En la nunciatura, distingos entre "personalidades" y feligreses comunes
López Obrador y Fox ofrecen sus condolencias al representante papal
El presidente Vicente Fox y el jefe del Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, presentaron por separado su pésame por la muerte del Papa Juan Pablo II al nuncio apostólico Giuseppe Bertello. Ambos firmaron el libro de condolencias que la representación diplomática dispuso para tal efecto.
Al igual que ellos, una decena de integrantes del gobierno foxista, funcionarios públicos, integrantes de la clase política y empresarial y jerarcas eclesiásticos del país asistieron a la nunciatura para firmar dicho libro.
Para cumplir con este protocolo, la representación del Vaticano en México decidió no mezclar a las "personalidades" de la política, del mundo del dinero y de la Iglesia con las docenas de feligreses que hicieron fila para escribir algunas palabras en memoria del pontífice fallecido. Mientras que los primeros acudían a la residencia principal para firmar el libro, los demás lo hicieron en la casa antigua, vigilados de cerca por elementos de seguridad pública y de la nunciatura apostólica.
Durante la mañana, elementos policiacos cerraron la calle Juan Pablo II de la colonia Guadalupe Inn, donde se ubica la representación vaticana, y permitieron el paso únicamente a las camionetas y automóviles de escoltas de los secretarios de Relaciones Exteriores, Comunicaciones y Transportes, Agricultura, Reforma Agraria, Gobernación, Trabajo y Previsión Social, Marina y Economía, así como al senador priísta Enrique Jackson y al precandidato del PAN a la Presidencia de la República, Felipe Calderón.
Fox, siempre fiel
El presidente Fox acudió en compañía de su esposa Marta Sahagún. Sin bajarse de la camioneta que lo transportaba, el Ejecutivo ingresó a las 9 horas a la sede diplomática, donde era esperado por el nuncio Bertello, quien lo acompañó a la zona de la residencia donde estaba el libro principal de condolencias.
El acto duró menos de 15 minutos y el presidente Fox abandonó la embajada por la puerta trasera.
En el libro, el titular del Ejecutivo escribió las siguientes palabras: "Su Santidad, su presencia y amor a México siempre fue un gran acompañante para esta gran nación. De la mano caminamos hacia la unidad y la fraternidad. De la mano caminamos hacia la justicia y la solidaridad con los indígenas, los pobres y los vulnerables. De la mano caminamos en los valores universales y espirituales. A partir de la unidad de cada familia construimos la unidad de México".
El jefe del Gobierno del Distrito Fedeal, Andrés Manuel López Obrador, arribó dos horas después a bordo de su Tsuru blanco. Este acto fue también breve y al salir de la nunciatura el gobernante de la capital repitió ante la multitud y los medios las palabras escritas en el libro de condolencias: "En memoria de su Santidad Juan Pablo II, no sólo el dirigente religioso más importante del mundo, sino un hombre verdaderamente bueno y auténticamente defensor de la paz".
-Juan Pablo II se pronunció siempre en contra del neoliberalismo, ¿qué opina?
-Sí, pero no quiero politizar este momento; no voy a contestar nada, y si quieren les repito lo que escribí.
El libro estará a disposición del público hasta el próximo jueves 7 de abril, informó la nunciatura apostólica.