerse en el poder cuando menos un sexenio más, librando así (eso esperan) la historia de indagaciones y consignaciones judiciales que espera a todos esos torcedores (y torcedoras) de las leyes y las instituciones en caso de que pierdan la juguetona Mágnum PGR y la ambrosiana carabina Los Pinos en 2006.

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