Tensión en la frontera con Arizona ante acciones de Minuteman a partir de mañana
México contrata abogados en EU contra agresiones de cazamigrantes
El grupo xenofóbico puede afectar las relaciones bilaterales, advierte el alcalde de Douglas
Está considerado "extremadamente peligroso" por autoridades mexicanas y estadunidenses
Douglas, Arizona, 29 de marzo. El gobierno de México contrató los servicios de una firma de abogados de Estados Unidos para defender a los indocumentados que sean agredidos o detenidos por el grupo racista The Minuteman Project, que arribará el próximo viernes a Douglas, Arizona, en los límites con Sonora.
Este grupo xenofóbico, encabezado por Chris Simcox, propietario del periódico Tombstone Tumbleweed, está integrado por rancheros y ex militares, y es considerado por autoridades de ambos lados de la frontera "extremadamente peligroso".
Miguel Escobar Valdez, cónsul de México en Douglas, informó que ante la amenaza que representan estos cazaindocumentados la cancillería estableció un convenio con litigantes del Centro de Derechos Humanos y Derecho Constitucional, quienes tienen el propósito de identificar las acciones legales que se puedan emprender contra los particulares que cometan abusos en perjuicio de los migrantes.
Ante representantes de medios de comunicación nacionales y extranjeros, el diplomático explicó que será la red consular en Arizona la que promueva las denuncias ante las autoridades estadunidenses en caso de que se susciten detenciones ilegales por este grupo, considerado uno de los más peligrosos de los últimos años en esta región.
Manifestó que el gobierno de México giró instrucciones a los representantes de las oficinas consulares en Nogales, Tucson, Phoenix, Yuma y Douglas para que auxilien a los connacionales que resulten afectados por las operaciones que emprenderá este grupo, "porque es altamente preocupante que particulares armados realicen cacería de inmigrantes".
Explicó que se busca asegurar los derechos de los mexicanos que cruzan la frontera y promover la observancia plena del propio marco legal estadunidense e internacional, que consagra derechos para los extranjeros que ingresen a Estados Unidos, aun sin la documentación migratoria requerida.
Anunció que el lunes solicitó formalmente al subjefe de la Patrulla Fronteriza en esta área limítrofe, Arturo Guajardo, que notifique a la delegación diplomática de cualquier incidente y arrestos que realice Minuteman.
El grupo xenofóbico, con sede en California, ha reclutado más de mil voluntarios de las 50 entidades estadunidenses, así como 30 pilotos con 16 aeronaves y un importante arsenal que utilizarán en el operativo contra migrantes que iniciarán el primero de abril.
El gobierno mexicano ha condenado públicamente estas actividades porque la detención de la inmigración indocumentada corresponde única y exclusivamente a las autoridades establecidas de Estados Unidos, dijo el representante consular en esta ciudad.
"Asimismo se ha reiterado el compromiso de continuar trabajando con el gobierno de Estados Unidos en la búsqueda de mecanismos que aseguren que la migración de mexicanos sea legal, segura, ordenada y respetuosa de sus derechos", destacó.
Este grupo de civiles se ha organizado con el objetivo de evitar el cruce de indocumentados con el argumento de que Estados Unidos está siendo invadido por inmigrantes ante la insuficiencia de agentes de la Patrulla Fronteriza para salvaguardar la zona limítrofe.
Nueva expresión de racismo
Durante un encuentro con representantes de la sociedad civil de México y Estados Unidos celebrado en Agua Prieta, Sonora, el alcalde de Douglas, Ray Borane, consideró que el grupo Minuteman es "extremadamente peligroso" y pone en riesgo la estabilidad de ambos lados de la frontera.
Ante el edil de Agua Prieta, David Figueroa Ortega, legisladores sonorenses y funcionarios federales de México, Borane expresó que esta organización es más peligrosa que las anteriores que han actuado en esta frontera, pues se trata de un grupo numeroso con actitudes "viles" que pueden afectar las relaciones entre ambos países.
Indicó que estableció comunicación con la gobernadora Janet Napolitano y con el jefe del Departamento de Seguridad, Frank Navarrete, quienes se comprometieron a vigilar con un número importantes de agentes de la Patrulla Fronteriza para evitar enfrentamientos con grupos defensores de los derechos humanos de los migrantes.
Figueroa Ortega dijo que este "vigilantismo" representa una nueva forma de racismo, por lo que del lado mexicano se efectuarán patrullajes las 24 horas del día con la participación de efectivos de las corporaciones policíacas de los tres niveles de gobierno.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) reiteró ayer su condena a las actividades de "vigilantismo" que realizan cazailegales en la frontera de Arizona y Sonora, e informó que presentará denuncias en su contra ante las autoridades correspondientes, en caso de que lleven a cabo detenciones ilegales de migrantes mexicanos.
El director de Protección Consular de la SRE, Juan Miguel Gutiérrez Tinoco, se trasladará a Douglas, Arizona, para supervisar las tareas de prevención en contra de las medidas que anunciaron los cazaindocumentados.
La cancillería aseguró que ha dialogado con autoridades de Estados Unidos para garantizar el respeto a los derechos humanos de los connacionales que cruzan la frontera por la zona donde los voluntarios del proyecto Minuteman presuntamente realizarán acciones de vigilancia.
De igual manera dio a conocer que giró instrucciones a los consulados de México en la frontera con Arizona para que permanezcan al pendiente del desarrollo de los acontecimientos y presten auxilio a los connacionales.
En este sentido, el cónsul de Douglas, Miguel Escobar Valdez, informó que ha pedido a la Patrulla fronteriza que le notifiquen sobre las detenciones que hagan los cazailegales, para entrevistar a los aprehendidos y proceder en su ayuda y contra los particulares que cometan abusos en su contra.
La SRE resaltó que firmó un convenio con el Centro de Derechos Humanos y Derecho Constitucional de Estados Unidos, con el propósito de identificar las acciones legales que se puedan emprender contra quienes violenten los derechos humanos de los migrantes mexicanos.