El inmueble será cedido a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, según un oficio

Ordena la Ssa el desalojo del Hospital Juárez del Centro

Incertidumbre entre los 450 trabajadores; no saben si el nosocomio se clausurará o reubicará

Brinda al año 55 mil consultas y 3 mil 500 operaciones a personas de escasos recursos

CAROLINA GOMEZ MENA

El inmueble del Hospital Juárez del Centro, el segundo más antiguo de México, con 157 años de historia, será destinado a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), por lo que el personal debe proceder a su ''desocupación inmediata", según un oficio de la Secretaría de Salud (Ssa) que circula desde el miércoles.

Entre los 450 trabajadores que laboran en el nosocomio (médicos, enfermeras, administrativos y estudiantes) priva la intranquilidad, y determinaron en asamblea sindical llevar un escrito a la Ssa y a Presidencia, para exigir que no se cierre el hospital, porque no sólo se afectará una importante fuente laboral, sino también se dejará sin atención médica a gente de escasos recursos.

El escrito, que estará avalado por más de 200 firmas, se llevará hoy, en primera instancia, a la Ssa pero hasta ayer no se había definido la hora para hacerlo, señaló en entrevista César Alvarez Jiménez, secretario general de la sección 15 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud, quien precisó que hasta el momento no se tiene certeza sobre el destino del hospital: el cierre o la reubicación. Lo único con lo que cuentan es con copias del oficio, una de las cuales tiene en su poder La Jornada.

En el documento, que cuenta con sello de la Ssa y está dirigido a "Odón Vázquez Argot, subdirector de servicios operativos y encargado de la dirección de servicios generales" de la Ssa, se expone: ''Hago referencia a las gestiones que realiza esta secretaría con objeto de destinar a favor de la SCJN el inmueble donde se ubica el Hospital Juárez del Centro, el cual, es de su conocimiento, contempla una superficie de 23 mil 299.94 metros cuadrados que pertenecen al Patrimonio de la Beneficencia Pública y otra de 6 mil 17. 53 metros cuadrados propiedad del gobierno federal".

Dado que el oficio no precisa a quién va dirigido, pues no aparece ni siquiera el nombre del director del nosocomio, Elías Rescala Baca, entre los trabajadores existe incertidumbre acerca de cuál será el destino del hospital, más aún cuando desde hace algún tiempo circulan versiones sobre su cierre y la posibilidad de convertirlo en clínica, y que deje de ser establecimiento de segundo nivel, pues luego del terremoto de 1985 -que derribó su torre de 12 pisos (con capacidad para 800 camas) y afectó su estructura- se construyó otro hospital Juárez en el norte de la ciudad.

Según Alvarez Jiménez, las versiones de su cierre circulan desde que ocurrió el sismo, por lo cual piden a Julio Frenk, titular de la Ssa, que explique cuál será el destino del centro hospitalario y consideran que si se opta por el cierre se atentaría contra la política de ampliar la oferta de salud, especialmente para los pacientes de menores recursos.

En este sentido, durante la asamblea celebrada en el Aula de Patología, algunos trabajadores hicieron una comparación entre la política sanitaria capitalina, "que se empeña en abrir nuevos hospitales", y la del gobierno federal, que los "quiere cerrar".

El Hospital Juárez del Centro fue fundado el 23 agosto de 1847. En un principio fue conocido como Hospital de Sangre, luego como Hospital San Pablo, pues se encuentra en esa calle, en la zona de La Merced, y el 19 julio de 1872 se le denominó Juárez, en homenaje al Benemérito de las Américas. Desde el 19 mayo de 1988 se le denomina Hospital Juárez del Centro.

Según informes de la Ssa, por décadas se le identificó como ''el hospital de los pobres, al privilegiar, desde su origen, a la población con menores recursos".

El nosocomio cuenta con atención médica preventiva, curativa y quirúrgica, y dispone de unidades de urgencias, consulta externa y hospitalización. Entre sus especialidades están medicina interna, pediatría y gastroenterología. Según informes de la Ssa, "es considerado la cuna de la cirugía mexicana, tanto así que en los años 60 se acostumbraba cada año organizar un congreso nacional e internacional de cirugía".

Si ese centro hospitalario se cierra, alertaron trabajadores, se dejarán de brindar al año 55 mil consultas y 3 mil 500 intervenciones quirúrgicas, de las cuales 7 de cada 10 son de corta estancia.

El nosocomio asimismo se ha caracterizado por brindar atención al "anciano abandonado, a indigentes y alcohólicos" que viven en desamparo, así como a niños de la calle.

Ignoran detalles

Por lo pronto, Alvarez refirió que el lunes, a las 13 horas, se citó a los trabajadores a una reunión con el diputado Marco García Ayala, secretario general del gremio de la Ssa, para tener mayores detalles de la situación, y agregó que tuvo una reunión con Rescala Baca, pero que hasta ahora no hay nada más que el escrito recibido ni se sabe si los trabajadores serán reubicados o despedidos.

Pese a la incertidumbre, la tarde de ayer el nosocomio operaba normalmente.

La Jornada pudo verificar que existe división y desconfianza de trabajadores hacia sus directivos sindicales, pues durante la entrevista con Alvarez hubo varias interrupciones de empleados que le reclamaban falta de sinceridad, pues en la conversación abordó asuntos que no había mencionado durante la asamblea.

''Como secretario nunca nos has respondido. Dices que platicas con el director, y aquí no nos dices nada; ¿a quién le mientes? ¿A las reporteras o a nosotros?", le inquirió Juana Hernández, una trabajadora administrativa. Ante los reclamos, Alvarez hizo patente que en ocasiones como ésta lo importante es estar "unidos".